Mi Ex-Marido Es Narcotraficante «JIKOOK»

-'ღ Capitulo XVIII'-

Los días en aquel centro pasan relativamente largos.

JungKook solo quiere tomar sus cosas y largarse de allí, pero no puede, se recuerda todos los días que esto lo está haciendo por su hijo, por su pequeño bebé.

─JungKook, te he traído un pequeño regalo como compensación por tu buena conducta, cariño. ─ Espeta el doctor Lee entrando a su habitación.

JungKook, quién se mantiene arrinconado en una esquina de la cama mordiendo sus uñas, con los ojos llorosos, solo comienza a temblar por el significado de aquellas palabras.

Los regalos no son precisamente regalos, y eso le aterrá.

Ya estuvo antes allí, y por eso no quería regresar.

─No quiero los regalos,¡No los quiero! ─ Grita encogiendose en su lugar.

─Shh... tranquilo, cielo. No tienes porque gritar. ─ Espeta en tono suave para que su paciente entre en confianza.

Pero JungKook no es nuevo en esto, y sabe lo que verdaderamente busca.

─¡No me gustan sus regalos!,¡ lleveselos !,¡No los quiero, no los quiero!

Los gritos del menor son tan fuertes que logran ser escuchados por los médicos que pasan cerca de su habitación, sin embargo; estos no hacen nada, ya que, es una reacción normal del paciente primerizo.

Solo que se les olvida que JungKook no es primerizo y que conoce todas sus mañas.

─Si sigues gritando te castigaré, cielo. Y no queremos castigarte, ¿Verdad, JungKook?, ¿Verdad que no queremos hacerlo?,¿Serás un buen paciente y aceptarás los regalos, JungKookie?, lo harás, ¿No es así?

Manipulación.

El truco más original de los malditos doctores es la manipulación hacia sus pacientes.

─No lo haré, no me obligues a hacerlo, por favor. ─ Súplica juntando sus manos mientras comienza a llorar.

El doctor Lee sonríe por el llanto de JungKook, y solo se encoje de hombros como si no le importara.

─No te estoy obligando, solo la dejaré aquí... ─ Dice dejando el contenido en la cómoda que está a lado de la cama de JungKook. ─ Y me iré, tú decides que hacer.

Cuando el doctor sale, él trata de contenerse para no tomar la marihuana, sus manos tiemblan y él mismo se las golpea cuando esta quiere tomar el polvo blanco que hay en la pequeña bolsita.

¿Cómo se supone que se va a recuperar, si en este mismo lugar le dan la droga?

Si tan solo JiMin creyera en sus palabras, él ya no estaría allí, pero su ex-marido no le cree.

Lleva tres semanas en el centro de rehabilitación, esta era la quinta vez que le traían la marihuana hasta su habitación, cuando le dijo a JiMin que en ese mismo lugar le daban dicho contenido, este no le creyó, y solo le dijo que dejara de inventar cosas, porque de esa forma no iba a lograr salir.

Grita y llora cuando ya no puede evitarlo más, sus manos son atraídas como un imán ante la marihuana.

Cuando da la primera calada llora porque su hijo es lo primero que viene a su mente. La imagen que se reproduce en esta le hace querer salir de allí y no regresar nunca más.

Para la segunda calada, tiene una imagen de su Ex-esposo con una mujer, si no se recuperaba, ¿JiMin estará con alguien más?.

─¡ Váyanse todos a la mierda! ─ Grita tirando el contenido y limpiando bruscamente su nariz. ─ ¡No quiero nada!,¡No me obligarán a nada!,¡No otra vez!

Y mientras el grita y llora por el mal que le están haciendo, el doctor Lee llama a la persona que le ha pedido ese favor.

Park SeokHo.

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