|Omnisciente |
Las cosas fueron bastante bien en el banquete de bienvenida, bajo el techo encantado, las luces de colores y el intenso ruido habían dejado sorda a los chicos, los de nuevo ingreso caminaban temerosos entre jóvenes que no dejaban de ser espectadores; en el banquete todos los chicos escuchan atentamente los anuncios de Dumbledore y a la profesora McGonagall hablar de las reglas para la selección de las casas. El banquete duró más de lo que duraba normalmente, pero había una que otra cosa podría pasar en el gran comedor luego de la ceremonia, para los chicos estar en Hogwarts era fantástico, todo era aventuras y cosas maravillosas. Ya había pasado dos semanas en las que los chicos estaban en clases; despues de la cena en el gran comedor, cada estudiante tomaba su rumbo, Michelle junto con sus amigos regresaron a la sala común, ella se sienta en el sofá y Robín a su lado. Ellos eran tan inseparables desde que se conocieron en primer año, Robin es muy centrado y Michelle muy estudiosa, habían entrado hace poco y ya tenían tres pruebas pendientes del Profesor Severus Snape, así que cuando se trataba del descanso era muy comprensible que ellos no tuvieran ganas de ponerse de pie para hacer una que otra cosa.
—Tengo una enorme flojera – dice Robín, Michelle solo sonríe y asiente dándole la razón.— Creo que me iré a dormir ya, nos vemos mañana – Michelle solo ve como Robin se va mientras ella se queda sentada sin hacer nada.
| Michelle |
Mis ojos no soportaban el sueño asi que me levanté para ir a la habitación, cuando voy a subir el primer peldaño de la escalera una mano estaba en mi hombro, Draco Malfoy había hecho aparición en el lugar, el estaba parado frente a mí con una sonrisa, lo miro aturdida, se suponía que no me hablaría como todo el tiempo, ¿qué demonios hace aquí?
—Hola Michelle– dice y me abraza, abrazo cual no respondo debido a que el contacto físico no es lo mío.
— ¿Malfoy? – digo aturdida por su presencia, en serio, es muy extraño que Draco Malfoy se acercara a mi solo porque si.—¿Necesitas algo?
—No. Bueno, si— Dijo este mientras se acomodaba el cabello.
—¿Desde cuando Draco Malfoy necesita algo? – digo y ella me mira irritada
—No necesito tu ayuda Michelle, quiero que seas parte de mi grupo– dice y la miro con la ceja alzada
— ¿Tu grupo? – pregunto con reserva
—Si, mi grupo. Eres amiga de Blaise, Robin y los dos patanes de Crabbe y Goyle; así que estuve pensando mucho en agregarte a mi clan– dice y lo miro ceñuda
—No gracias, Malfoy – digo y él me toma de los hombros
—Traté de ser bueno contigo, Peverell. – dice y le ruedo los ojos
—Mira Malfoy, yo no te pedí que me metieras a tu grupo, además no me hace falta. Aparte, hablo con los chicos porque a pesar de todos ser nuevos, no se comportaron como idiotas.— Digo mientras lo miro a sus ojos— Te tardaste un año para quererte llevar bien conmigo Malfoy—
—Siempre me chantajeas con eso— Dice mientras se cruza de brazos.— Está bien, pero no quiero ver que me ruegues estar conmigo porque la chica Eddy Carrow pasa molestandote, ok?—.
— Ah, está bien Malfoy. Sabes muy bien como manipularme—
—No es manipulación, eso no lo hace un chico de 12 años, cabeza hueca—
— Ash, como digas. Solo que no te quiero tan cerca porfavor de mi asi como tu con Pansy—Digo mientras le lanzo una leve sonrisa.
—No – dice secamente sin mirarme—¿Odio de amigos entonces, eh?, Michelle—
—Puede ser—Sonrie coquetamente, esa sonrisa creó un inmenso silencio que hizo que nos sintieramos muy incomodos, mejor dicho, yo me sentí incomoda.—Bueno Malfoy, ve a tu dormitorio—
—Buenas noches —
ESTÁS LEYENDO
Hemisferios:Michelle y el inicio de una historia Mágica[1]
FanfictionSé viene una historia acerca de una familia de prestigio, es una de las razones de por las que Michelle es reconocida, pero ella ni sabía. Algunas veces los actos de Michelle hacen ver que ella gusta de Malfoy, y si se justificaría porque Malfoy ape...