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Law recién vestido y ya recuperado, se levanto de la cama dirigiéndose al balcón, ganando que el pequeño le mirara desde la cama, este solo estaba cubierto con una camisa y su ropa interior.

—¿A donde vas?- Pregunto el menor.

—A fumar- Respondió mientras quitaba el seguro de aquella puerta corrediza, no sin antes, ser detenido por el menor.

—Puedes hacerlo aquí.- Dio pequeños golpecitos en la cama, lo cual le indico al mayor que quería que se sentara a su lado.

—Pero lo odias.- Saco la cajetilla y la agito.

—Solo no tires las cenizas en el suelo.- Volvió a hablar, haciendo que el mayor esbozara una sonrisa triunfadora y tierna. Tomo asiento y con su encendedor, lo prendió para después sorber un poco, dejando salir aquel humo por su boca.

Luffy se quedo mirando fijamente a Trafalgar. El otro se percato, dándose vuelta, sonriéndole y soltando otra risa burlona, la cual, no le dio importancia el menor.

—¿No puedes apartar tus ojos de mi hermoso rostro?

—Dame uno.- Extendió la mano, haciendo que el otro le acercara la cajetilla, tomo uno y lo puso en su boca, acercándose al mayor para que este se lo encendiera.

—En verdad deberías intentarlo.- Luffy rompió el silencio mientras soltaba una bocanada de humo.

—Muy divertido, mira quien habla.- El moreno, el cual, se encontraba sentado a un lado de la cama, recostando levemente su cabeza en los muslos desnudos de el pelinegro, contesto burlón.

—Pero yo no soy actor. No es bueno para tu imagen publica, además, yo también voy a dejarlo.

—¿Tu? Si claro, ahórrate las molestias, no te culpes si de todos modos lo vas a volver a hacer.

Luffy aprendió mucho de Law mientras crecía, era divertido, hacer travesuras sin que los adultos se dieran cuenta. Tenia sabor a un caramelo barato, salado pero dulce que hasta sentía un cosquilleo en su lengua. El fumar, solo era una de las  tantas travesuras que solían hacer juntos.

—Todo lo que he aprendido de ti, solo han sido malos hábitos.

Law rió por lo bajo y luego volvió a contestar.—Pero son tan divertidos.

—Parece ser que lo del drama se calmó un poco.- Luffy alcanzo el cenicero y apago el cigarro, dejándolo ahí.

—Si deciden sacarme del elenco, lo harán, si los planes cambiaran, cambiaran. Yo solo sigo ordenes.- Contestó despreocupado mientras igualmente, apagaba el cigarrillo en el cenicero.

—No actúes como si no fuera problema tuyo.

—¿Cómo vas con tus obras últimamente?- El ojigris volvió a cambiar el tema, sin responder lo que anteriormente le dijo el otro.

—Deja de cambiar el tema cada que te convenga.- Lo fulminó con la mirada pero esto solo le pinto una sonrisa a Law.

—Nada se te escapa, Luffy-ya.- Tomó su mano, besándola lentamente y luego mordió el dedo meñique, haciendo que un escalofrió recorriera el cuerpo del menor, quitando su mano de inmediato.

Law fue caminando a gatas por la cama, hasta quedar a la altura de el pequeño, recostándose de lado para verle mejor.

—Por cierto, papá quiere que vengas a cenar con nosotros la próxima semana.

—¿Por que?

—Supongo que te extraña. Ya hace tiempo que vino a Japón.- Dio una pausa y luego volvió a hablar.—Aun le agradas ¿Sabes? Dice que extraña a su segundo hijo, vendrás ¿Cierto?

i love himDonde viven las historias. Descúbrelo ahora