-Es tu culpa por correr así.
-¿Mi culpa? ¡Tú cerraste la puerta! - Protesté, él gruñó dejándose caer en el suelo.Hice lo mismo enfrente suyo. No había mejor persona para quedarte encerrada ¿eh? Justamente tenía que ser con uno de los cuatro idiotas, y justamente tenía que ser conmigo. Aunque Matt era el único de ellos cuatro que no había intentado nada conmigo.
Por ejemplo Luke, que parecía odiarme y al mismo tiempo necesitarme. Kendall que nunca se cansaba de pedirme una cita y Jake... bueno, él era el que más había avanzado de todos ellos. Por lo menos el único que me había besado hasta ahora.
Y luego estaba Matt, que siempre iba con Luke a todos lados. Eran mejores amigos, entendí eso, pero... ¿Por qué nunca intentó algo? ¿Está prohibido o algo así? La idea de Luke prohibiéndole algo a Matt me resulta graciosa, pero aun así tengo la duda.
-¿Que sucede contigo? -Pregunté. Él dejó de mirar el punto fijo en el suelo y levantó la vista.
-¿Eh?
-¿Por qué no me has coqueteado nunca? por lo menos no como los demás. -Se encogió de hombros.- oh vamos... tiene que ver una razón
-¿Por qué te interesa de todos modos?
-No me interesa solo es.... curiosidad. -Alzó una ceja.- ¿Si digo que me interesa me lo dirás?
-Tal vez...
-Me interesa. Me interesa mucho. -Respondí.
-Bien. -Sonrió- Pero no te lo diré.
-Vete al diablo.En otra parte de la escuela...
Luke POV.
Llegué a la habitación y cerré la puerta de un buen golpe. Esperé a que Matt saliera del baño a regañadientes, a decirme algo, pero no lo hizo. Siempre se molestaba cuando llegaba con mis malos humores. Abrí la puerta del baño: vacía.
Había estado en la cafetería hace tan solo unos minutos y sabía que no estaba allí, tampoco en alguna otra parte del campus. Salí de la habitación a toda prisa y golpeé la puerta de la habitación de Ken y Jake.
-Hey... -Abrió Kendall, con la respiración agitada. Llevaba puesto solo unos boxers y en su mano izquierda tenía un sobrecito plateado.- lo siento hermano estamos... -Miró hacia atrás, murmuró algo y luego volvió a mirarme.- ocupados.
Fruncí el ceño.-Solo estoy buscando a Matt. ¿Lo has visto?
-No, ¿Por qué no le preguntas a Jake? -Sugirió cerrándome la puerta en la cara.Sí claro, yo hablándole a Jake luego de casi matarlo a golpes en la cafetería. Sí, Ken esa es una gran idea. Aunque, necesito encontrar a Matt...
Mientras tanto en el armario...
Emma POV.
-No vas a poder.
-¡Cállate de una buena vez! Por lo menos lo intento. No como otros, que no hacen más que quedarse sentados allí esperando algún tipo de milagro. -Bufé, intentado una vez más abrir la puerta con el clip que me había quitado del pelo.Ya saben, como hacen en las películas. No es como si realmente fuera a funcionar pero, ¡Tengo que intentar algo!
-¿Cuando dices otros te refieres a mí?
-¡Claro que no!... -Lo miré dubitativa.- Me estoy refiriendo al trapeador
-No tienes por qué ser tan grosera.
-Púdrete.
-Déjame intentar -Se puso de pie. Intentó tomar el clip pero aparté las manos.- dámelo
-No. Yo abriré -Intentó tomarlo de nuevo pero, lo alejé.- ¡Te dije que no!
-¡Ya dame eso! -Volvió a jalar, y esta vez cuando levanté el brazo golpeé la lamparita que giraba de un lado a otro, haciéndose añicos.- bien hecho Emma.Lo peor es que también perdí el clip, así que no podremos abrir la puerta. Maldigo la hora en la que decidí no traer mi celular. ¿En qué diablos pensaba?
Volví a sentarme en el suelo con los brazos cruzados, ahora sí, no iba a dirigirle una sola palabra a Matt. Por imbécil. Él también se dejó caer, y por un lapso de tiempo no dejó de mirarme.
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Soy virgen, ¿Y qué?
Teen FictionEmma es una chica de 17 años, malhumorada, irónica, cínica y... virgen. Ella y su hermano son enviados por sus padres a un internado, lleno de mimados, millonarios chicos elitistas, presumidos y egocéntricos. Su vida cambiará cuando todos en ese ins...