4. Celos

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Se ha enfrentado a cientos de agentes de HYDRA, luchó en la segunda guerra mundial, contra unos seres de otro mundo y muchas otras cosas, pero por primera vez en su vida Steve siente que no puede hacer nada. Porque no puede tomar una decisión respecto a Bucky y Tony.

Por un lado, tiene al mejor amigo que jamás ha tenido. Tal vez Thor o Clint se enojen con él por pensar así, pero Bucky es especial, un amigo muy leal, el mejor perro que un humano podría tener. Pero, por el otro lado, Tony se ganó su corazón desde mucho antes que Bucky llegara a su vida. Cuando conoció al playboy solo podía ver cosas negativas en él, pero con el tiempo se fue enamorando de la persona que era, y saber que a él también le gustaba (cosa que delataban sus propuestas de salida y piropos) lo hacía más feliz que nunca.

O sea que, sea como sea, está metido en una gran dilema. ¿Bucky o Tony? Lo peor es que, al preguntarse eso, su mente de inmediato responde que debe elegir a Bucky. Porque un amigo es mucho mejor que la persona que amas, ¿no?

Por su parte, Bucky ha hecho lo posible para que Steve lo elija a él. No solo porque lo quiere y no soportaría separarse de él, sino porque no quiere volver a la perrera. No le gustaba estar encerrado y, además, la torre era su hogar. El único hogar que alguna vez uvo, pues antes de la perrera vivía en una mansión, pero con personas que lo maltrataban mucho (sobretodo cuando dejó de ser un cachorro) y que al final terminaron dejándolo en la calle, donde fue presa fácil para el perrero.

Así que, en realidad, Bucky sigue actuando tan cariñoso con Steve como siempre. Lo despierta con besos húmedos, lo acompaña a correr, juega con él y hasta mantiene platicas largas con el rubio, sacándole provecho al don otorgado por el hechizo del dios de las mentiras. Incluso se puede decir que Bucky se volvió un perro más perfecto ahora que puede ser comprendido por su amo.

Pero, por su parte, Tony no tiene mucho a su favor. Debido a su creencia de que lo que los dioses llaman "magia" es solo ciencia que aun no entiende, ha estado en su laboratorio con Bruce mientras buscan una manera de volver a transformarlo en humano. Al principio fue difícil, pues el doctor Banner no lograba entenderlo, pero cuando Steve le comunicó la petición de ayuda de Tony, no puso objeción.

Por desgracia, esto ha hecho que Tony no pase tanto tiempo con Steve, por lo que prácticamente le ha dado vía libre a Bucky para convencerlo de que el es mucha mejor opción para conservarlo.

—Tony, tal vez deberías pasar más tiempo con Steve —le dice Banner mientras examina una muestra del pelaje de Tony. El mencionado ladra, y Banner lo interpreta como un "¿por qué?"—. Si realmente quieres que te escoja para que vuelvas a ser humano, vas a tener que pasar más tiempo con él y demostrarle que aún lo amas.

Tony se queda callado, pero se da cuenta de que Bruce tiene razón. Sabe que Steve jamás lo rechazaría, pero también está consiente de que el rubio no estaría dispuesto a separarse de su perro.

Después de darle un libro de genética a Bruce (el cual lo entrega con la boca como un perro entregaría un periódico), Tony corre a buscar a Steve. Debido a que ya lleva casi cinco días como perro, ya puede caminar a cuatro patas.

Termina encontrando al rubio en su habitación. Bucky, claro, está con él. Ambos están sentados en la cama, pero el perro tiene apoyada la cabeza en las rodillas de Steve.

—Porfa —le dice al Capitán.

—No —le responde éste.

—Porfis.

—No, Bucky.

—Solo una probadita.

—¡Qué no!

—Una lamida y ya.

Malinterpretando la charla, Tony grita:

—¿Qué sucede aquí?

Amor canino (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora