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Un par de minutos, o quizás, un par de horas después —un Jimin ebrio, no tiene buen sentido del tiempo— están aún acostados en la cama, enredados, acariciándose y besándose de vez en cuando.

Pero siguen con toda la ropa puesta.

Y aunque Jimin no tiene mucha experiencia con el sexo entre dos hombres, es inteligente a pesar de sus sentidos nublados por el alcohol, así que se imagina que al igual que el sexo hetero, deberían sacarse la ropa para llevarlo a cabo.

Al menos la ropa interior, específicamente.

Sin embargo Hoseok y él siguen acostados, disfrutando del contacto físico, pero completamente vestidos.

Y Jimin no entiende nada.

(Tal vez, esto es una nueva forma de tener sexo, sexo con ropa. Hace mucho que no tiene nada con nadie así que todo pudo haber evolucionado en este mundo sexual. Nunca se sabe)

"¿Cuándo empezaremos a hacer el amor, hyung?" pregunta de repente porque si de por sí sobrio no tiene mucho control de impulso, con alcohol en su sangre es mucho, mucho peor. Y simplemente no puede detenerse.

Sabe que, de nuevo, suena como un niño caprichoso, pero así se siente ahora.

Y su capricho es Hoseok. Quiere a Hoseok, quiere hacer cosas malas con él, lo desea mucho, mucho y el mismo rubio se niega a darle lo que quiere y no debería ser así. Debería complacerlo y dejarse querer.

Hoseok lo mira a los ojos, le sonríe un poco tímido y le susurra "Eso estamos haciendo, amor"

Porque Hoseok lo está amando justo en este momento.

Lo ama desde hace tiempo —no sabe cuánto realmente— lo ama cada día y sabe que lo amará en el futuro también.

Lo amó cuando tuvo que cargarlo hasta aquí, luego de maldecir a Yoongi y Namjoon y a toda su futura descendencia —futuros sobrinos y ahijados suyo, también—especialmente porque ellos no pudieron ayudarlo ya que Yoongi tenía a su propio borrachín que cuidar.

Y lo amó cuando lo escuchó diciendo en medio de su confusión, su embriaguez y su estado de sueño que estaba muy enojado con él, que no sabía respetar una relación, que debió quedarse con su novio y no elegir a Jungkook.

Y lo amó cuando le vomitó encima y lo besó después.

"No lo entiendo, hyung" murmura Jimin confundido, con el ceño fruncido adorablemente.

Hoseok se coloca encima de él y pone sus manos en ambos lados del rostro de Jimin, acariciando sus mejillas con suavidad y cuidado.

"Te estoy amando" susurra, besándole la frente y arrastrando los labios para más besos en su rostro.

"Justo ahora" continúa susurrando con sus labios rozando las rellenadas mejillas.

"Te estoy amando mucho" termina con un beso suave en la mandíbula y deja un pequeño mordisco allí y se separa un poco para mirarlo a los ojos.

"¿No me estás amando tú, Jiminie?" pregunta después.

"Pero..." empieza Jimin, dispuesto a cuestionar porque sí lo está amando, claro que lo está amando porque estar enamorado de Hoseok es casi como un estado permanente en él, así que lo ama, sí.

Pero no se refiere a eso ahora.

Sin embargo, Hoseok no lo deja continuar.

"Te amo a cada instante, Jimin, en cada momento, con cada palabra, cada beso y cada gesto. Cada mañana, cada tarde, cada noche. Te amo cuando te lo digo y cuando no también. Te amo desde hace tiempo, no sé exactamente cuándo, pero sé que cuando creo que no podría amarte más, tú haces algo tan simple como sonreír y arrugar tus ojos en las esquinas, o mirarme con esos ojos que son de mi color favorito como si yo fuera tu todo, o contarme uno de tus estúpidos chistes o abrazarme y rodearme en tu calor y hacerme sentir invencible y yo ya te estoy amando más"

Boy AlmightyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora