El Amigo De Mi Hermano [Spreen y Tú]

Capítulo 1

Como era de costumbre estaba apagando el stream luego de haber estado en directo al rededor de unas dos o tres horas, eran las 12:00AM y ya estaba cansada, así que me despedí de mi audiencia y apagué.

-Chau boluditos, mañana prendo de nuevo a la misma hora, puntuales los quiero a todos o los cago a piñas- Dijo la chica para luego apagar y acostarse en su cama -No sé por qué siento que hoy tenía que hacer algo.

No le dio mayor importancia y se dio vuelta para caer en un profundo sueño del que casi no despierta al día siguiente por culpa del cansancio acumulado en su cuerpo.

-Despertate pajera- Dijo una voz de niño pequeño.

-¿Qué querés Thiago? Si todavía es re temprano- Dijo dándose vuelta con los ojos aún cerrados, agarró su celular  lo prendió- Mierda. 

-Ya son las doce del mediodía Sofía, levantá el orto porque hoy le prometiste a Tomi ir a comprar temprano para que el pueda salir con los amigos

-Si, de eso me olvidaba ayer!

La ya nombrada salió casi volando de la cama, agarró lo primero que encontró en el ropero y fue al baño de su habitación para vestirse y luego peinarse con dos colitas.

Cuando finalmente terminó de arreglarse se veía con unos jeans y un buzo negro y holgado el cuál le había robado del placar a su hermano mayor haciendo juego con sus dos colas de caballo que tan bonitas se veían con su largo y rubio cabello.

-Thiago, ¿dónde está la tarjeta?- Le gritó Sofía a Thiago, ya que nunca recordaba donde había dejado sus cosas.

-Fíjate arriba de la mesa de la cocina, la dejaste ahí la última vez que te vi que venías del súper.

Tal y como le había dicho su hermano, estaba sobre la mesa de la cocina, así que tomó una bolsa, agarró su patineta y salió casi a 60KM por hora al supermercado.

-No me la contes Tomi va a llegar dentro de poco de la Universidad y se va a querer ir con los amigos, y yo no tengo nada de lo que le dije que haría pronto.

El skate paró frente a la puerta del local y la chica entró con él en la mano y comenzó a buscar.

-¿Qué tenía que comprar?- Se preguntó a sí misma- No me digas que me olvidé de la nota que me dejo Tomi, bueno no importa llamo a Thiago y le digo que me pase todo por mensaje- Comenzó a buscar en sus bolsillos- ¿Y mi celular? Mierda me lo olvidé.

La rubia salió del supermercado y emprendió viaje con su patineta nuevamente en lo que vio algo que hizo que su sangre se helara.

-Tom, ¿La de allá no es tu hermana?

-¿Mi hermana?- Volteó a ver- Sofi está en casa.

-Amigo, te juro que la acabo de ver.

-Rodri no rompas los pelotas y vamos a casa.

Los chicos se fueron y Sofía salió de su escondite, el cuál era detrás de una de las paredes del edificio, se había salvado de esa, pero si su hermano y sus amigos iban a su casa, no tenía como zafarse, tenía que ser más rápida que ellos.

-Señor, señor!- Dijo agitada- ¿Me podría prestar su teléfono? Tengo que llamar a mi hermano!

El hombre confundido y pensando que la chica le iba a robar salió corriendo, entonces a la rubia no le quedó de otra que rendirse.

Estaba sentada un poco apagada, estaba acostumbrada a conseguir lo que ella quería siempre, y al mirar hacia atrás supo que esta vez, no iba a ser la excepción.

-Señora, ¿me haría el gran favor de colaborar con una monedita?

A decir verdad, se sentía apenada de tener que pedir limosna, y más sabiendo que ella no la necesitaba, pero no iba a tirar la toalla en tan solo el primer intento.

La señora le dio una moneda y se fue algo confundida, a lo que la chica le agradeció.

-10 pesos me da la vieja soreta, no voy a durar ni 30 segundos- Se quejó en voz baja.

Esto no le importo y fue corriendo a la cabina de teléfono más cercana, puso los 10 pesos y llamó.

En unos segundos escuchó la voz de su hermano, el cuál le preguntaba que quién era.

-Thiago, soy yo, Sofi, por favor decime que tengo que comprar, la nota que me dejó Tomi está arriba del escritorio y dejá abierta la ventana de la cocina.

-Ya voy- El niño abrió la ventana y luego se dirigió al cuarto de Sofía, agarró la nota que se encontraba sobre el escritorio y le dijo todo a su hermana, la cuál debido a ese enorme favor estaba casi a punto de rezarle al ya nombrado.

-Gracias, Thiaguito te quiero mucho hermano.

-Te quiero las bolas, me das tu postre una semana.

-¿Y si me chupas bien la verga?- Dijo la rubia y el teléfono se cortó.

Agarró su skate nuevamente y fue otra vez al supermercado a comprar todo.

-Mierda, ¿por qué tiene que haber tanta fila? Que fiaca esperar, además no voy a llegar a tiempo!

Terminó de pagar todo y salió a su casa, pero Tomi y sus amigos ya estaban llegando, así que activó su lado ninja y se fue por otra calle para llegar a la parte de atrás y se metió por la ventana de la cocina la cuál ya estaba abierta por su hermano.

Cuando finalmente llegó dejo las compras sobre la mesa y esperó a Tomi, el cuál llego 5 segundos después de que ella hubiese llegado.

-Hola, Tomi!- Dijo alargando las últimas letras de cada palabra- Te estaba esperando para darte la compra.

-Hola, Sofi, gracias por comprar por mi hoy- Dijo este y la saludó con un abrazo.

-Hola, Rodri- Saludó al amigo de su hermano.

-Hola, Sofi- Le devolvió el saludo con la mano.

-Hola....- Dijo mirando a aquel alto chico

-El es Iván, Sofi, Iván, Iván, Sofi.

-Hola, Iván.

-Hola. Sofi- Saludó estrechando la mano, era bastante atractivo.