Gemelos Villalpando (TERMINADA)

Edit. Corazon débil

- Si, no te lo dijeron? creí decirle a una enfermera que te lo informara-

- Bueno, desperté hace poco y sólo ha estado _____ conmigo- Alonso tomó mi mano y yo sólo lo miré con gracia

- Bueno yo quería decirles eso, pueden seguir con lo que sea que hacían antes de mi llegada- ella salió de la habitación dejándonos en un incómodo silencio

- Y...- Alonso no sabia que decir

- Que haremos ahora?- pregunté temerosa de su respuesta

- Bueno, tú me quieres y yo a ti, no veo alguna razón para estar separados- mi corazón empezó a latir rápidamente con emoción

- Olvidas que no nos hemos conocido lo suficiente? No quiero que vuelvas a desconfiar de mi - susurré dolida

- ____, lo que hize fue un error y me arrepentiré toda mi vida de eso, porque si no lo hubiera hecho, ahora estaríamos tu y yo felices pero sobre todo juntos -

- Te quiero demasiado y me duele estar lejos de ti- junté nuestros labios en un beso apasionado

- Entonces no lo hagas- susurró con su vista fija en mi.

No le di una respuesta conclusa, sólo lo volví a besar y estaba segura que con eso mis palabras se quedaban cortas, nunca lo déje de amar solo tenía miedo, miedo a que él volviera a desconfiar de mi y nuestra relación se volviera tan distante y seca que ésta vez si terminaremos con el amor que nos teníamos el uno al otro

- Te parece si vamos a visitar a Aldo?, su genio debe de estar insoportable - dijo Alonso empezando forma de broma, asentí sin saber que más decir y conduje una silla de ruedas que se encontraba en la esquina de su habitación hasta a él para poder llevarlo, con cuidado puse su brazo en mi hombro y lo senté en la silla con cuidado le sonreí dulcemente y avance con la silla hasta la recepción.

- Disculpe, la habitación de el joven Adolfo Villalpando?- le pregunté a la enfermera en turno bajo, ella tecleó el nombre rápidamente y fijo su vista en mi

- 313, por ese pasillo- habló en un tono cansado, asentí satisfecha y nos dirigimos en la dirección correcta hasta encontrar la puerta con el número marcado en ella.

Oí un pesado suspiró por parte de Alonso antes de entrar así que tomé su mano mientras que con la otra manejaba la silla para reconfortarlo

- Hola Aldo- saludó amablemente Alonso mientras lo veíamos postrado en su cama mientras miraba al techo

- Hey- susurró sin vernos pero cuando su mirada se posó en la mía pude distinguir un leve brillo en sus ojos que me hizo sonreír pero su mirada se volvió otra el ver nuestras manos provocando que las separa rápidamente como un acto de reflejo

- Y...que hacen aquí? - su voz se oía áspera y dura ahora

- No..nosotros...que..queríamos verte- dije nerviosa por su mirada, eso provocaba normalemnete en mi.

- Me alegro que se acordaran de mi- su aspecto era desalineado, vestido con una bata de hospital y unas vendas en el abdomen lo hacen lucir...sexy

- Aldo estas cómodo? mamá ha dicho que te han operado, quieres algo?- la prudencia de Alonso habló tratando de evitar un escenario ostil

- Y a esa que le voy a importar yo? Acaso la vez por aquí? No, verdad? entonces eso quiere decir que le intereso una mierda igual que a todos- su mirada de nuevo se perdió en alguna parte de la habitación y sentí un pinchazo en mi pecho al sentirlo hablar así.

- Hermano no digas eso, nosotros estamos aqui- Alonso se acercó un poco más a él para tocarlo pero Aldo simplemente retiró su mano

- Toda mi vida he estado solo y si no he necesitado de alguien todos estos años que te hace creer que empezaré ahora?- preguntó con dolor en su voz haciendo que mi corazón se terminará de partir, nadie tendría que tener tanto reconoce guardado a su edad.

- Si me disculpan iré a orinar- habló Aldo hipocritamente pero su expresión se volvió pálida antes de pararse y por un segundo dejó de respirar

- Qué pasa Aldo?- pregunté al ver su reacción pero no obtuve respuesta hasta que de la nada tocó sus piernas duramente y su pulso se aceleró

- Mis piernas _____, no siento mis piernas!!!- gritó desesperado haciendo que Alonso yo nos sobresaltáramos, rápidamente corrí hasta la puerta

- Enfermera!!! Enfermera!! - Grité lo más fuerte que pude haciendo que las enfermeras corrieran hasta la habitación igual que algunos doctores.

- Necesito que salgan de aquí - el doctor nos indicó a Alonso y a mi mientras oíamos los gritos de desesperación de Aldo, aturdida asentí pero un brazo tomó mi muñeca

- Quiero que ella se quede...____ no me dejes solo, tu no, porfavor - la voz de Aldo se rompió y por primera vez pude ver  un lado nuevo de Aldo, él estaba postrado en esa cama tan asustado y pidiéndome que me quedara, volteé mi vista hasta Alonso el cual me asintió con una mueca en su rostro mientras una enfermera lo sacaba de la sala y sólo sentí como Aldo apretaba mi mano con más fuerza

- Estoy aquí contigo, no te voy a dejar solo- le dije aguantando mis ganas de llorar

- Júralo- suplicó con la voz rota y a pesar de sentir que esto mi iba a dividir entre los dos hermanos lo hice

- Te lo juro Aldo-

No sabia que iba a hacer, Alonso y yo en cierta forma acabamos de regresar pero presentía que ahora el que más me necesitaba era Aldo tan débil y frágil que no lo podía dejar.

Ahora simplemente me maldecía a mi misma por tener

Un Corazón Débil

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