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Sasuke despertó bastante alterado, en su mente una sola imagen se repetía una y otra vez.

El cuerpo desmembrado del tío de Naruto, los gritos de este antes de morir torturado, las súplicas de este implorando piedad, ambos hermanos ignorando las súplicas, sus manos manchadas de sangre.

Sasuke se puso de pie, camino hasta el balcón de su habitación, el aire golpeó levemente su rostro, matar a ese hijo de perra no había Sido  ningún problema, era un bastardo que se merecía la peor de las muertes por todo el daño que le había ocasionado a su amigo, haber aniquilado a ese imbécil no había Sido ningún problema y es que no era eso lo que agobiaba a Sasuke...no, lo que en realidad le quitaba el sueño era que había disfrutado hacerlo, cada corte, cada castigo, la sangre...Sasuke en realidad lo había disfrutado y ahora él deseaba repetir la acción tantas veces le fuera permitido.

La adrenalina recorrer si cuerpo, su corazón latiendo, la sangre escurriendo por sus manos, las risas de los espectadores, los gritos de la víctima...Sasuke en verdad lo había disfrutado.

Se creía cuerdo pero ahora entendía que estaba aún más dañado de su hermano.
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Ino corrió a toda prisa detrás de Itachi, ella intento por todos los medios posibles que él no saliera de la mansión esa noche, pero como siempre él la ignoro.

—No vayas con ella, Itachi quédate conmigo, Tsunade es una mujer vieja, Itachi.— dijo después de tomarlo del brazo, Itachi se detuvo.— yo te amo.

Itachi comenzó a reír, dió la media vuelta, miro a Ino de manera despectiva.

—Amar, amar es algo en lo que no debes perder el tiempo, ya te lo dije antes Ino, no esperes más de mi de lo que te ofrezco, dinero, joyas, una buena vida...no pidas, ahora deja de joder, ve a tu habitación, folla con mi hermano si es lo que necesitas, pero déjame en paz.

Itachi se soltó del agarre de la rubia con brusquedad para después continuar con su camino, Itachi subió a su auto y abandono la mansión al tiempo que Ino de dejo caer de rodillas envuelta en llanto y con el corazón destrozado se cuestionó una y otra vez si valía la pena todo el sufrimiento a cambio de una buena vida.

—Lo vale...lo vale.— dijo una y otra vez sin dejar de llorar.

Sacrificar su dignidad a cambio de todos los lujos que Itachi le ofrecía, sacrificar su amor propio a cambio de ser tocada ocasionalmente por Itachi... realmente lo valía.

Podría acostumbrarse a eso.
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Itachi se quitó el abrigo para después arrojarlo al sofá que se entraba frente a la enorme cama de aquella habitación de hotel.

Tsunade salió del baño vistiendo una bata de seda, Itachi dedujo que aquella bata era lo único que la mujer vestía pues desde su sitio podía notar sus endurecidos pezones.

—Llegas tarde.—susurro la mujer, está se acercó a Itachi, intento besar el cuello, Intento tocar el miembro de este, intento restregar sus senos contra el cuerpo de su invitado pero todo esto quedó como un intento después de que Itachi la tomara con brusquedad del brazo para posteriormente empujarla lo más lejos que le fue posible, Tsunade termino en el suelo.—¿Que mierda te pasa?

—Dijiste que tenías algo importante que decirme, no vine aquí para follar contigo.

—Antes no decías lo mismo.

—Eso es pasado Tsunade, de tí ya no necesito más, eres una mujer vieja, ingenua, arrogante y despreciable, lo único que me atrajo fue tu dinero y ahora que tengo todo aquello que necesitaba ya no tengo por qué hacer cosas que me asquean con tal de ganarme tu favor.— Itachi tomo asiento en el sillón, encendió un puro.— ve a vestirte, mi estómago se revuelve al verte y estoy cansado de fingir que me agradas.

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