Timothèe Chalamet
Corría por las oscuras calles de Manhattan, mis piernas no daban para más, las gotas de lluvia caían sobre mi cara ya empapada por mis propias lágrimas, intentaba relajar mi mente y pensar claramente, pero las palabras de la pelinegra estaban clavadas hasta lo más profundo de mi mente. "¿Qué parte no entiendes Timothée?" "Simplemente no me gustas, realmente no lo haría tengo mente en otra persona y esa no eres tú, mejor la dejamos acá, eres demasiado inmaduro para mí", dolía recordar y eso hacía que llorara con aún más fuerzas.
Después de correr hasta que me faltara el oxígeno, me incliné y recargue mis manos en mis rodillas agachado la cabeza, viendo mi pecho subir y bajar bruscamente, al levantar la cabeza cuando al fin pude recuperar las energías, no reconocía donde estaba todo estaba oscuro, saqué mi celular para intentar llamar a mis padres o a mi hermana mayor, pero me fue imposible ya que este se mantenía apagado por la falta de batería.
Mire a todas partes desesperado, mis ojos se fijaron en un local con el nombre "Pinky Récords"que estaba encendido, ¿Realmente una tienda de discos iba a estar abierta a estas horas de la noche? pues al parecer si, en estos momentos lo menos que quería era una bola de paparazzis haciéndome preguntas pero no tengo opción era ir o dormir en la calle, a estas horas creo que nadie de la prensa está despierto, lo más que me gano es una polémica en twitter.
Narrador Omnisciente
El castaño entró en la tienda haciendo un leve ruido con la campana. Al estar dentro un leve olor a canela lo invadió, estaba frente a un estante lleno de discos de todo tipo, de vinilos hasta cassettes, el lugar era alumbrado por unas luces blancas a los costados de las paredes, pero lo que captó su atención fue la chica que se encontraba detrás del mostrador leyendo una novela romántica de John Green, mientras escuchaba "careless whisper", el sonido de la canción acompañaba todo el solitario lugar,
El chico empezó a acercarse sigilosamente intentando que la chica no tuviera distracción en su lectura, la rubia en ningún momento despego su mirada del libro hasta que llego el fin de la canción, la chica bajó de su silla para guardar el vinilo, pero la asustó la presencia de aquel chico.
—Buenas noches, me he desviado del camino y llegue hasta acá. —El chico se fue acercando más a ella. —¿Me puede ayudar a comunicarme con mis padres para que me recojan? Es que me quede sin batería.
El castaño espero que la chica se lanzara a sus brazos o pegara un enorme grito que probablemente llegara a su casa, era lo que usualmente sus fanáticas hacían.
—Claro, puede usar el teléfono del estante. —Le señalo un teléfono antiguo de color crema.
El chico algo desconcertado por la actitud desinteresada y relajada de la chica. Al finalizar su llamada después de escuchar los gritos de su preocupada madre, dejo el teléfono en su base y la observo, ella estaba de espaldas buscando un vinilo.
—Ya he terminado, muchas gracias. —Dijo retrocediendo de donde estaba el teléfono. —¿Hay algún problema con quedarme acá? Mi hermana ya viene en camino.
—Claro, sin problema. —Dijo la chica mientras se ponía una gabardina color champagne que estaba en el respaldo de la silla.
—¿Cómo te lo pago? ¿Quieres un autógrafo, un salud...
La chica dejo de acomodar sus dorados cabellos para volverlo a ver incrédula y con una mirada sarcástica.
—No me digas que puedes conseguir un autógrafo de Canserbero.
—No... yo me refería a un autógrafo mío.
—¿Quién eres? —Le pregunto con una sonrisa irónica, el chico la miro con el ceño fruncido y una mirada de rareza.
—¿No sabes quién soy?
—Por algún lado te he visto, y me eres familiar. —Dijo haciendo que el chico alzara sus cejas con sorpresa. —Solo quiero que tú me lo digas.
—Timothée... —Le dijo dudando, ella lo miro con una ceja levantada. —Chalamet.
Ella murmuro un suave ya y se subió en la silla para proseguir con su lectura.
—Te llamas Ginevra ¿no? —Dijo el chico volviendo su mirada al dije en forma de corazón que llevaba la rubia en su cuello.
—Ginevra Penderghast. —Le dio una sonrisa, el de cabellos rizados sonrió bobamente asintiendo.
—Tienes un nombre peculiar y muy bonito a la vez.
—Verdad, mi madre era muy fan Harry Potter, solamente que termine siendo una rubia antes que una pelirroja, absolutamente nada parecida a los Weasley.
—¿Dónde están tus padres? Es de madrugada, no es muy común ver a una chica como tú en una tienda de discos a esta hora, puede ser peligroso. —Dijo mientras se quitaba el gorro de su sudadera de la cabeza.
—Mi padre debe de estar en casa, yo regreso a mi casa por ahí de las tres de la mañana, cuando la noche está en su punto, pero de hecho, estaba terminando mi lectura para irme. —Dijo mientras apagaba el monitor de la computadora.
Timothée asintió mirando el lugar con más detenimiento, un silencio bastante cálido los acompaño mientras él se balanceaba hacia delante y atrás con frío y ella guardaba el libro en un cajón con llave.
—Estabas escuchando George Michael, ¿te gusta?
—Claro, ¡es uno de mis cantantes favoritos! imagínate que mi madre y yo vivimos una experiencia bastante linda con él.
Esos diez minutos la rubia le paso contando la historia al castaño mientras apagaba poco a poco el local. El castaño miraba detenidamente a la chica, cada detalle de su cara, de su ropa, de su manera de hablar.
—Mamá estaba tan emocionada que me hizo ir al hotel donde el se hospedaba, cuando él nos abrió mamá grito como nunca. —Dijo mientras se quitaba la diaema negra que tenia un su cabello para acomodarla. —Fue muy amable, me invito a un jugo de durazno y a mamá una taza de Capuchino.
—Wow, eso tuvo que ser demasiado emoc... —El sonido de un claxon los interrumpió. —Fue un gusto conocerla, espero no haberte molestado Ginny.
El chico salió del local, adentrándose en la camioneta azul marino sin no antes darle una última mirada al lugar.
—¿¡Se puede saber donde fue que te metiste Timothée Hal Chalamet!? —Dijo Pauline en un tono bastante elevado, pero para el chico de ojos verdes azulados no pareció importarle mucho.
Después de que el Jeep Gladiator se perdiera en la carretera, la chica de ojos verdes brillantes dio una ultima ojeada a la tienda, puso su bolso en sus hombro derecho y dio un largo suspiro para después bajar la cortina de metal. Saco de su gabardina una caja de chicles de donde saco uno y después empezar a caminar.
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LA NOCHE MAS LINDA ─── Timothée Chalamet
Fanfiction✧ ┊LA NOCHE MAS LINDA ‿︵‿︵‿︵୨˚̣̣̣͙୧ - - - - - ୨˚̣̣̣͙୧‿︵‿︵‿︵ ╰─➤Ella amaba sus tacones, él la amaba a ella. Créditos a: @moonaghaskata