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Ksaki levanta la vista hacia los ojos azules de Takemichi, mientras parpadea con confusión. El rubio gira un poco la cabeza y su cabello negro se derrama sobre su frente, solo serán 7 minutos, que podría pasar.

"Vamos", Kisaki pronuncia cansado, mientras se levanta de su lugar, su traje a medida hace resaltar cada uno de sus atributos, sin embargo, eso no es lo que hace que Takemicchi se tropiece con sus pies, sino es el suave olor a canela que emana y empieza a desprender, invadiendo sus fosas nasales.

Takemichi es el primero en abrir la puerta, dejándola abierta para Kisaki.

"Gracias", Pronuncia Kisaki, su voz es suave.

Takemichi se ríe, un sonido bajo que aún toca casi a la histeria.

Cuando ambos entran a la habitación, aún se podía escuchar la música amortiguada por las paredes, el corazón de Kisaki martilla cada vez más rápido con la cercanía de sus cuerpos.

El olor se vuelve más espeso. Y Kisaki es consiente de ello, quiere arruinar la relación de Takemichi con la mujer la cuál estaba enamorada, sin reparos estira la mano y acaricia su mejilla, su toque es suave, ligero y reconfortante.

Kisaki suspira y su dulce aroma lo envuelve como un capullo.

"¿Que quieres hacer Takemicchi?", La voz de Kisaki era firme, con un ligero rubor en sus mejillas, haciendo que el tono azul de sus ojos resaltara.

Las palabras flotan como nubes sobre su cabeza y se hunden profundamente en Takemichi.

Probablemente se arrepentirá lo que pasará después. Sus pantalones se apretaban en el área de la entrepierna, era plenamente conciente que ambos tenían una atracción por Hina, era como un muro que los mantenían alejados, a menos que las acciones del pelinegro cambiará el curso de los hechos.

Takemicchi se inclina y besa a Kisaki por primera vez, sus labios suaves y firmes, el olor a canela es más fuerte, llenando sus pulmones, hace que él deseo sea más abrumador e imposible de contener.

La realidad lo alcanza, Takemicchi no debería de hacer esto, no le debería hacer esto a Hinata, Kisaki era uno de sus amigos y el simplemente no podía...

Suavemente aparta a Kisaki de su espacio.

"Lo siento, no deberíamos hacer esto", Takemicchi se disculpa, mientras sus ojos azules miraban los labios hinchados de Kisaki, la culpa hacia nudos en el estómago, pero aún así él deseo seguía presente, aún lo estaba considerando.

"No te disculpes". Dijo Kisaki con simpatía-Tienes razón, no deberíamos.

Al parecer Takemicchi tenía autocontrol. No cederá tan rápido.

"Tienes que saber algo". Dijo Kisaki, sus ojos tenían un brillo depredador en ellos que solo avivó él deseo de Takemichi. "yo no amo a Hina-yo te amo a ti".

Takemicchi abrió los ojos con sorpresa por la declaración inesperada. Kisaki y el tenían una rivalidad por Hina, pero de algún modo esto los acercó más y más.

No pudo responder cuando de repente, los labios ajenos llegaron a los suyos. Aferrándose con uñas y dientes a esa sensación que le proporcionaba, dejándose llevar por las sensaciones que le provocaba besar a Kisaki, notando una ligera parte de dolor e irá en el. Sus manos quietas en sus costados, se alzaron para rodearlos sobre las caderas de este.

Ya no había vuelta atrás, el beso se torno más hambriento y rudo. A pesar de todo, todavía amaba a Hinata, si ellos vuelven a romper, Kisaki tendría otra oportunidad.

Takemicchi mordió el labio inferior de Kisaki, lo recostó sobre la pared, y hundió la lengua en su boca, sacando un gemido, sus manos acariciaban por todos lados, probando hasta donde le permitía tocar.

Se separaron con un sonido húmedo, esto hizo que Takemicchi se sintiera más ansioso, Kisaki era un completo desastre, sus labios estaban rojos e hinchados, sus lentes estaban torcidos, y ambos tenían la respiración irregular, Takemicchi pudo sentir la polla de Kisaki dura contra su estómago.

Kisaki sonrió, la situación se estaba dando en bandeja de oro. Acarició su mejilla y nuevamente lo beso gentilmente, enterrando una mano en su cabello azabache, gimiendo mientras bajaba su mano para acunar su pene

"¡Oh!-espera" dijo Takemichi con un grito ahogado, ya que los dedos ágiles de Kisaki habían logrado desabotonar sus pantalones, hundiendo su mano dentro, tocando su pene erecto.

El contacto hizo que los pelos de sus brazos de erizarán, y su exitación se intensificó. Comenzó a menear sus caderas al ritmo de la mano invasora, consumiendo de placer su mente.

En este punto, los Takemicchi había cerrado sus ojos, dejándose llevar a un abismo de placer, sin embargo, los movimientos fueron moderados, el agarre en su virilidad, y eso no sería suficiente.

"Kisaki", dijo Takemichi vacilante.

Kisaki lo miro con intensidad, mientras se alejaba de Takemichi, y comenzó a desnudarse, Hanagaki gimió de anticipación, viendo las piernas de Kisaki en el proceso.
Luego dió media vuelta, poniendo sus manos sobre la pared, con las piernas ligeramente abiertas.

Con manos temblorosas, pero con pasos firmes se acercó por su espalda, sus manos recorrieron los contornos de su cintura. Kisaki no se movió, simplemente se relajó.

Takemicchi baja sus pantalones, llevándose su ropa interior, se inclina sobre Kisaki, su nariz se hunde en su cuello, e inhala su dulce aroma, luego lame la piel, entonces Kisaki tiembla y gime, es cuando Takemicchi con un movimiento firme, penetra a Kisaki y muerde, el sabor metálico inunda su lengua.

Este tipo de conexión se siente abrumador, se siente bien. Su pene es acogido por las paredes internas de Kisaki.

Takemicchi comienza a empujar sus caderas, con movimientos cortos pero precisos que hacen que el hombre debajo de el gima en voz alta, asegurado de golpear su próstata con su polla, Kisaki se estremece de placer.

"T-Takemicchi-lo haces tan bien"

Takemicchi choca con fuerza con Kisaki, mientras con su mano masturba su pene. Su orgasmo estaba cerca.

Solo se necesitaron dos empujes más  para que ambos consiguieran su climax.

Cuando la respiración irregular de Kisaki se igualó. Tocaron la puerta con insistencia.

"Tiempo fuera". Rio fuerte Baji.

El pelinegro no espero ni un minuto para abrir la puerta, encontrando un Takemicchi, muy desnudo y empalando a Kisaki.

Eso es todo, su relación con Hina se acabo.

Baji tenía una expresión divertida, sabía lo que pasaría después, el idiota de Baji no dirá nada pero utilizará esto para chantajearlo.

Con prisa Takemicchi se sube los pantalones y los abrocha, ayudando a Kisaki a hacer los mismo, para esto Baji seguía en la misma posición, pero si mirada estaba en cualquier lado, menos en ellos.

Cualquiera de los de afuera, pensarían que baji solo estaba discutiendo y burlándose, pero no nunca que la posibilidad de que ambos tuvieran sexo en un armario.

Ya fuera de peligro, Takemicchi y Kisaki salen del armario. La mirada de Takemichi se dirigió a una Hina, platicando animadamente con la hermana de Hakkai.

"Ya es todo por hoy". Dijo Takemicchi, bostezando y tallando sus ojos.

"SI". Dijo chifuyu, levantándose de su lugar, estirando sus músculos.

"Yo pido el sillón". Dijo Baji, tomando la muñeca de chifuyu.

Los otros miembros discutían en dónde dormirán, Takemicchi aprovecha y va directo hacia su habitación, sentándose en la esquina de su cama, su espalda haciendo contacto con las suaves sábanas. Pero la culpa lo invadió, Hinata merecía a alguien más. Sus ojos se cerraron, su conciencia se esfumaba hasta quedarse dormido.
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Bien. El juego se terminó pero habrá especiales y extenderemos la historia.

7 minutos en el paraíso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora