Pleasure - [Christopher Morgan] ⚠️CANCELADA⚠️

【 CATORCE 】

════ ⋆Capítulo Catorce⋆ ════

INDIFERENCIA.

Christopher.

Cartagena de Indias, Colombia. 1000 horas.

Salgo de la habitación con la ira chispeando en mis ojos. Mi celular no ha dejado de sonar con absurdos mensajes y llamadas de Alex. Al parecer, hoy todo el mundo se puso de acuerdo para joderme la puta existencia. 

Definitivamente no estoy de humor para soportar las mierdas de absolutamente nadie, me duele todo el jodido cuerpo, es como si un camión me hubiera pasado las llantas por encima varías veces seguidas, siento que mi cabeza va a explotar en cualquier instante producto de la resaca, y el hecho de que este recibiendo exigencias y presiones de mis estúpidos hermanos y mi estúpido padre, no ayuda mucho a mitigar la mierda de genio que me cargo. 

Rechazo las llamadas entrantes, no me apetece hablar con nadie, en especial con la cobarde de Vanessa, quien huyo como una idiota antes de que yo despertara está mañana. Ni siquiera tuvo el coraje de darme la cara después de que estuvimos cogiendo toda la madrugada. Lo único que me encontré cuando desperté fue su labial rojo en la mesita de noche y ya, nada más.

Aunque, a decir verdad, al menos me ahorro el típico y tedioso discurso que le doy a todas las chicas que follan conmigo eventualmente para que no se hagan falsas ilusiones conmigo.

Solo fue sexo espontaneo y pasajero, algo de una sola noche que redujo las ganas que teníamos de comernos sin piedad, y ahora que cumplí mi capricho, voy a hacer como si nada hubiera pasado entre los dos.

La base de militar de la fuerza naval se cierne sobre mí, atravieso por los diversos filtros de seguridad básicos, es un procedimiento innecesariamente lento y a la vez agotador. Suspiro frustrado cuando el cadete se tarda más de lo necesario con la verificación de mi placa; soy un jodido coronel del ejército secreto más importante del mundo, es una falta de respeto que su ineptitud me tenga esperando más de la cuenta con el culo estampado en el asiento de la camioneta, a todo el rayo del desesperante sol, mientras una puta resaca amenaza con querer estallar mi cerebro en cualquier momento.

No comprendo la razón de mi cansancio. Estoy acostumbrado a beber de más y coger como una bestia sexual en su máxima potencia. De hecho, tengo el privilegio de alardear que he podido con más de tres chicas en una noche y absolutamente todas se fueron satisfechas.

Sin embargo, Vanessa me dejo exhausto. Disfruté de su cuerpo toda la madrugada, en diferentes posiciones, pero esta mañana todo lo que me divertí con ella me está pasando factura, ya que siento que me hubiera aplastado un yunque de mil toneladas.

—Coronel Morgan, ya puede ingresar —Él soldado me devuelve mi placa, se la arrebato de las manos, ni siquiera me tomo la molestia de agradecer su incompetencia, simplemente arranco cuando las puertas se abren.