Mírame | (Logan Henderson & Tú) TERMINADA.

Capítulo 47 - ¿Me has olvidado?

- ¡Oh, dios! - dije bajando del carro - ¿Esta es la heladería? ¿Nuestra heladería? 

- Si - dijo Logan - Esta es nuestra heladería

- Mira, allá esta Kendall - sonreí - ¡Entremos!

Estaba tan emocionada, que agarré de la mano a Logan estirandolo para que entre. Cuando me dí cuenta de lo que había hecho. Solo sonreí y solté mi mano. Me acerqué al mostrador.

- Hola Kendall

- _______ (tn), algo me decía que vendrías - le guiño un ojo a Logan -

- Todo es tan lindo - dije mirando cada detalle - No puedo creer que nosotros sacamos a flote esta heladería

- Y mira como esta ahora

- ¿Quieres sentarte? - me preguntó Logan -

- Claro, pero porfavor, dejame servirme mi helado Kendall

- ¡Que cosas dices _______ (tn)! Claro que no

- Hace mucho que no lo hacía - suspiré - Dame un cono

- Si insistes - me pasó uno - 

- Dos, porque Logan viene conmigo, bueno, yo vengo con él - sonreí -

- Aquí tienes

Me acerqué a la máquina. Aquello era como volver al pasado en un solo segundo.

FLASHBACK*

- ¿Esto es encerio? - dije riendo -

- Si, esto es lo que haras

- Pero, no sé como se carga esto

- Mira, solo pones el cono de helado bajo la máquina, estiras esta palanca, y cuando esta listo, la sueltas, y Wala! - hizo un movimiento raro de manos -

- No parace fácil

- Pon el cono bajo la máquina

- Ya

- Ahora estira la palanca

- Listo

- Ahora espera a que se llene

- Bueno

- Suelta, y ya tienes un sabroso helado

- Mmm.. no fue tan difícil - reí -

- ¿Viste? 

FIN DEL FLASHBACK*

- ¿________ (tn)? - dijo Logan - ¿Estas Bien?

- Si - sacudí mi cabeza - Toma, tu helado

- Pero si aún no cargaste nada

- Oh, lo siento, estoy muy despistada - reí - Ahora lo hago

Nos sentamos en la última mesa del lugar. Logan seguía siendo tan conversador como siempre lo había sido. Él sonreia y hacía que yo también sonriera, me miraba fijamente a los ojos y no podía competir contra eso. Al mirar sus ojos, su boca, todo su cuerpo, recordaba todo lo que pudimos ser y no fuimos. Quizás el por su cobardía, y yo por mi orgullo, o más por el dolor.

- ¿Cómo es que comes tan rápido? - me preguntó -

- No sé, estoy acostumbrada, cuando grababa allá, teníamos poco tiempo para almorzar, y bueno, creo que es por eso

- Me supungo - dijo - Iré al baño un rato, ¿me esperas?

- Claro que si, no iré a ningún lado sin tí - se me salió de repente -