🥀Bloom ~ Renga/Lanki [Hanaki] 🥀

🥀Recuperando🥀

Estaba tan cansado, y su cuerpo se sentía tan pesado y denso.

Quizá fue quizá fue por el largo camino en coche del hospital a su casa, o quizá fueron la gran cantidad de analgésicos y antibióticos que había estado recibiendo durante toda la semana. Oh, bueno, de todos modos ya estaba en casa. Y honestamente, no recordaba cuando fue la última vez que había deseado tanto volver a casa, a su hogar, hinalar el olor a madera del suelo y el aroma a los helados de agua que siempre tenían en el refrigerador, porque si no sus hermanas se enojaban, y se pondrían de mal humor.

Aunque bueno, el también lo hacía.

Sonriendo levemente mientras su madre empujaba la llave en la ranura y la movía hacía un lado. Guardó la cálida sensación de Langa sosteniendolo por sus hombros, aunque sabía que no era del todo necesario, ya que Reki podía caminar siempre y cuando fuera lento y sin movimientos bruscos, langa no había querido apartarse de él. Simplemente, estuvo cerca todo el tiempo.

Tampoco es como si se pudiera quejar de ello.

Estaba esperando que en cualquier momento unas veloces y aterradoras pisadas corrieran hacia el para tirarse a abrazarlo. Y se quedó extrañado cuando no sucedió, y de hecho, se dio cuenta del inusual silencio que emanaba de su casa.

"¿Dónde están las gemelas?" preguntó segundos después, mientras tropezaban sobre el recibidor y langa lo ayudan a quitar sus zapatos y colgaba el abrigo extra que traía al lado de la puerta.

"Están con la abuela, pensé que tal vez preferirías descansar por hoy, sabes que ellas probablemente no te dejarían tranquilo" sonrió cálidamente mientras avanzaba y se unía a Langa para ayudar a Reki a sostenerse. El soltó un pequeño suspiro. Sabía que no era necesario, pero de todos modos se agradecía la preocupación.

Por otro lado, quería ver a sus hermanas para que vieran que todo estaba bien, aunque tampoco se quejaba. Su madre tenía razón, se sentía cansado y pesado. Probablemente dormiría todo el tiempo, o eso intentaría hacer. Y, con sus hermanas alrededor saltando sobre su cama de un lado a otro pidiéndole que las llevara al parque o que les leyera un cuento, no podría hacer nada de ello.

Así que estaba bien.

Con la ayuda de su madre y de Langa, fue deslizado sobre su cama, la cual estaba perfectamente tendida. Y su habitación un poco más arreglada de lo normal. Masae se acercó más a él, arreglando un par de almohadas para su comodidad y finalmente tomando una cobija y tendiendola sobre el pelirrojo. Una vez lo hizo, se quedó mierandolo. Tal vez sus ojos se pusieron vidriosos en algún momento. Así que Reki le ofreció una pequeña sonrisa. Eso pareció calmarla. Hasta que suspirando se incorporó y caminó hasta la puerta.

"iré a hacer la cena, trata de descansar, cielo" murmuró, tiróbuna mirada a Langa para después salir del lugar.

Moviendo su atención a Langa, quien había estado de pie mirando estático todo, Reki sintió una pequeña risa subir por su garganta, mientras palmeaba el espacio libre a su lado.
No es como si nunca antes se hubieran acostado en la misma cama, de hecho, lo hicieron tantas veces que quizá no podría recordarlas todas, pero había algo un poco tenso junto a ellos en la habitación.

"puedes acercarte, Langa" susurró, su voz sonaba suave, y la postura de Langa se volvió sumisa mientras obedecía a Reki. Subiendo una rodilla al colchón, este se hundió momentáneamente, hasta que trasladó todo su cuerpo dentro de la cama. No estaba realmente acostado, simplemente dejó una pierna colgando por la cama, sus pies sin calzado tocando el suelo de madera de la habitación, y el sonido de los pájaros fuera de la ventana, en el soleado y caluroso atardecer.