CAPITULO 14

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Gulf no tenía ningún buen recuerdo de su padrastro, todo en su mente eran peleas y discusiones.

Jack era parte de una pandilla bastante conocida en la zona, era conocido como alguien violento y peligroso, Gulf podía recordar claramente la cantidad de veces que él llevó mercancía robada a su casa y también podía recordar la impotencia que sentía al ver que su madre no hacía nada para impedírselo.

Como si su vida no fuera lo suficientemente difícil, a Jack se le ocurrió la brillante idea de que él también trabajara a su lado, estaba emocionado desde que lo vio pelear con un grupo de adolescentes que lo molestaron, y creía erróneamente que Gulf tenía potencial para ese trabajo, decía que su fuerza y buen aspecto era una ventaja que no se podía desperdiciar.

Gulf peleó aquella noche por que esos chicos quisieron arrebatarle lo que había ganado en el trabajo del mercado y que se suponía era para comprar los libros que necesitaba, Gulf no era de los que golpeaba a diestra y siniestra al que se le cruzaba, sin razón alguna, solo lo hacía para defenderse o defender a los suyos, pero ante los ojos de Jack él era un matón más .

Incluso aguantó golpes cada vez que se negaba a vender mercancía o cuando no aceptaba  ir con él al club de mala muerte al que iban todos en esa época o cuando no quería ir como cobrador a distintos sitios de los barrios bajos.

Esos recuerdos le causaron incontables pesadillas, era como vivir en un campo de guerra con el miedo constante, pero desde la muerte de su madre los lazos entre ellos se habían roto para siempre.

_bueno supongo que por las buenas no vas a entender_ esa era una forma de amenaza que Gulf conocía perfectamente y se rio con sarcasmo por eso.

Era tan absurdo que después de todo ese tiempo todavía tenía la mala suerte de escucharlo.

Los vestidores se encontraban en la parte trasera del edificio de la facultad, a varios metros de distancia de las canchas, ya no había nadie en los alrededores, todos se habían ido poco a poco después del partido.

Solo quedaban Gulf y Jack, escondidos por la gran pared y la malla que dividía la zona verde.

_¿me estas amenazando?_

_tómalo como una advertencia, es tu culpa por no recordar con quien estás hablando_

Gulf hasta ese instante no había notado que a su costado izquierdo tras la esquina de la pequeña caseta vacía, se encontraban dos tipos con apariencia desaliñada, de la misma altura y edad que él, bastó una señal de Jack para que lo rodearan.

Debía poner atención, últimamente había bajado la guardia estúpidamente.

Sujetaron sus brazos y lo inmovilizaron, eran de esos tipos acostumbrados a las calles que sabían cómo pelear, quizá no se veían fuertes, pero eran mañosos al momento de atacar.

_¡vas a golpearme... estás loco!_ grito Gulf enojado, sus brazos estaban siendo doblados hacia espalda con brusquedad, su hombro comenzó a doler por la presión, una mano que no sabría decir de cuál de ellos era, sujetó su cabello y lo haló hacia atrás, levantando su barbilla.

_intento ser amable Gulf, pero eres demasiado terco, si hicieras lo que te digo no estaríamos de esta forma_ dijo acercándose _¿por dónde debería empezar?_ Jack barrió con desdén el cuerpo de Gulf divirtiéndose por la forma en que forcejeaba.

Los ojos de Gulf seguían manteniendo esa ferocidad inigualable, tan rebelde e indomable  que causaba que el aire se incendiara a su alrededor, a Jack siempre le gustó ese tipo de personalidad, lo estremecía y avivaba su ser, si tan solo Gulf aceptara estar a su lado todo sería mejor, pero no había el tiempo suficiente para seguir con el juego de persuasión, necesitaba su ayuda con urgencia, estaba siendo presionado al límite por las deudas de juego y necesitaba efectivo cuanto antes, en la actualidad ya no era el líder de una pandilla, se había convertido en el peón de alguien más , así que sus ingresos eran ridículos en comparación con antes.

WAY BACK HOMEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora