Lo que está destinado a ser, será.
Jungkook ha sido ascendido a director universitario y han enviado a alguien que pueda reemplazarlo como maestro, han pasado cinco años exactos desde que le dijo adiós a la única mujer que lo ha hecho sentir algo po...
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Jungkook la llevó hasta el aula donde conocería a su grupo y Kim expresó que podía continuar a partir de ahí, luego iría a su puesto en la sala de maestros.
Sin embargo, el grupo de Kim tenía personajes un poco desagradables, así que se quedó husmeando en la puerta sin ser notado para no dejarla sola y actuar en caso de que no pudiese controlarlo.
—¿Qué estás haciendo?
—Silencio— señaló la puerta— tengo que escuchar.
Seokjin dió un vistazo, entendiendo qué sucedía.
—Vale, me quedo en caso de que colapses.
Lo mandó a callar de nueva cuenta, prestando atención a lo que sucedía allí adentro, Kim había logrado obtener la atención de los estudiantes, este grupo era bastante equilibrado, varias chicas, la misma cantidad de chicos. Algo nuevo.
—Me presento, mi nombre es Choi Kim— sonrió— seré su maestra de matemáticas y sus derivados, geometría, cálculo, álgebra, al menos durante este primer semestre en lo que nos ajustamos a un horario establecido, además me han encargado este grupo en específico, por lo que nos veremos muy seguido para realizar las distintas actividades y compromisos que la universidad impone— la sonrisa se suavizó, casi desapareciendo— no es mi primera vez tratando con grupos grandes y recuerdo muy bien cada rostro, así que espero que nuestra relación de maestra y alumnado sea un trabajo en equipo donde si ustedes cooperan, yo también lo haré.
La presentación se extendió, hubieron varios haciendo comentarios que nada tenían que ver con lo que Kim estaba hablando y luego salió el tema de ella siendo graduada de esa misma universidad.
—¿No viene de Londres?
—Hice mi maestría allí, pero me gradué como licenciada en esta universidad y... esta aula es la misma en la que ví mis clases, precisamente de esta materia— Jungkook tragó, viéndola sentarse en el escritorio para hablar más a gusto— clase impartida por quién es ahora su director.
—Estás rojo— le susurró Seokjin.
—Shh.
Le picaba el cuerpo y sabía que estaba bastante sonrojado, es que no había caído en la cuenta de que ese salón era el mismo donde comenzó y terminó todo.
—Ojalá sea tan buena maestra como para reemplazar al director— dijo uno al fondo, riéndose— pero lo veremos.
Ya está, iba a entrar. Seokjin negó, mirándole como si fuese tonto y luego escucharon a Kim reír con aquél estudiante mientras asentía.
Volvía a estar seria.
—Espero que siga riéndose con las mismas ganas al finalizar semestre, cuando no apruebe conmigo porque no pudo seguirme el ritmo— se cruzó de brazos, volviendo a colocarse de pie— vamos a comenzar clase y sepan que todo lo que diga puede ser importante para cuando llegue la temporada de exámenes. Así que, tomen nota.
