Casa Silva

Agua y Fuego

Solid no había sido especialmente reflexivo en su vida, como miembro de la realeza paso por toda la educación que una persona de su rango merecía así que tenía muchos conocimientos, sin embargo no solía pensar demasiado sobre las emociones de los demás o de si mismo, por lo que todo lo sucedido en los últimos días le obligo a empezar a practicar la meditación, Nebra se veía bastante desgastada, incluso si trataba de evitar demostrarlo sus iris rosados perdieron su brillo, acompañado de las sombras bajo sus ojos e incluso sus hombros estaban caídos, quería hablar con elle y consolarla, pero no sabia como hacerlo y mostrarte emocional lo hacía sentir incómodo.

Entonces solo la miraba ahogarse en su tristeza.

Debido a sus pensamientos preocupados termino siendo derribado por su oponente, un miembro de menor rango del escuadrón, una chica de quince años que parecía temerosa de su represalia después de golpearlo con magia de plata, pero no estaba de humor para hacerlo, simplemente se levantó y se marchó, salió de su base sin avisarle a nadie recorriendo el Reino Noble con las manos en sus bolsillos, varias personas intentaron conversar con él de forma fallida, los ignoro a todos hasta sentarse en un parque donde varios niños corrían jugando, se concentró en como dos chiquillos molestaban a una niña mas pequeña hasta que otro mas grande llegaba para alejarlos, el niño ayudo a levantar a la chiquilla limpiando su ropa, secando sus lágrimas con su mano para después tomarla de la mano para marcharse.

Solid sonrió con amargura.

- ¿Qué haces aquí, Solid? – La voz ruidosa de Leopold Vermillion lo asustó, se encontraba a sus espaldas.

- ¿Qué te importa?

- Bueno no sales mucho de tu Palacio y es aun más raro verte sin Lady Nebra. – Explico con una sonrisa.

- Se nota que has estado pasando tiempo con campesinos que has perdido tus modales. – Señalo con burla.

- ¿Quieres que te llame "Hermano Mayor" como hace Noelle? ¿O mejor Lord Solid? – Pregunto con una sonrisa amistosa – Puedo hacerlo, solo dime cual.

- Por favor no. – Rechazó con un gesto de desaprobación, prefería que se perdiera antes de que se acercara para hablar con él - ¿No deberías estar corriendo detrás de la loca de tu hermana?

- Me gustaría ver que le dijeras eso. – Comento Leopold con malicia, a pesar de su reprimenda anterior ahora era él quien estaba siendo irrespetuoso – Hermana Mereoleona se fue al volcán o a una mazmorra, no se muy bien. – Extendió una mano - ¿Qué te parece si tenemos un combate de práctica? Me serviría enfrentar a alguien con una ventaja de atributo sobre el mío.

- ¿Por qué no se lo pides a Noelle? ¿No es tú amiga?

- Noelle tiene más maná que yo y puede destruir un sitio en un momento con su ataque. – Sonrió pensando en el emocionante desafío de luchar contra ella.

- ¿Entonces piensas que soy más débil que ella? – Una sensación de amargura nació en su estómago.

- Creo que tiene más maná que mucho de nosotros, eso es un hecho. Lo que no significa que no pueda darle una buena pelea, pero ahora mismo no está aquí.

- ¿Así que soy tu segunda opción? – Pregunto con un tono enojado, de pensar que era considerado inferior a su hermana menor.

- No. – Ladeo el rostro confundido – Nunca hemos sido cercanos a pesar de que nuestros hermanos son mejores amigos, sin embargo, estoy dispuesto a entrenar con cualquiera que acepte mi desafío.

- No tengo ganas. Vete.

- ¡Vamos, Solid!

Apreto los dientes ante el febril entusiasmo del adolescente, termino por asentir no demasiado convencido de querer participar en esto con este chico, su grimorio se abrió emitiendo una luz celeste al mismo tiempo que creaba su serpiente marina, la magia de fuego embistió con fuerza contra él, logrando que tuviera que retroceder, no resultaba tan fácil como pensaba teniendo la ventaja por atributo, después de unos minutos decidieron mover su pelea fuera del área donde jugaban los niños, poco a poco se fue involucrando cada vez mas en el combate, no se estaba conteniendo debido a que su oponente también era un miembro de la realeza que tenia el deber de demostrar su poder.