Gemelos Villalpando (TERMINADA)

Edit. Cap.2

Narra TN

Estaba saliendo de historia universal, la cual se me había hecho eterna con el profesor explicándonos cosas del siglo pasado de las cuales sinceramente no sabía para que las iba a ocupar, tomé mis cosas para poder ir a desayunar pero antes tenía que pasar por Alonso al gimnasio, salí  corriendo por él pero no estaba en la entrada, así que decidí entrar y lo vi, tirado cerca de las gradas, corrí hasta él lo más rápido posible y lo ayudé a pararse para después  preguntarle:

- Quién te hizo esto?!- dije alterada al ver su cara de dolor

- Yo..so...solo me resbalé de... las gradas - ni siquiera podía hablar bien y estos golpee eran mas fuertes como para ser de una caída parecían más unos...golpes.

-Estas seguro??- pregunte dudoda

-Si,  podríamos ir a la enfermería?- asentí rápidamente y pasé su brazo por mi cuello ayudándolo a pararse para llevarlo a la enfermería, pero cuando llegamos la enfermera no estaba así que decidí curarlo yo, tomé un trozo de algodón con alcohol y lo presioné en su labio roto

- Ahhh!! eso duele - me reprendió

-Esto no parece una caída... Quien te ha gopealdo?? - me atreví a preguntar

- En verdad no tiene importancia- dijo mirando hacia otro punto en la habitación.

- Para mi si- Murmuré débilmente.

En ese momento él guardó silencio como meditando mis palabras para después soltar un suspiro

- Fueron los castores, del equipo del fútbol. - me dijo y solo pude sentir como la sangre de mi cuerpo hervía de coraje, como pudo mi hermano y sus amigos haber golpeado al pobre de Alonso que seguramente no les hizo nada. Sentí unos dedos en mi mejilla,  Alonso estaba tratando de tranquilizarme pues  seguramente habíanotado mi coraje.

- Tranquila, ni siquiera me duele tanto - murmuró con tranquilidad y yo sólo lo miré con ternura aunque eso no tranquilizaba mi coraje lo habían dejado con el labio roto, unos moretones en el abdomen, un ojo hinchado y unos cuantos moretones en brazos y piernas.
Terminé de curarlo y nos dirigimos a la cafetería para comer algo, lo dejé sentado en una mesa a la esquina de la cafetería mientras iba por una charola de comida. Pero cuando regresé mi hermano y su grupo ya estaban empezando a golpearlo.