Capítulo 8: Vainilla

858 61 4
                                    

Pov Calle:

La voz de mi mamá anunciándome que Poché había llegado, me provocó un escalofrío. Dando pequeños saltos, bajé las escaleras encontrándome con su mirada haciéndome parar en seco ante la vergüenza.

Su rostro se tiñó de rojo y aunque odiara admitirlo se veía realmente hermosa y tierna, como si no fuese mi peor pesadilla, como si su mera presencia no me provocase miedo.

Su característico olor avainillado se perdió en mi sistema provocando que mi piel se erizara sutilmente. Subí las escaleras para agarrar todo el material necesario, quería acabar con todo esto y no volverla a ver. Todas las sensaciones que recorrían mi cuerpo ante su presencia me confundían.

La necesidad de tenerla cerca y lejos a la vez, el deseo de volver a tenerla a centímetros de mí, la añoranza de volver a ver sus ojos de cerca, todo eso mezclado con un miedo paralizante deliciosamente placentero para ella cuando lo percibía en mí.

Mis dedos se movían ágilmente en el teclado, su mirada en mi rostro me desconcentraban acelerando mi corazón y su incesante movimiento de pierna me ponía nerviosa.

C- Me vas a ayudar o vas a seguir mirándome?- hablé con tono burlón, esta vez quería jugar yo con ella.
Su rostro se enrojeció.

¿Cómo una persona que se siente fuerte al percibir el miedo en su víctima se ve tan jodidamente tierna sonrojada?

No tenía ni idea pero ese lado de María José me estaba haciendo delirar, deseando, por primera vez, que el tiempo no pasara para vivir una eternidad junto a ella.

P- Solo que me gustaría empezar de nuevo contigo- esas palabras retumbaron en mis oídos acelerando mi corazón.
En mi rostro se creó una mueca de confusión ante la sorpresa.
C- Me explicas?- pregunté acomodándome en el sofá y plasmando mi mirada en la de Poché.

P- Siento que he actuado mal contigo y simplemente me gustaría dejar todo esto atrás y comenzar desde cero- habló
C- Okay?- dije todavía extrañada
P- Pues en ese caso...- sonrió y estiró mi mano- Hola, me llamo María José Garzón, pero tú puedes decirme Poché.
Se veía tan tierna que no pude evitar soltar una carcajada.
C- Encantada- tomé su mano- yo soy Daniela Calle pero si quieres puedes decirme Calle.

Ambas nos mirábamos sonriendo, sus manos estaban algo frías transmitiéndome pequeñas corrientes eléctricas.

P- Tienes unos ojos precioso- habló en un susurro imperceptible.
C- Gracias- contesté en el mismo tono volviendo a provocar su sonrojo.
Entre risas terminamos el trabajo.

Amaba el cambio que habíamos dado y el tiempo que pasaba con ella. En escaso segundo descubrí que su risa tenía cierto tono grave que alteraba mis sentidos, que sus ojos se achinaban al sonreír y que su entrecejo se arrugaba cuando algo no le gustaba. Hace escasos minutos era mi peor pesadilla y ahora, ahora podría definirla como mi primera mejor amiga.

__________________________________________

Holaa❤️❤️ cómo andan??

Espero que os guste el capítulo ☺️☺️

En mi Instagram podéis encontrar la historia, donde la subo antes!!

Instagram: lgtbvibes_

❤️ GRACIAS ❤️

El arte de ser incomprendida (Caché)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora