ten » right where you left me

2.7K 361 112
                                    







capítulo diez
( justo donde me dejaste )

CUANDO KATE REGRESÓ AL APARTAMENTO, cargada de lo que ella consideraba imprescindible para celebrar la mejor Navidad posible, encontró a Betty sentada en suelo del pasillo, junto a la puerta del apartamento

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.












CUANDO KATE REGRESÓ AL APARTAMENTO, cargada de lo que ella consideraba imprescindible para celebrar la mejor Navidad posible, encontró a Betty sentada en suelo del pasillo, junto a la puerta del apartamento.

Sostenía un cigarrillo en la mano. Kate la miró, intrigada.

—¿Fumas?

—Fumaba —replicó Betty, haciendo una mueca. El perro fue junto a ella y Betty le acarició distraídamente—. O eso es lo que intento. Llevo meses sin hacerlo, pero a veces la tentación es más fuerte. Así que recuerdo todas las cosas que me llevaron a fumar y luego... —Lo tiró al suelo y lo pisoteó—. Fin. Es terapéutico, creo. He decidido comenzar a superar mis traumas, pero no va a ser precisamente fácil. Tengo que reflexionar antes. —Sonrió, como si tal cosa, se levantó y miró a Kate—. ¿Alguna vez has fumado?

—¿Yo? No —dijo la chica, sorprendida por la pregunta—. Nunca me llamó la atención.

—Buena chica. Créeme, no te conviene empezar. —Echó un vistazo a la caja de pizza que llevaba Kate y al sombrero que tenía en la cabeza—. Así que ¿quieres revivir el espíritu navideño?

—Es Navidad y vamos a celebrarlo —declaró Kate—. ¿De acuerdo?

Betty rio al notar su decisión.

—De acuerdo. —La última Navidad fue un fracaso. No iba a estropear aquella—. Pásame uno de esos gorros. Tine llegó hace rato, podemos celebrarlo los cinco juntos.

Abrió la puerta del piso y dejó pasar a Kate y al perro primero.

—¿Hola? —saludó Kate al entrar.

—Hola —respondió Clint.

—¿Qué hay? —dijo Tine.

—¿Una ayudita? —probó Kate.

Clint estaba tumbado en una butaca, con lo primero que había encontrado en el congelador sobre los golpes: packs para hacer granizado que Betty pensaba usar más tarde. Tine descansaba sobre el sofá, dentro de una chaqueta de cuero gastada.

—¡Eh, deja eso! —protestó Clint, cuando el perro trató de comerse sus patatas fritas.

—Deja que te coja esto, anda —dijo Betty, quitando la caja del árbol de Navidad de brazos de Kate.

—Vale, ese es el uniforme de Ojo de Halcón que te hacía falta —comentó Kate, echándole un vistazo a Clint.

Betty y Tine rieron por lo bajo.

✓ ARTEMIS. ❪ kate bishop ❫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora