| "lo hago por ti"

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Sábado 13:30p.m.

—¡Harry! —gritó Louis desde la cocina.

El rizado se encontraba acurrucado entre las sábanas, Harry ni se movió  ante el grito de Louis.

—¡Hazz!

Nada.

—¡Hazzie!

Y ahí fue cuando Harry dio vueltas en la cama abriendo lentamente los ojos, se sentó y se estiró. Luego de unos minutos, se encaminó hacia el baño, hizo sus necesidades, se lavó la cara y los dientes, luego se cambió para luego dirigirse a la cocina.

—Lou, hola—dijo Harry sentándose en una de las banquetas de la cocina.

—Hazz, toma—dijo Louis sonriente dándole un plato con canelones.

—Oh que rico—habló sonriente llevándose un bocado a la boca.

Louis lo miró expectante una vez sentando en frente.

—¿En serio te gustó?— preguntó tímido.

—Esta delicioso—dijo contento.

—Bien, me alegro entonces—sonrieron por última vez y comenzaron a comer.

A Harry le encantaba escuchar las anécdotas divertidas de Louis y a pesar de que algunas veces contaba la misma repetidas veces le encantaba como el ojiazul se expresaba y lo feliz que era contando su vida  pero lo que el rizado no sabía es que a Louis le encantaba exagerar cada historia para ver la sorpresa en la cara de Harry y como este se reia a carcajadas cuando contaba una situación vergonzosa.

Louis realmente no sabría como volver a vivir sin su mejor amigo, Harry en tan solo pocos días se había convertido una persona importante en su vida y que actualmente admiraba. Lo admiraba por su personalidad y  lo fuerte que se mostraba cuando algo amenazaba con romper su estabilidad, mentiría si dijera que no admiraba su belleza, le encantaba recorrer su rostro, aquellos ojos bonitos, esos rizos que caian sobre su frente, las mejillas sonrojadas casi siempre que le decía algo y sus labios, dios sus labios regordetes de un color sandía suave. Realmente su mejor amigo era muy atractivo.

—¡Louis! — gritó Harry mientras golpeaba la mesa.

El ojiazul salió de sus pensamientos pestañando repetidas veces.

—Oh ¿ Que sucede?—preguntó confundido.

—¿Me escuchaste?—Harry alzó una ceja.

—C-claro.

—¿Que te dije?—preguntó apoyando los codos en la mesa y colocando su cabeza entre sus manos.

—Eeeee me dijiste que...—se hizó el de pensar –Ah me dijiste algo que tiene que ver con la comida ¿No?

Harry soltó una carcajada.

—Príncipe tonto, no —dijo Harry negando — .Te dije que si podías hablar a alguien así nos venga a enseñar surf porque nunca aprendí, ¿ sabes?—preguntó.

—Nop —remarcó la "p".

—¿Entonces vas a llamar?

—Claro, dame un minuto—contestó Louis.

El ojiazul fue en busca de su celular, habló con el dueño del complejo de casas y luego se dirigió nuevamente hacia la cocina. Se encontró con Harry lavando los platos.

—Listo —habló Louis.

—¿Que te dijeron?—preguntó secándose las manos.

—Dentro  de dos horas vendrá  el instructor —dijo.

los rebeldes-lsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora