La guía de supervivencia de Bianca

Protección y confrontación

Cuando regresamos a casa me dirigí al piso superior de mi madriguera a buscar el "MT" del que me habló Moi. En algo tenía razón ese bueno para nada; debía aprender a defenderme, a pesar de que hasta ese momento no había tenido la necesidad de enfrentarme a alguien en la jungla, o algún otro lugar no sabía cuando algún pokémon podía atacarme

La cuestión es que no sabía qué hacer con ese disco, salvo que tenía unas letras grabadas.

-Moisés-le dije en un tono bajo con el disco en la boca-¿Que dice aquí?

-Haber mi analfabeta amiga-dijo en un tono burlón tomando el disco-Aquí dice "Látigo cepa"-luego de leerlo me lo devolvió-De nada, ¿Alguna pregunta?

-Sí...¿Qué es "Látigo cepa"?

-Es uno de los miles de movimientos pokémon que tú mi querida amiga puede aprender. Veo que decidiste seguir mi consejo.

-Sí sí sí, ¿Cómo puedo aprenderlo?

-Pues no veo muchos reproductores por aquí-me respondió-deberás ir con alguien que "cepa" el movimiento.

-...

-Por favor, si fue un buen chiste ¿Ok?

-No tengo tiempo para chistes-le respondí saliendo de la madriguera con mi disco.

Lo primero que pensé en hacer fue ir con Oranguru, seguro que él sabía quién me podía enseñar. Al poco tiempo ya estaba en su bar, pidiendo un jugo de Pinia, dirigiendo la palabra al maestro y rezando porque no me respondiera con sus famosos "Sí, te entiendo perfectamente".

-Hey, Oranguru-empecé cuando tuve su total atención mientras a mi lado un Pinsir tomaba lo mismo que yo-¿Sabes quién me podría enseñar este movimiento?-le pregunté dándole el disco.

-Así que ahora Bianca quiere aprender movimientos.¿Cuál es el motivo de tu curiosidad?

-¿Sabes quien me lo puede enseñar?-recalque sonrojada.

-No será el Jolteon que vive ahora contigo ¿o si?

-¡¿Sabes, sí o no?!

-Vaya actitud-dijo el Oranguru-dicen que el amor saca partes de nosotros que no conocíamos-Lo miré con odio antes de que finalmente me respondiera-¿Conoces al pokémon dominante de la jungla?

-¿A quién?

-Es el pokémon más poderoso de toda la jungla. sí alguien puede enseñar algún movimiento es ella.

-¿Dónde puedo encontrarla?

-¿No prefieres que te enseñe tu novio?

-¡Oranguru!

-Ok, ok, lo siento-Oranguru palmeó haciendo que los Morelulls en la cima de su choza se apagaran de golpe. Luego con un tono siniestro y lento empezó-Lurantis, el pokémon dominante de la Jungla Umbría es una gigantesca pokémon con un meticuloso paladar, vaga entre las zonas menos frecuentadas de este lugar y apenas se le puede ver. Si quieres llamar a la pokémon dominante de estos lares debes preparar algo digno de ella, solo así se acercara y se dejará ver por el autor de aquel delicioso platillo.

-¿Y tú has logrado verla?

-Lamentablemente no-respondió mientras las luces se volvían a encender-pero hasta ahora no pierdo la esperanza de preparar algo que le gusté y pueda finalmente visitar mi bar.

-Pues si yo fuera esa Lurantis vendría aquí todos los días.

-Gracias Bianca-me agradeció Oranguru con una expresión de alegría.