Body change

5

— Hinata ha estado actuando muy raro estos días, ¿no crees? —Dijo Yamaguchi, cuando se encontraba en la hora del almuerzo con Tsukishima.

— Siempre ha sido raro. —Kageyama contestó sin alzar la vista de su almuerzo, pues se sentía algo culpable, porque la razón de que Hinata estuviera actuando así era porque quería "ayudarlo" a confesarse a Yamaguchi.

— Pero esta semana ha sido de una manera aún más rara, desde el lunes que te dio un balonazo de la nada, el martes que Kageyama dijo que Hinata quería estudiar por separado, el miércoles no tuvimos entrenamiento. —Estaba recordando todas las cosas que Hinata hizo en la semana que se le hicieron extrañas, pero definitivamente la de ayer fue la más rara. —Y ayer me preguntó sobre quien me gustaba y esas cosas. —Terminó de decir aquello con las cejas fruncidas pero no porque estuviera molesto, sino porque estaba confuso.

Kageyama abrió los ojos mientras alzaba la vista para ver al moreno, ¿Hinata hizo qué?
— ¿Qué te preguntó Hinata? —Preguntó fingiendo desinterés, la curiosidad lo estaba matando, pero tenía que fingir ser Tsukishima.

— Si me gustaba alguien, si tenía un tipo ideal y esas cosas... Se me hizo un poco raro. —Contestó alzando los hombros.

Kageyama tenía curiosidad por saber eso, maldecía no estar en su cuerpo porque no se enteraba de muchas cosas que Hinata hacía, ¿sería raro si le preguntaba? No sabía si Tsukishima lo haría.
— ¿Y te gusta alguien? —Pero tenía mucha curiosidad.

— No, y aunque me gustara alguien, no creo que tenga oportunidad. —Dijo dando una sonrisa fingida mientras agachaba la vista y jugaba con su almuerzo.

— ¿Por qué dices eso? —No le gustó esa reacción por parte del moreno, parecía triste cuando dijo aquello.

— Porque yo no soy alguien que sobresale... Y ya sabes, cada vez que se me acerca una chica y es amable conmigo, es porque quiere acercarse a ti. —Yamaguchi dijo con una sonrisa nerviosa mientras se rascaba la nuca, lo hizo para que no sonara como algo que le importara.
Pero a Kageyama esa sonrisa se le hizo falsa y lo hizo sentir mal, pues para él Yamaguchi no era nada de eso.

Iba a contestarle algo diciéndole que no era cierto y que pensaba que él valía mucho, pero cuando estaba por hacerlo tocó la campana, Yamaguchi recogió sus cosas y acomodó la silla para luego irse a su lugar.
Kageyama se sintió mal al escuchar aquello, no sabía que Yamaguchi se sentía así y de nuevo empezó a enojarse con Tsukishima, ¿acaso no le importaba que las chicas se acercaran a Yamaguchi solo por conveniencia? Definitivamente Tsukishima era un idiota.

  

Tsukishima jamás pensó que haría un examen de historia para Kageyama, pero al menos puso unas respuestas incorrectas, porque hacerlo sacar un 100 sería demasiado bueno incluso para él; y no lo ayudó porque fuera generoso o sintiera lástima por él. Lo hizo porque Yamaguchi estaría interesado en el resultado del pelinegro, y si Kageyama tenía un mal resultado, Yamaguchi probablemente se sentiría culpable por ser un mal tutor.

Ahora se encontraba camino al gimnasio y a decir verdad se le hizo un poco extraño e incluso podría decir que daba algo de miedo que Hinata no se le apareciera en el día de hoy a la hora del almuerzo, pero no debió pensar en eso, pues justo cuando lo pensó, Hinata apareció detrás de él. Pero sorprendentemente no le habló, sino que lo pasó por alto y entró directamente al gimnasio y específicamente se fue a dirección donde estaba Yamaguchi y "Tsukishima".

— ¡Tsukishima, haz los estiramientos conmigo! —Gritó Hinata mientras se acercaba a donde se encontraba el rubio.

Todos se sorprendieron por esa repentina petición, Yamaguchi estaba sorprendido porque tenía entendido que Hinata odiaba a Tsukishima, ¿entonces por qué quería hacer estiramientos con él? Aunque bueno, probablemente solo era para molestar. Tsukishima tenía el presentimiento de que probablemente era alguna estúpida idea del estúpido plan del pelinaranja.
Kageyama frunció las cejas en modo de confusión, ¿qué se traía ahora el idiota de Hinata? Ahora mismo estaba en el cuerpo de Tsukishima, por lo que no tenía sentido que le pidiera eso al rubio.