Una vida contigo

Capítulo 51: Solo

El Hatake estaba junto a Sasuke en el consultorio de Sakura. Y Naruto estaba acostado en la camilla. Había un silencio sofocante, era las 04:38 AM. Sasuke bostezo y se sentó en la silla de la Haruno.

_¿Por qué tarda tanto? Preguntó con molestia.

_No lose. Respondió serenamente el peli-plata.

_Llamen a otra enfermera. Dijo el Uzumaki desde la camilla.- Me duele demasiado el cuello.

_Esta bien. Salió Sasuke y hizo una seña desde la puerta.- Dijo que ya viene una.

_¿Y tu Sasuke estas bien? ¿no te duele nada? Preguntó el peli-plata.

Este negó con la cabeza.

_No tanto, ya sabes quién recibió toda la paliza.

Naruto no inmutó con lo que dijo, ni siquiera le miró. Estaba en otro mundo, lejos de la realidad.

En su cabeza solo pasaba la imagen del bebé sin ojos, sin nada más que un cascaron vacío sin vida. El no pudo más que desquitar su frustración con Orochimaru. Nunca en su vida estaba tan enojado, pero no sólo con el asesino si no con el mismo.

La puerta se abrió y Rin entró junto con Obito.

_Buenas noches. Saludó la Nohara.

Todos hicieron una reverencia. Y ella comenzó a sanar al rubio. Obito le miraba a ambos con compasión.

_¿Quien tiene el reporte de la misión?

_Yo. Habló el Uchiha y le dio la hoja.

_Que bien que hallan vuelto sanos y salvos. Dijo Obito mientras agarraba la hoja.- Orochimaru no es una presa fácil. Río nervioso.

_Si es una presa fácil. Soltó el Uzumaki.- Por eso lo capturamos lo que no pudo hacer los ninjas élite durante todo este tiempo.

Obito le miro serio.

_¿Entonces por qué fallaron a la primera si es "una presa fácil"? Se más modesto Naruto, nadie querrá un hokage parlanchin.

_Lo que sea. Soltó y se puso de pie con el cuello ortopédico.- Yo ya me voy, quiero ir a casa y descansar. Sin más este abrió la puerta y se fue.

_¿Ahora que hacemos? Preguntó Obito.- Debe ir a terapia para superarlo. No podrá criar a su hijo si esta en ese estado como irritante, frustrado lo que sea que tenga.

_Se que los Hyuga tienen un terapeuta personal para el clan, debería ir a ver. Hablo Rin amablemente.

_Si, eso es bueno. Sakura le dirá a Hinata esa idea. Agregó el Hatake.

_Genial, todo resuelto. Sonrío ampliamente Obito.- Vamos Sasuke, te acompañó al distrito.

_Gracias, adiós sensei y Rin.

_Adiós. Respondieron al unísono.

Los dos salieron del consultorio y quedaron Rin y el Hatake.

_Bueno yo también me voy. Adiós Rin.

_Ah, adiós. Cuídate.

_Lo haré.

El Hatake caminaba en la madrugada hacía su casa para descansar almenos unas horas. Todo el ambiente era extraño, pensaba en sus alumnos por lo que tuvieron que pasar y era parte de crecer ver cosas tétricas, sentir diferentes emociones y odio por todo lo que puede pasar en las misiones. Ya no eran niños, ahora eran jóvenes adultos y así es la vida.

Este sin más llegó a la puerta de su casa y entró con cuidado no quería hacer ruido para no despertarla.

Luego vio por la puerta transparente que lleva a patio. Y caminó con cuidado y abrió. Había flores de diferentes colores pero mayormente rosadas como el cabello de su prometida. Hasta que vio a Pakkun en posición de hacer caca.