UN AMOR INESPERADO

CAPÍTULO X: EL PENSADERO

Era sábado, los días recientes habían ocurrido de la forma más rápida. Me encontraba desayunando con el equipo de Hufflepuff previo al partido. Le había comentado a Cedric que no iba a poder asistir a él entonces me invitó a desayunar antes del "castigo".

-Pensé que eras una genio superdotada o algo así Riddle -me dijo Zacharias.

-En clase participas literalmente en todo -añadió Ernie.

-Es que Snape tiene algo contra mi, ya saben, hija de Voldemort -mentí.

-Por suerte no le dará otra oportunidad a Diggory de hacernos realizar un acto de amor extravagante para tí ___ -dijo Hannah, quien desayunaba a unos cuantos puestos.

Reí.

-Oye, no voy a declarar mi amor en cada partido que haya -dijo Cedric entre risas

-Por suerte -añadí.

Ví que a lo lejos estaban Barty y Snape, quienes me hacían señas para ir con ellos. Mi padre había llegado.

-Oigan, ya me tengo que ir -dije.

-Tranquila, nosotros también nos vamos -dijo Ernie.

-Te veo luego Ced, suerte.

-A tí -respondió con un beso en mi mejilla.

-Su padre nos está esperando en el bosque prohibido, junto con otros mortifagos anónimos y algunos de los Malfoy, incluido Draco.

-Está bien -le respondí a Snape.

Llegamos al bosque, y empezamos a sumergirnos en sus profundidades. Nunca me había dado buena espina aquel lugar, sentía que alguien nos seguía, era raro de explicar. Lo bueno era que estaba acompañada de unos de los magos tenebrosos más asombrosos, además de mi claro.

Nos acercamos más y más, hasta que escuché un claro grito que evidentemente pertenecía a mi padre.

-¡Que te calles Lucius!

-Lo siento mucho mi lord, es solo que, no creo que debamos dejar esto en manos de una niña.

-Esa niña, es mi hija Lucius. Y está más capacitada que todos ustedes para esta misión, confío en ella.

-Si, Lucius. Además, no creo que puedas hacer muy bien el papel de novia de Potter, ¿o no? -añadí mientras salía de las sombras.

-Hija -me saludo mi padre.

-Padre -respondí

-¿Cómo vas? ¿El plan ha funcionado?

-La sangre sucia se enteró -comenté.

-No será problema, eventualmente lo harían, pero lo importante es tener a Potter a tus pies.

-Lo tengo colgando de mis manos, está más que celoso por lo del chico Hufflepuff, el otro campeón.

-He estado leyendo de eso últimamente, ¿Te gusta?

-Para nada, solo es un peón más del plan -mentí, como cada cosa que estaba diciendo, pero soy hábil en el arte de la oclumancia.

-Muy bien, sabes que no tienes tiempo para eso.

-¿A qué vine? -dije cortante

-No subas ese tono con tu padre -amenazó Lucius.

-¡Cállate! -dijimos al unísono mi padre y yo.

-Para la última prueba, ayudarás a Barty a que Harry pase las pruebas, tomaré su sangre e intentaré matarlo. Lo ayudarás como la buena novia que eres.