Mírame | (Logan Henderson & Tú) TERMINADA.

Capítulo 51 // El divorcio.

__________ (tn).

Los rayos del sol invadían mi cara. Siempre me pregunté porque Kendall no le había puesto una cortina a esa ventana.

Desperté, un poco cansada, como si no hubiera dormido nada. Bostezé queriendo dormir un poco más, pero sabía que no podía. Los ojos se me abrieron al tope al recordar que tenía que estar en el juzgado a las 10:00 a.m. Y quizás ya estaba llegando tarde.

Bajé apresuradamente las escaleras, para encontrarme a Erin en la sala.

- ¡Erin!

- Buenos Días - dijo riendo -

- Perdón, es que estoy preocupada, buenos días- reí - ¿No llego tarde al juzgado?

- ¿Enserio crees que tu amiga Erin no va a despertarte para que vayas a firmar algo que te va a ser libre y te puedas casar con Logan?

- Qué cosas dices - reí - ¿Logan? No me casaría con Logan si ahora me lo pidiera

- Tú sabes que sí - sonrió - ¿Quieres café?

- No, gracias. ¿Qué hora es? 

- Las 8:00 am. 

- Debo ir a mi casa a prepararme - tomé mi bolso de ayer - Nos vemos esta noche - me acerqué a ella para abrazarla -

- Dale ________ (tn). Nos vemos - dijo ella -

Sonreí. Me dirijí a la cochera y subí a mi auto. Tenía que ir a casa y arreglarme un poco. Iba a lucir espendida para que Leonardo se diera cuenta de que estoy bien sin él, y que estoy mejor que nunca, aunque eso no sea del todo cierto.

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Estaba nerviosa, ansiosa, temerosa. Había tomado la mejor ropa de mi clóset totalmente nuevo, me arreglé lo mejor posible, volví a ponerme el pintalabios rojo que había guardado hace mucho. Sabía que todos estarían ahi, no solo Leonardo, sino toda la prensa y los medios de comunicación, y yo la verdad no tenía ganas de hablar de eso. 

Llegué tratando de no ser vista mientras estacionaba. Pero eso no era tan fácil, la prensa no era tan tonta como para no darse cuenta que ese era mi auto.

Bajé. Lo llaveé, suspiré. Emprendí la marcha hacía el juzgado y ya podía sentir como se me acercaban.

- ________ (tn), unas palabras porfavor - dijo uno -

- _________ (tn), ¿Como se presentarán hoy juntos en la premiere? - dijo otro -

Y así me había dado un choque mental. Él era mi compañero para ese día, se sentaba la lado, teníamos un discurso juntos, cosa que ahora ya no podía cambiar aunque quisiera, porque sería reorganizar todo el evento, y aunque sea la estrella, se que no puedo incluír mis temas personales en los laborales.

Seguí caminando. Me bombardeaban con preguntas, cámaras, micrófonos.

- No quiero hablar en este momento. Quizás cuando salga - fue lo único que dije -

Sentí un alivio tremendo al pasar la puerta. La recepcionista me indicó a dónde tenía que ir y se dignó en acompañarme.

- Aquí es - dijo sonriente -