| 𝐭𝐰𝐞𝐧𝐭𝐲 𝐟𝐢𝐯𝐞

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—CONTENIDO MADURO ADELANTE—

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—CONTENIDO MADURO ADELANTE—

(por favor, sáltate este capítulo si te sientes incómodo, ya que contiene contenido obsceno detallado)

—Mmm. —un jadeo sale de mis labios cuando me empuja contra la pared, sus labios chupando la parte sensible de mi cuello.

—No sabes cuánto tiempo he esperado esta noche para quitarte esta cosa. —habla en voz baja, sus brazos trazando hacia mi espalda, en un intento de encontrar la cremallera de mi vestido.

—¿Es así? —exclamo.

—Oh, no tienes ni idea de cómo estoy planeando arruinarte, cariño. —casi me arranca el vestido del cuerpo, dejándome en ropa interior delante de él.

La sonrisa más grande se forma en mi cara cuando me quito el vestido y me doy cuenta de que llevo un conjunto de encaje verde a juego que que le volverá loco.

—Las cosas que me haces. —murmura, agarrándome de la muñeca mientras tropezamos por la habitación, dejando un rastro de ropa de los dos por el camino.

Mi espalda golpea el colchón, su cuerpo ahora se cierne sobre mí cuando se sumerge besando desde mi cuello hasta mis pechos- una mirada hambrienta y lujuriosa ahora cubierta completamente en sus ojos. —Joder, Elara.

—Te necesito Draco. —exhalo, sus labios dejan besos por todo mi cuerpo.

—Paciencia amor. —susurra roncamente en mi oído.

Eso es lo que no tengo. Paciencia.

Nos damos la vuelta para que yo me siente a horcajadas sobre su regazo, e ignoro por completo el repentino cambio de actitud que aparece en su cara. Colocándome justo encima de su duro bulto, sonrío al darme cuenta de que soy yo quien le ha provocado esto. Si es que es posible, se pone más duro con mi contacto... y me encanta cada segundo de esto.

Mis labios empiezan a dejar besos con la boca abierta justo debajo de su oreja, donde sé que está el punto dulce. Mis besos empiezan a ser un poco más descuidados y duros cuando llego justo al punto correcto: el gemido más caliente se escapa de sus labios.

Bingo.

—Ahora, Draco, no tengo paciencia, así que supongo que vas a tener que castigarme. —le bato las pestañas, susurrando mientras veo cómo sus ojos se llenan de lujuria.

Inmediatamente, en cuestión de segundos, mi ropa interior se rasga y me arrastra hasta el borde de la cama donde él está ahora de pie, con una mirada seria formada en su rostro.

—Rodillas. Ahora. —exige, con una voz peligrosamente grave.

Su voz es tan dominante que dejo escapar un gemido...

𝐖𝐞𝐚𝐬𝐥𝐞𝐲 ━━ 𝐷𝑟𝑎𝑐𝑜 𝑀𝑎𝑙𝑓𝑜𝑦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora