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El lunes llegó nuevamente, pues su última esperanza era que para el lunes todo volviera a la normalidad, pero no.
De nuevo los tres se reunieron pero ahora en la escuela, pues al menos Kageyama y Tsukishima ya no tenían que fingir con Yamaguchi, lo cual era un gran alivio para ambos.

— Así que siguen estando en el cuerpo del otro... —Yamaguchi fue el primero en hablar, pues aún faltaba algo de tiempo para que iniciaran las clases.
— ¿No creen que deberían decirlo a los demás? —Propuso, pues él no era el único que pensaba que esos dos actuaban extraños.

— No, el simple hecho de estar en el cuerpo de Kageyama es bastante humillante. —Contestó Tsukishima, pues que su amigo se haya enterado de esto era suficiente.
— Además decir que cambiamos de cuerpo no suena algo creíble.

El pecoso le dio la razón, incluso a él aún le costaba procesarlo. Así que la conclusión fue la misma, seguir fingiendo ser el otro.



Fueron a clases, Kageyama estaba sentado a unos cuantos lugares del pecoso, el plan era hacer lo mismo que los otros días, fingir prestar atención a pesar de que no sabía o entendía la mayor parte, pero parece que hoy había otros planes.

— De acuerdo, tomen una hoja y pasen las demás. —Dijo el profesor mientras entregaba hojas a los que se encontraban en los primeros asientos de las filas.

Yamaguchi volteó a ver a Kageyama y vio su cara de pánico, era un examen sorpresa, lo cual hasta cierto punto era común ya que esa clase era de preparación para la universidad, pero no para las clases comunes como las de Tobio.
Kageyama no sabía que iba hacer, ni siquiera en sus exámenes salía bien, tenía cero posibilidades de hacerlo en un examen de una clase avanzada.

Una vez que Tobio tuvo la hoja del examen sobre su pupitre, no tenía idea de nada, ni siquiera entendía de qué materia era, lo único que entendía era la parte donde le pedía que escribiera su nombre y hasta en eso podía equivocarse, porque no estaba en su cuerpo.

Volteó con Yamaguchi el cual le estaba haciendo señas, pero no las entendía, estaba perdido. De pronto sintió como un papelito cayó a su pupitre, lo abrió cuidándose de que el profesor no lo viera y notó que eran algunas respuestas, besaría a Yamaguchi una vez que estuviera en su cuerpo por salvarlo... Aunque no era un examen que le afectaba, la ansiedad de solo tener el examen frente a él era demasiada.

Tadashi le pasó las preguntas que él consideraba que iba a tener problemas por la dificultad, esperaba que a todo lo demás le fuera bien.



— ¿Qué tal el examen? — Una vez que la clase ya había terminado y era hora del almuerzo, el pecoso se acercó para ver que tal le había ido.

— ¿Crees que Tsukishima me mate si reprueba por mi culpa? —Preguntó mientras se levantaba para ir con los demás.

— Tsukki no sería capaz de matar a nadie. —Dijo algo burlesco por la seriedad con la que había dicho aquello, como si realmente fuera a asesinarlo.

Al llegar a la azotea Tadashi se sentó en medio de Kageyama y Tsukishima, pues haría todo lo posible para tratar de ayudarlos y que no se viera sospechoso.

Como Yamaguchi ya sabía que Kageyama estaba en el cuerpo del rubio, cuando quería dirigirse con su novio sabía que debía ver al de lentes, pero para no levantar sospechas también hablaba con Tsukishima que estaba en el cuerpo del pelinegro.


Durante el entrenamiento Tsukishima por fin podía entrenar y estar cerca de Yamaguchi sin sentirse nervioso, pues ya sabía que no era Tobio y no intentaría besarlo o abrazarlo.

— ¿Qué tal te fue hoy, Tsukki? —Era tan extraño hablar de esa forma ya que estaba viendo otro rostro.

— No sé como Kageyama soporta a Hinata. —Dijo Tsukishima entre un suspiro, pues estaba harto de escuchar al enano con teorías y estupideces.

— No debe ser tan malo. —Su amigo a veces solía exagerar, así que probablemente no debía ser para tanto, él también conocía a Hinata y no le parecía insoportable como decía Tsukki.

— El otro día Yachi y él estaban jugando a los detectives, me interrogaron porque era "sospechoso" y Hinata hizo un escándalo diciendo que me arrepentiría cuando fuera famoso. —Hizo una mueca de desagrado al recordar aquello.

Por su parte Yamaguchi soltó una carcajada al escuchar aquello, pues lo imaginó y le resultó graciosa la escena. Tsukishima escuchó la risa de su amigo, esto era lo que extrañaba, hablar con él y reírse de tonterías como antes.


Cuando terminó el entrenamiento Tadashi se despidió de "Kageyama" que en realidad era su amigo. Así que se encontraba caminando a casa con Tobio.

— Estoy harto de esto, no puedo fingir ser Tsukishima un día más. —Soltó Tobio en un cansado suspiro, aunque a diferencia de la primera vez, ahora podía quejarse en voz alta.

— Tranquilo. —Palmeó un poco su brazo, pues a pesar de que sabía que era su novio, miraba el cuerpo de Tsukki y era muy extraño.
— Probablemente vuelvan a su cuerpo pronto, dijeron que volvieron de la nada, tal vez sea igual. —Trató de animarlo.

— Pero no es justo, ¡quiero estar en mi cuerpo! —Bufó. — Esto es culpa de Tsukishima.

Yamaguchi recordó que ambos dijeron que querían pasar más tiempo con él, así que sentía que eso debía ser la causa.
— Tal vez... Si paso más tiempo con Tsukki vuelvan a sus cuerpos. —Comentó pensativo, pues no sabía si realmente funcionaría, pero podía ser una posibilidad.

— ¿Por qué? —Sin embargo Tobio no parecía entender.

— Ambos dijeron que querían pasar más tiempo conmigo, tal vez sea eso... Yo antes me la pasaba con Tsukki siempre. —Hizo memoria.
— Si tu estabas en el cuerpo de Tsukki eso significa que llegué a pasar más tiempo contigo. —Estaba intentando usar la lógica.

Kageyama también hizo memoria, pues tenía algo de razón, logró conocer más a Yamaguchi gracias a eso.
— Eres tan inteligente que podría besarte. —Dijo acercándose a su rostro.

Pero Yamaguchi dio un paso atrás mientras ponía sus manos como escudo.
— C-creo que esperaré a que estés en tu cuerpo para besarte. —Ahora sentía como se sentía Tsukki cuando él intentó besarlo.

— Ah, cierto... —Recordó el pequeño detalle de que no estaba en su cuerpo, pues como ya podía actuar como realmente era con el pecoso, se olvidó.

Body changeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora