𝒞𝒶𝓅𝒾́𝓉𝓊𝓁ℴ 2

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 —¡Tío Gulf! ¡Tío Gulf! 

—Mew sonrió cuando Gulf le entrego la maleta (de hecho, la aventó hacia él sin ninguna delicadeza) pero perdonaba ese hecho cuando lo vio correr hacia una pequeña niña que agitaba sus bracitos ansiosamente llamando su atención.

—¡Mi princesa! Mira que enorme estas —Gulf tomo en brazos a la niña, la cual encantada comenzó a darle besitos por toda la cara. Suponía que era la sobrina que había mencionada.

—Permíteme ayudarte — dijo un hombre tomando una de las maletas. –Soy Scott, por cierto

—Mew —presentándose y dándole la mano —Soy el novio—

—Soy el esposo de su hermana — dijo él con una sonrisa —Es agradable conocerte—

—Veo que ya se conocieron — intervino Gulf saludando a su cuñado de mano. Luego se dirijo a la niña en brazos —Princesa, él es Mew...—

—¿Tu novio? Mama lijo que tlaias a un novio

—Mew rio ante las palabras de la niña, tan chiquita, pero a pesar de que no podía pronunciar bien, era muy lista.

—Nao —la regaño su papa —¿Qué te dije que escuchar conversaciones de adultos?

— la pequeña hizo un puchero. —Pero papí...

—No importa— dijo Gulf —si princesa, es mi novio

—Mew tomo la mano de la niña y le sonrió. —Mucho gusto hermosa, tu tío me ha hablado mucho de ti —no era verdad pero tenía un papel que representar, además no le estaba costando mucho trabajo. Era obvio que Gulf adoraba a esa niña

—Eles lindo— todos rieron ante lo que dijo la niña

—Gracias... pero tú eres todavía más linda— aseguro él apartando uno de sus mechones rubios de la cara. Después de las presentaciones todos abordaron el vehículo de Scott, le había tocado ocupar el asiento del copiloto, puesto que en la parte de atrás venían Nao y Gulf poniéndose al día, al parecer el ser parlanchín venia de familia. 

El cambio en la actitud de Gulf fue muy obvio al momento de que llegaron a la cabaña, Mew observo como palidecía y todo su cuerpo se tensaba. Entre Scott y él se ocuparon del equipaje mientras Gulf y su sobrina jugueteaban en la nieve, en un claro intento de retrasar lo inevitable.

—¡Gulf! Mi vida, estas aquí una mujer rellenita de mediana edad salió al porche

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—¡Gulf! Mi vida, estas aquí una mujer rellenita de mediana edad salió al porche. Era la madre, estaba seguro, el parecido era muy obvio.

—Hola mamá —dijo Gulf tomando a Nao en brazos y subiendo los escalones de madera, su madre lo abrazo sin importar que traía a la niña en brazos.

—Me alegro que estés aquí mi amor

—¿Mamá? Estas asfixiándome 

—la mujer rio y se separó de su hijo, Mew subió al porche cargando su maleta y su bolso de viaje y Scott le ayudaba con las cosas de Gulf. 

—Mamá él es Mew, mi novio

— Si en algún momento de la vida Mew deseo una madre diferente a la suya, estaba seguro que a él le hubiera gustado una madre como la de Gulf. 

La mujer de mediana edad le sonrió y lo abrazo como si fuera su propio hijo, le aseguro cuanto estaba feliz de conocerlo, estaba claro que la mujer no tenía problema alguno con que su hijo fuera gay. 

Eran de los pocos padres que aceptaban eso, era increíble. Pero no todo podía ser perfecto, algo le llamo la atención, tal vez fue la sensación de ser observado, al levantar la vista se encontró con unos ojos marrones que lo miraban a través de la venta, estaba seguro que ese hombre castaño no era otro más que First, el ex novio de Gulf, claro que lo era, apostaba su vida en ello, después de todo está claro que los Kanawut eran en su mayoría pelinegros. 

Durante unos segundos ambos se observaron, después el castaño desapareció a través de la cortina. Interesante. En su breve segundo de observación Mew había llegado a una interesante conclusión. 

El ex novio de, Gulf ahora era el esposo del hermano sentía celos de Mew por ser el novio actual de este... esto se estaba poniendo interesante.  

                                                                                   ★★★

—Creo que salió bien ¿verdad? — Gulf se movía nervioso por la habitación, hasta ahora todo estaba bien, no los habían descubierto, tenía que admitir que el recibimiento de su familia fue muy bueno, hasta Leo su hermano se había mostrado feliz de verlo...pero no hay que confiarse, así era el modo operandi de su hermano, atacaba cuando menos lo esperaba y First... Gulf cerró los ojos, había sido duro verlo nuevamente.

—Debes relajarte, ni siquiera tienen de que sospechar, todo estará bien 

—Gulf abrió los ojos para mirar a Mew, el cual estaba acomodando ropa en su cómoda.

—Es fácil para ti decirlo, después de todo a engañar a la gente es a lo que te dedicas, pero yo.... — se mordió la lengua, estaba asustado y lo estaba pagando con el hombre que le estaba haciendo el favor de hacerse pasar por su novio, bueno favor no, puesto que le estaba pagando, pero aun así... —Lo siento, no debí...

—Tranquilo lo interrumpió el hombre tomando su bolsa de viaje —Tienes razón, yo estoy acostumbrado, pero debes de tener confianza de que todo saldrá bien.

—Temo quedar en ridículo delante de todos —odiaba sentirse tan inseguro, pero Firts y Leo arruinaron su confianza para toda la vida.

Mew se detuvo delante de él, no lo toco, aun así, Gulf se sintió incomodo ante la cercanía.        —Solo relájate ¿sí? Todo saldrá bien, no permitirá que sea de otra manera

— Gulf sintió su aliento atascado en sus pulmones cuando él toco su mejilla con la yema de su dedo, fue una caricia rápida y sin segundas intenciones, pero Gulf sintió un estremecimiento por todo su cuerpo, Mew le sonrió y después se alejó hacia el cuarto del baño.

—¡Mierda...! — susurro, él estaba metido en problemas.

𝒯𝒽ℯ 𝒞ℴ𝓂𝓅𝒶𝓃𝒾ℴ𝓃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora