44

392 75 10
                                    

Dos meses más de amor y felicidad, dulce y miel, besos y risas habían pasado para Hoseok y Jimin. Y cada día se enamoraban más que el día anterior.

Hoseok había conseguido más ropas del clóset de Jimin porque su ropa y su olor en ellas le encantaban, mas aun el aroma que juntos creaban y a su novio le gustaba lo bonito que se veía el mayor enfundado con sus prendas de vestir.

Y a su vez Jimin a su vez, había obtenido más suéteres suaves y sudaderas fresas del guardarropa de su novio.

Y el pelilila también tenía otras que el Jimin le había comprado para hacer juego con las suyas —y caminaban de la mano por el campus, con ropa de pareja— que usaba con mil gustos porque quería que todos supieran que estaban juntos y se amaban mucho.

Sus compañeros, los amigos de Hoseok y todos quienes los veían ya sabían que eran novios y, de hecho, casi habían olvidado que el que solía llevar de la mano al chico todopoderoso era Jungkook.

Pero Jimin y Hoseok se ven tan bien juntos que nadie podía desearles algo malo. Solo se les daban sonrisas y tiernas mirada scuando los veían pasar.

Jimin había conseguido todo un altar de peluches, perros gatos, osos, pingüinos de peluche y las tenía acomodadas todas en una esquina cerca de su cama.

A veces notaba a Jungkook mirando con melancolía los peluches y no se imaginaba lo que estaba pensando, pero él no quería escarbar mucho en ello tampoco así que no preguntaba.

Jimin también había aumentado sus tatuajes. Ahora llevaba un pequeño "Hope" en la nuca, la fecha en la que se hicieron novios cerca del tobillo y también había inmortalizado un "Idiota" —en su idioma, significaba te amo— que Hoseok había escrito jugando en su brazo una tarde que estudiaban abrazados en su cama.

Y ahora sí que Jimin le pertenecía casi por completo a Hoseok desde la cabeza a los pies.

Y Hoseok seguía grabando videos con canciones para su novio.

Jimin ya pensaba mandarle un video suyo a algún productor musical, para probar suerte —quizás podría convertirse en novio de un famoso cantante pop— pero daba marcha atrás cuando se daba cuenta que Hoseok nunca estaba completamente vestido y no quería que nadie más lo viera de esa manera así que los dejaba solo para él.

Esos videos eran solo suyos tal y como Hoseok era solo suyo.

Habían pasado las suficientes semanas, como para que Hoseok haya pasado del lila al negro y al rojo para terminar en rubio de nuevo, bastante rubio de hecho.

Era como el auténtico sol, ahora mucho más literal y a Jimin le encantaba.

Una tarde Jimin se le acerca con una sonrisa. "Hoy hay una fiesta, hyung" murmura antes de besarlo con las manos enmarcando su rostro.

"¿Desde cuándo eres tú el que sabe de esas cosas antes que yo?" pregunta Hoseok, luego de terminar el beso con sus manos en las caderas de su novio.

"Desde ahora" responde Jimin encogiéndose de hombros. En verdad, Namjoon se lo dijo y le dijo también que a Hoseok le encantaría ir porque no ha asistido a muchas últimamente.

Jimin no es fanático de las fiestas. No, definitivamente, pero si su novio estará contento, aguantará todo por ello.

"Está bien... ¿pasas por mi?" pregunta Hoseok. No escarba en el tema de que a Jimin no le agradan tanto las fiestas. Si él le está sugiriendo ir, debe ser por algo.

Además, quiere presumir a su fabuloso novio por una fiesta. Sí, eso sería bueno.

"¿Por qué no nos vemos allí?" pregunta Jimin lago misterioso, pero Hoseok tampoco pregunta sobre eso.

"Ok, y ¿tienes alguna recomendación de cómo debería vestirme?" bromea Hoseok.

"Pues a mí me encantarías desnudo, pero no sé si pueda soportar que otros te vean de esa forma, así que con lo que te pongas estará bien" murmura Jimin. "Pero no muy sexy ¿sí?" añade después, besándole la nariz.

Hoseok rueda los ojos, suspira y hace un gesto dramático con la mano, diciendo "Sera difícil no ser sexy para mí"

"Lo sé, pero inténtalo" murmura Jimin con una sonrisa.

"Lo que sea por ti, bebé" responde Hoseok antes de borrar esa sonrisa con un beso nuevamente.

Una vez que Hoseok entra al lugar de la fiesta, maldice a su novio como nunca lo ha hecho, ni pensó que lo haría y se pregunta por qué le hizo venir aquí, así.

¿Por qué le hizo esto?

Justamente Jimin lo ve y se acerca a él —en realidad todos lo ven, porque es al único al que realmente pueden reconocer— "Hey, ahí estás, ¡luz del sol!" saluda tan emocionado que el rubio no puede enojarse con él como se lo merece.

"¡No me dijiste que era una fiesta de disfraces!" chilla Hoseok primero. "No estoy disfrazado, Jimin" dice, resoplando después haciendo un gesto a su ropa, que justamente hoy es demasiado normal, jeans negros y remera blanca —porque intentaba no ser sexy— cuando todos a su alrededor están irreconocibles.

Hay fantasmas, jugadores de fútbol, brujas, vampiros, porristas, nota a príncipes y princesas, hasta ve un disfraz de botella de cerveza por ahí. Y muchos están vestidos de acuerdo a su pareja. (Él solía venir disfrazado a juego con Jungkook, en años anteriores)

Incluso su novio —el traicionero— está adecuadamente vestido de pirata. Y más allá ve a Yoongi y a Namjoon como dos de los tres mosqueteros.

"Claro que lo estás" dice Jimin, sacándolo de su trance mirando los disfraces, tomándolo de los hombros y poniéndolos frente a frente. "Estamos a juego" murmura, un poco tímido.

Hoseok lo mira entonces y se mira a sí mismo y no le encuentra sentido. Así que se cruza de brazos y sacando un poco la cadera, con una ceja alzada (algo heredado del mismo Jimin), pide "Explícamelo"

"Yo soy el pirata y tú...eres mi tesoro" es todo lo que Jimin dice antes de tener que cargar con el cuerpo de Hoseok rodeándolo con brazos y piernas y besándolo una y otra vez.

Están así un tiempo indeterminado, no hacen caso de todos los silbidos y gritos y burlas, hasta que se les acaba el aire y tienen que separarse porque no quieren ningún ataque de asma hoy.

Hoseok pone los pies de vuelta al suelo pero no se aleja de su novio, sigue cerca de él para susurrar muy cerca de sus labios "No puedes decir cosas como esas... ¿cómo me voy a enojar contigo así?"

"La idea es que no lo hagas, hyung, que nunca te enojes conmigo" susurra de vuelta Jimin con sus manos en la cintura del mayor acercándolo más a él.

Siempre es posible estar más cerca, ha aprendido, a pesar de que a veces, él mismo no sabe dónde está su límite y dónde empieza el de su novio.

"Te amo" murmura Hoseok suavemente, solo porque puede y porque quiere, porque es verdad y porque Jimin merece que se lo digan todo el tiempo.

"Y yo te amo a ti" responde Jimin, rodeándolo con sus brazos ahora y dejando que su novio se esconda en su cuello para dejar un tibio beso allí.

Y Jimin presiona sus labios sobre su pelo rubio como el oro.

Así es su tesoro.

Boy AlmightyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora