Capítulo [14]: Insistencia.

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Capítulo [14]: Insistencia.

-¿Qué le ves?

-Cosas que obviamente tú no notas- le respondió Patrick.

-Bien pues, dímelas, a ver si yo las noto la próxima vez que nos veamos- insistió Elvira. Patrick se levantó del mueble en el que se encontraba echado, y se dirigió al minibar de la habitación del hotel, tomó una botella de agua mineral, y la abrió mientras le miraba con aire cansino.

-¿Qué le ves a Dylan?- Había dado en el blanco con su pregunta. La chica frunció el ceño.

-¡Esto es sobre ti, no sobre mi!

-¿Era sobre mi?

-Dylan no me gusta.

-No, y a mi no me enloquecen las curvas del cabello rojizo de Silvia, no señor.- Dijo sarcástico Patrick, a la vez que volteaba los ojos. Dio un largo trago a la botella, sin que esta tocase sus labios. Elvira miraba su manzana de Adán, que se movía a medida que tragaba el agua.

-Uysh, qué cursi te volvió la niña.- Patrick la miró de manera desaprobada.

Alguien tocó la puerta del hotel repetitivas veces. Ambos se miraron con el ceño fruncido, hasta que Patrick cerró la botella de agua que aun sostenía en sus manos, y se acercó a la puerta de madera. Miró por el ojo de la puerta, y lanzó alguna maldición, no esperaban visitas hasta dentro de un par de horas. Elvira rió por su palabrota, casi nunca las decía.

-¡Señor O'Scrums!

-¡Patrick querido!- saludó un señor mayor de baja estatura y regordete, con las mejillas sonrosadas. -¡Elvira querida!- El hombre entró en la habitación sin invitación alguna, abrazando a la chica que le veía la calva y brillante cabeza desde arriba.

-¿Qué le trae por aquí?- le preguntó, más que todo para sacárselo de encima.

-¿Qué me trae por aquí?- susurró para sí mismo. -¡Ah, sí!- soltó cuando lo recordó, y se acercó a Patrick -¡Muchacho, tengo un interesante proyecto que plantearte!- le daba fuertes palmadas en la espalda -¡Más presentaciones en la ciudad, chico! Muchos quedaron inconformes, pero no por tu actuación, no, ¡no fue eso! Sino porque no todos tuvieron la gran oportunidad de verte, ¿sabes? Y verte por la televisión no es ni la mitad de lo que sería verte en persona, ¡no, no, no! Quizá hasta venga gente de otros estados, ¡eres muy sonado!

Patrick compartió una corta mirada con Elvira. Se quedarían más tiempo, podría estar más tiempo con Silvia, y su acompañante podría tontear un tiempo más con el hermanastro de ésta.

-Si es así, necesitamos hablar sobre los detalles de las presentaciones, señor.

-¿Será la misma cantidad de personas, y el mismo pago?- intervino Elvira, quien era la encargada de organizar todas las presentaciones del chico.

-Eso lo podemos discutir en el teatro, ¿no lo creen?- ofreció el señor O'Scrums -Allá debe estar mi hijo, y en un dos por tres llamamos al abogado y hacemos el contrato de una vez, ¡en la eficacia y la rapidez está el éxito de los negocios, aprendan eso!

Media hora más tarde, el señor ya se había ido de la habitación tras varias despedidas. Habían acordado encontrarse en hora y media en el teatro, y mientras tanto, se suponía que prepararían propuestas para el espectáculo que ofrecerían.

Mientras tanto, Luke dejaba a Alex en el frente de su casa. Ésta le dio un largo beso en la mejilla, y al acabar, le sonrió y bajó del auto.

-¿Nos volveremos a ver hoy?- le preguntó él a ella desde la ventanilla.

-Quizá.

-¿Lo tomo como un sí?- Alex buscaba las llaves de la puerta en su bolso.

-Tómalo como lo que es- le respondió sonriendo-: un quizá.

El chico esperó a que ella entrase al lugar para luego retomar su camino a casa.

-¡ALEJANDRA!- vociferó su madre desde uno de los muebles de la sala de estar al verla pasar.

-¡MAMÁ!- le imitó, y corrió hacia ella para saltarle encima.

Una de las señoras de servicio de la casa al escuchar tanto alboroto, fue hacia la estancia, y aliviada por que no fuese nada grave, se rió con una mano sobre los labios.

-¿Estabas con Silvia?- preguntó la mamá. La muchacha afirmó.

-Llegó Dylan.

-¡Ese chico!- la señora de emocionó, le tenía mucho cariño a la persona en cuestión. -¿Sigue igual de guapetón?

-¡Mamá!- le dio una suave palmada en el brazo -No lo sé, siempre lo he visto igual.

-No me digas que no te gustaba en tu época del internado antes de ser amiga de Silvia- recriminó, entrecerrando los ojos. Alex miró al otro extremo de la sala, donde las muchachas de servicio las miraban enternecidas.

-¿Quién ha sido el muchacho que la ha traído, señorita?- preguntó bajito una de ellas.

-¡Ajá!- la miró su mamá -Así que sí hay alguien. ¡Y hasta te sonrojas! Eso significa que también hay algo.

-¡Delante de mamá no!- las miró mal, y se levantó directo a la cocina -Espero hayan cocinado algo rico para compensar eso, eh- les dijo señalándolas, mientras las tres muchachas que se encontraban ahí se reían.

Y entonces, Luke se golpeó la frente con el volante del auto mientras un semáforo estaba en rojo. Se sentía idiota por haberle insistido a Alex, y que ella le respondiese con el mismo «quizá». No quería molestarla. No quería que se cansase de él, y lo enviase a volar, ya le había pasado muchas veces, y no quería que esta vez se sumase a su lista.

-Yo en su lugar, me hubiese dicho que no y ya.- susurró para si mismo. -¡Muy bien, Luke! Ya hasta hablas solo.- se dijo en tono sarcástico.

De pronto, su teléfono sonó avisándole que un mensaje le llegaba. Lo tomó de los compartimentos para vasos, y creyó que podría ser ella, pero no, porque era su madre.

~Mamá~ 15:46pm.
Espero te estés dignando a llegar.

Revoleó el teléfono al asiento del copiloto, ya estaba a solo dos cuadras de su casa. Volvió a sonar, y supuso que sería su papá, o que su mamá le escribía nuevamente, así que no lo tomó, pero la curiosidad le ganó, y esperando a que el portón de entrada a la residencia en la que vivía se abría, se estiró y tomó el aparato.

~Alex~ 15:53pm.
Espero no tengas nada que hacer a las 16, porque si es así, me estarías dejando plantada en el café de la vez anterior.

Y una sonrisa estúpida se plantó en su rostro al terminar de leer el mensaje.

-No seas tan idiota, ¿quieres?- se dijo a si mismo nuevamente, borrando la sonrisa que traía, pero que volvió a aparecer a los pocos instantes.

~~~

¡HOLI!

¡FELICES PASCUAS, TESORITOS! Espero encuentren muchos huevitos pintados, o que pinten muchos, o que coman muchos huevos de chocolate dejados por el conejo de pascuas, o por sus papis((((: yo hace siglos no hago eso :'l

Espero les guste el preciosisisisimo capítulo que no me llevó nada de esfuerzo, solo más de dos semanas y tres borradores, espero sean listos y noten el tan adorado sarcasmo:) y con todo y eso, quedó rarito, ji. Quería decirles además, que escribiré algunos capítulos con narradores omniscientes, ya sea por falta de creatividad(como ahora, jé) y así el capítulo no queda taaaaan feo, o porque sea necesario para continuar escribiendo(:

-Lailapunzel.

El Ilusionista. [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora