°Cap. 38°

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— Buen día —saludo cortésmente la mujer de cabellos oscuros—

— Buenos días, ¿tú debes ser Esperanza? —preguntó la asiática seriamente—

— Así es

— Bien, mi hijo sigue dormido, te encargó que lo cuides muy bien

— Claro señora

— Kagami... —dijo el pequeño mientras restregaba sus ojos con el dorso de sus manos—

— Cariño creí que dormirías más

— ¿Vas a salir?

— Sí, tengo una cita importante, regresaré pronto, pero no te angusties, te quedarás en compañía de tu niñera Esperanza, debes portarte bien con ella, ¿está bien?

— Sí Kagami

— perfecto, nos vemos luego — dijo y luego se marchó—

— ¿Cómo te llamas pequeño?

— Hugo Agreste

— Yo soy esperanza y espero que seamos amigos. ¿quieres desayunar?

— Sí. Pero primero quiero llamar a mi papi a su celular

— Claro, pero ¿sabes el número?

— Mmm... No. Pero tal vez Kagami lo tiene

— Voy a llamarle, pero primero tienes que desayunar

— Ok

• Mientras tanto •

— Disculpa la tardanza, mi auto se averió

— No te preocupes, después de todo tú eres la jefa. ¿Por qué tan feliz?

— Porque todo empieza y empieza mejor que nunca —dijo con una sonrisa—

— Así, cuéntamelo todo

— Por supuesto, fui por Hugo cuando regresó de su viaje, para mí buena suerte el regreso se adelantó y llegaron ayer, tengo a Hugo conmigo y Adrien está sufriendo

— ¿Y que prosigue?

— Vamos hacer sufrir a Adrien un poco más, cuando esté volviéndose loco por la desesperación te aseguro que hará cualquier cosa que le pida, y es allí donde ponemos en marcha la siguiente parte del plan

— ¿Y mientras tanto que haga yo?

— Tu vas acercarte a la estúpida de Marinette, quiero que te le aparezcas hasta en la sopa si es necesario, quiero que Adrien se decepcione de ella y cuando eso pase, yo estaré allí para él

— Muy bien. Pero ¿qué pasa si el plan falla?

— Este plan no puede fallar, pero si pasa, siempre tengo un as bajo la manga

— Excelente. Por cierto ¿y Nathaniel?

— A ese idiota, ni me lo menciones, decidió irse y no seguir ayudándonos

— Pero es peligroso, él sabe muchas cosas

— Tranquilo, no creo que hable, no lo creo tan imbécil, él es cómplice y si nosotros caemos, él cae también

• Con el Adrinette •

—Tocan la puerta y Marinette abre— Hola Nino, Plagga, buen día

— Hola buen día Marinette ¿ya se sabe algo? —preguntó el pelinegro—

— Nada aún. Pasen

— ¿Donde está Adrien? —preguntó el de anteojos—

— Se quedó dormido en el sofá

♡ℙ𝔸𝔻ℝ𝔼 𝕊𝕆𝕃𝕋𝔼ℝ𝕆♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora