Al día siguiente Wang fue el primero en despertar viendo el cuerpo de rubio en tranquilidad y totalmente dormido en su pecho.
Sin duda Zhan era aún un pequeño, aunque le causaba inquietud sobre el pasado del rubio y causaba en el que lo protegiera aún más de lo que ya hacía.
Se levantó cuidadosamente viendo aún a Zhan durmiendo y caminar hasta el baño y darse una ducha rápida y arreglarse, unos cuantos minutos después salió de la habitación bajando las escaleras y caminar hasta la cocina viendo a Zhuo Cheng cocinar y dar un suspiro por lo que iba a decirle.
- Hola - Dijo el pelinegro caminando hasta el refrigerador.
- ¿Qué haces aquí Wang? - Pregunto el mayor sorprendió. - Es muy raro verte aquí en la cocina, ¿Necesitas algo?
- No...Bueno yo no - Dijo el pelinegro. - Quiero prepararle algo a Zhan para que desayune.
El peli-morado asintió mirando a Wang sacar algunas frutas y otros ingredientes más, era sumamente raro ver a Wang preparar algo para alguien decidió ayudarlo.
- Deja y te ayudó - Dijo Zhuo Cheng tomando la carne que había sacado del refrigerador. - ¿Te gusta mucho verdad? - Pregunto.
- ¿Gustarme? - Dijo el pelinegro mirando al mayor.
- Zhan... - Dijo el peli-morado. - ¿Te gusta Zhan verdad?
- Si, no puedo sacarme lo de la cabeza desde que lo traje por primera vez aquí, se que al principio lo quería para mi beneficio pero ahora que lo estoy conociendo todo es diferente y me hace pensar en que solo quiero protegerlo de todos los idiotas que quieran dañarlo - Dijo el pelinegro.
- Jamás te había escuchado hablar así de alguien Wang, pero solo te diré que no lastimes a Zhan, puede que ya haya estado en este mundo antes pero no sabemos que fue lo que pasó entre medio, así que cuídalo - Dijo el peli-morado.
- Tranquilo, eso es lo que voy hacer - Dijo el pelinegro.
Zhuo Cheng asintió para continuar preparar lo que Wang le daría a Zhan, algo que desde su punto de vista era sumamente romántico y tierno.
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Poco a poco los ojitos de Zhan se fueron abriendo y comenzar a acostumbrarse a la luz que entraba en la habitación, estiró su cuerpo y mirar a un lado dándose cuenta que Wang no estaba a su lado así que supuso que el había salido.
Se levantó para caminar al baño y lavar su rostro, unos minutos después salió del baño y volvió a la cama cuando vio la puerta abrirse y ver al pelinegro entrar con una bandeja con diferentes platos, causándole asombro al rubio.
- ¿Qué es esto? - Pregunto el rubio mirando al rubio.
- Es tu desayuno - Dijo el pelinegro dejando la bandeja en la mesa de noche.
El rubio al escuchar eso abrió sus ojos totalmente sorprendido ¿Acaso esto era un sueño?, realmente no se espero un detalle así y más por parte del pelinegro.
- ¿Mi desayuno? - Dijo el rubio señalándose a si mismo.
- Así es, todo esto es para ti además de que lo prepare especialmente para ti - Dijo el pelinegro dándole uno de los platos.
- No te vieras molestado - Dijo el rubio tomando el plato y comenzar a probar. - Esta bueno - Alago el rubio sonriendo.
- Lo se, es porque lo prepare yo - Dijo el pelinegro sonriendo.
El rubio río ante el comentario del pelinegro mientras continuaba comiendo lo que Wang le había preparado.
Unos minutos más tarde una vez el rubio había terminado de desayunar, Wang tomó la bandeja con los platos mientras Zhan regresaba a su habitación con sumo cuidado para tomar una ducha y cambiarse de ropa.
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Mr. Wang
Acak- Mi paciencia se está terminado, ¿Aceptas el trato o no? - Preguntó el pelinegro. El rubio mordió sus labios nervioso. Aceptó - Dijo el rubio mirándolo. - Pero espero que usted también cumpla su parte Señor. Yo siempre cumplo lo que prometo, no por...