One-shots Tokyo Revengers (Male reader)

Kokonoi Hajime

Siento que no se habla mucho de Koko de Bonten, tan lindo que se ve ese hombre <3

Estirando la mano agarró un cóctel de una bandeja del camarero que venía pasando, le dio un pequeño sorbo barriendo a todas las personas que le rodean hasta parar en un albino de cabellera largo de ojos afiladas negros que viste con una prenda costosa de color rojizo con detalles dorados, bebiendo al parecer un champán porque es un líquido espumoso de color amarillento en la copa delgada que sostiene de forma elegante en su mano

Se levantó de su puesto, acercándose con paso calmado hasta la mesa del desconocido de cabellos albinos que le miró apenas estuvo en frente de la mesa que ocupa con puestos vacíos

-¿Buscas algo?-la voz del albino es audible por sobre las personas hablando en la enorme habitación

-Estaba interesando en uno de los tantos hombres que estaban acá acompañándote hace un rato, pero parece que tendré que conformarme contigo-sin pedir permiso tomó asiento cerca del contrario que alzó una ceja de forma escéptica

-Qué buena forma de decirme que soy una segunda opción de entretenimiento para una perra-responde con amargura mirándole con sus cejas fruncidas

-Qué bueno que captaras la idea-sonrió para hacerlo molestar más antes de darle un último sorbo a su trago-Aunque no estás para nada tomando en cuenta que no tienes un aspecto descuidado, puedo decir con sinceridad que eres un hombre bastante atractivo-

-Creo ya que con eso que dijiste puedes darte cuenta que mis estándares son altos, así que puedes saber que una poca cosa como tu no causa nada en mi-

-Déjame te recuerdo que las apariencias se pueden arruinar porque nada más son superficiales-con un golpe sutil tiro el champán sobre su ropa que se humedeció por obvias razones

-Hijo de puta-apretó sus dientes con rabia

-¿Viste? Ya no actúas tan arrogante-se burló abiertamente antes de levantarse, puedo divertirse un rato

Salió del establecimiento dirigiéndose hasta el estacionamiento donde se encuentra su lujoso vehículo abriendo la puerta del conductor antes de escuchar una exclamación

-¡No seas tan descarado de hacer esto e irse así como si nada!-sonrió aún mirando hacía el albino

-Obstinado como desde jóvenes, Koko-los ojos afilados del albino se ampliaron sin saber con quién está hablando

Tomándole por el cuello apretó, sacando un arma que tenía bien escondida antes de colocarla sobre el abdomen del pelirrojo

-¿Cómo sabes quien soy?-interrogó con lentitud amenazando con disparar

-Qué mala memoria tienes-se queja empujándolo sin importarle el arma que tiene en la mano-¿Te estas metiendo droga o algo?-

-No estas respondiendo la maldita pregunta-

-Después de alejarnos parece que te borraste la memoria-se acercó mientras una mano se coloca sobre el arma bajándola-Un gusto, Fumiya ___, amigo de Hajime y Seishu desde que somos unos mocosos tontos, ¿me recuerdas ahora?-

-¿___?-se desconcertó mirándolo nuevamente analizando su apariencia que cambió bastante

Antes tenía un cabello ligeramente largo que siempre se dejaba suelto dejando que esa melena se mezclara con cada atardecer, ojos verdes que siguen viéndose hermosos, estatura similar a la suya, cabello corto por los hombros que se ve esponjoso

-¡Ding, ding, ding!~-aplaudió dándole golpes con sus nudillos en la cabeza riéndose por la expresión del albino-Al fin lograste reconocerlo, Koko. La última que nos vimos fue después del velorio de Sano Emma, me sentí pésimo ese día para ahora muchos años después volver a vernos las caras-

-No es bueno que estés cerca de mi, no sabes dónde estás metiendo las manos-recalca mirándole con el ceño fruncido

-Estoy metiendo las manos por mi amigo, de verdad, sé lo que estoy haciendo-afirma apoyándose de su vehículo mirando la calle solitaria esa noche

-Pensaba que había dejado claro que no quería que ninguno de ustedes dos me buscara, ¿o debía decirlo en voz alta?-alzó una cena con una expresión poco interesada

-Qué cruel eres-tiro su vista al cielo que no tiene ninguna estrella esa noche-Yo solo quería ver a mi amigo de nuevo, aunque suene infantil para ti-

-Y estúpido-rodó los ojos cruzándose de brazos-Han pasado años, ¿cómo no fuiste capaz de olvidarte de mi? Inui de seguro lo hizo-

-No lo hizo-respondió-Ya no habla de ti, pero de verdad que le sigue doliendo saber que no tiene a su mejor amigo cerca, después de tantos años todos juntos terminamos separados porque tú no dejaste tus ambiciones con el dinero sabiendo que nosotros no necesitamos eso de ti-

-Todo el mundo necesita dinero de mi, ¿por qué crees que siempre las pandillas me querían como miembro? Porque sabía cómo producir dinero, solo por eso y nada más-respondió con molestia

-Pero nosotros no te queríamos por el dinero, te queríamos porque eres nuestro amigo-

-Los Black Dragons no se arreglaron de la noche a la mañana, ¿te recuerdo como se logró eso? ¡Por el dinero! ¿Y de dónde salía el dinero? ¡De mi!-

-Pero después de los Black Dragons no necesitamos dinero, simplemente nos quedamos juntos porque éramos un grupo de amigos-explica pausadamente sintiendo que está perdiendo la paciencia-En ToMan nadie te pidió nada con el dinero, nadie-

-Y apareció Tenjiku, ¿y qué pasó? ¡Me hicieron unirme para ser su tesorero!-

-Inui y yo intentamos sacarte de ahí, ¿y te recuerdo qué pasó? ¡Nos diste la espalda, nos rechazaste a pesar de querer que volvieras con nosotros no importa qué, fuiste cruel cuando solo queríamos que volvieras!-

-¡Ustedes dos solo buscan dinero de mi, todos los hacen, nadie es diferente!-

-Esto es lo mismo que hablar con una maldita pared de concreto-se quejó el pelirrojo sin ganas de seguir hablando-Pero fue triste, todo este tiempo estuviste con nosotros nada más porque veías a Inui como un reemplazo para Akane-san, nunca pareció que quisieras quedarte porque fuéramos tus amigos, no pareció importante que yo sintiera algo por ti-

-Ya habíamos hablado de eso-

-No, solo tú hablaste, me dijiste que estaba demente por pensar que podrías gustar de mí diciendo que aún seguías amando a alguien-respondió mirándole molesto-Solo puedes amar a Akane-san, no importa cuando me esforzara porque vieras que yo te quiero mucho. Solo quería una oportunidad, incluso si hoy estaba arriesgando mi vida al acercarme a ti-

-Me largo-se dio media vuelta dirigiéndose hasta otra parte del estacionamiento sin decir otra palabra más

-Claro, huye...-miró al suelo con desgano-Eres experto en eso-

Tal vez el destino era que Kokonoi le terminara dando la espalda alejándose, con cada muestra de cariño que le dirigía recibía el mismo gesto, no se sorprendió de que esa vez sucediera lo mismo