Murderer at Thirteen | Frerard

Prelude

-Todos de pie. Procede en el caso 323 el honorable juez Jason McMillers...-el juez entro y tomo asiento en su lugar correspondiente, todos en la sala se sentaron después de él. La puerta principal de la sala se abrió y entro el acusado custodiado por cuatro guardias muy bien armados, vestía con el uniforme naranja característico de la prisión, estaba encadenado de pies y manos, lentamente le guiaron al estrado y se sentó en el banquillo de los acusados ante la atenta mirada de los presentes, nadie podía creer que ese niño de no más de trece años seria juzgado como un adulto.

-El estado de New Jersey contra Frank Anthony Pricolo Iero por asesinato de 7 jóvenes, 3 desconocidos y el psicólogo Thomas Gray que trabajaba en el colegio St. Joseph de Belleville donde estudiaba el acusado, se pide la pena máxima para el acusado por el homicidio de estas personas.

A Linda se le encogió el estómago al escuchar la petición del fiscal: "Pena máxima", en pocas palabras estaban solicitando la pena de muerte de su hijo, para su chiquitín, pero como decir si era culpable o no, las pruebas lo señalaban a él como principal hechor, pero su corazón de madre le decía que eso era mentira.

-¿Jura decir la verdad? ¿Toda la verdad? ¿Y nada más que la verdad?

-Lo juro. - respondió Frank con su mano derecha alzada y con la izquierda sobre una biblia.

-¿Cómo se declara el acusado?

El corazón de todos los presentes pareció detenerse al escuchar lo que dijo Frank antes de que su abogado defensor pudiese responder a la pregunta del juez.

-Culpable...-le respondió Frank tranquilamente. Gruesas lágrimas recorrieron el rostro de su madre ante tales palabras, su padre simplemente bajo la mirada.

-Me declaro culpable...-repitió lentamente.

Continuará

Bueno aquí les traigo otra historia, espero les guste.

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