Boy Almighty

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Están frente a la puerta de Jimin ahora porque él simplemente no quiso discutir con su novio, debido a que éste quiso traerlo hasta aquí y no dejó que fuera Jimin quien lo dejara frente a su cuarto. 

(Lo hizo en realidad, pero perdió. Hoseok es muy bueno convenciendo, es decir, es muy bueno besando)

"Así que...aquí estamos, novio, te dejo firme y entero en la puerta de tu humilde aposento" dice Hoseok, inclinándose frente a él. Es un verdadero príncipe y Jimin solo puede suspirar.

"Aun no creo que sea justo que seas tu él que me trajo hasta aquí, hyung" discute Jimin una vez más, inconscientemente -mentira, muy conscientemente- buscando más besos que lo callen y ganen la discusión.

"Y yo ya te dije que si tengo tu chaqueta y estoy calentito en ella, lo menos que puedo hacer por ti es traerte hasta aquí y que tu estés cálido también, así yo no paso frío yendo a mi habitación y tu tampoco volviendo de allí sin un abrigo adecuado" Hoseok explica.

"Pero yo podría ponerme mi chaqueta allí" dice Jimin, por millonésima vez en la noche. "Pero yo la quiero conmigo" susurra Hoseok. Y Jimin se da cuenta que no todo es por los besos, es que si Hoseok te mira como lo está haciendo justo ahora, harías lo que fuera por él.

"Pero entonces, podría saberme dado un abrigo tuyo, como ese suéter que tanto amo" dice Jimin.

"Te lo daré mañana, en nuestra segunda cita" Hoseok dice rápidamente.

"¿Mañana será nuestra segunda cita, hyung?" pregunta Jimin sorprendido. "Mañana yo te dejaré en tu cuarto entonces, esto me hace quedar como la chica de la relación" añade después y sabe que dijo algo más cuando ve la mueca en el rostro de Hoseok, y que su sonrisa desaparece, como muy rara vez sucede. Antes de que pueda pregunta que hizo o dijo mal, nota que el rostro del mayor se suaviza de nuevo, luego de que parece que pensó y reflexionó sobre algo y lo escucha decir "Mira, Jiminie, sé que tu eres nuevo en esto, de las relaciones homosexuales digo y estás hablando de estereotipos, me imagino que es lo que has escuchado, no lo que crees realmente" Jimin lo mira confundido, porque no sabe de que está hablando, pero no lo interrumpe.

"No hay una chica en esta relación, es lo que quiero decir, si quisiéramos una, saldríamos con una, ¿no crees?" pregunta y Jimin sabe que no lo está juzgando, le está dando una adecuada explicación y él lo entiende ahora.

"Lo siento, hyung, yo..." empieza, pero no sabe como continuar. Hoseok hace un gesto para que pare con una mano, mientras vuelve a hablar "Nos gustan los chicos, bueno, se que has salido con mujeres, yo siempre lo he hecho con hombres, pero yo soy un chico y en esta relación ambos lo somos, nadie es una chica aquí, nadie puede sentirse como una chica aquí" termina de explicar suavemente.

"Lo entiendo, de verdad lamento lo que dije, es que yo..."

"Está bien" lo corta Hoseok, sonriendo cálidamente de nuevo "Lo sabes ahora, y se que no volverás a decir algo como eso" continúa y Jimin mueve frenéticamente su cabeza en modo de afirmación. "Así que...mañana es nuestra cita" cambia de tema Hoseok y es totalmente el alegre y confortable chico de siempre. Y Jimin se tranquiliza.

"No me has invitado adecuadamente" bromea, incluso. Pero todo el mundo sabe que irá, de todas formas.

"Ya sabes, si te pregunto puede decir que no, solo asumiré que estarás ahí" Hoseok dice no admitiendo discusión y tiene un punto allí. Aunque Jimin, nunca, definitivamente nunca, le diría que no.

"¿Dónde nos vemos, hyung?" está preguntando ya Jimin.

"En mi habitación" Hoseok responde muy seguro. "Ya caminamos por la feria de la mano, como tu querías, ahora nos encerraremos en mi cuarto, como yo quiero" 

"No sé si estaré seguro allí, tu pareces muy obsesionado con la idea de encerrarnos en tu habitación" bromea Jimin, porque en realidad, cualquiera sea su plan estará de acuerdo con él.

"Lo que sea que tenga planeado te gustará" dice, con esa maldita mirada sexy, de integrante de una caliente boyband, esa que acelera el corazón de Jimin, a latidos incontables.

"Entonces estaré allí, hyung" se las arregla para balbucear.

"Te espero, babe" dice Hoseok, acercándose por un último beso. "Fue una gran cita" murmura después. "Te amo"

"Te amo también" dice Jimin, abrazándolo ahora y no lo quiere dejar ir, ni esta noche, ni otro día, ni nunca. Hoseok se las arregla para escapar de su abrazo, susurrando "Nos vemos en una horas" picotea sus labios una vez más antes de marcharse.

Y Jimin se queda suspirando por su bello príncipe un par de horas más, sin importar el frío, ni lo tarde que es, ni la garúa que en algún momento empezó a caer.

El domingo sucede la segunda cita y no es que Hoseok haya estado planeando abusar de Jimin realmente -para su decepción-. Solo ven unas cuantas películas en la cama de Hoseok con sus manos entrelazadas, pero es lo más romántico que Jimin vivió alguna vez.

Ven The Notebook. "¿Es tu película favorita?" se burla Hoseok "Eres todo un cliché, bebé"

Y ven El Padrino "Tú pareces más el tipo de gustar de películas románticas y tu preferida ¿es esta?" pregunta Jimin. Y Hoseok imita perfectamente unas frases de la película y lo calla.

Ven unas cuantas películas más y comen muchas palomitas y toman mucho refresco y dejan de ver, comer y tomar solo cuando ambos saben que corren peligro de quedarse ciegos si ven una sola película más.

Entonces salen a la terraza, a ver las estrellas y tomar aire fresco, su cita ha durado más de lo que dura el promedio normal de citas. Jimin había llegado a las 8 de la mañana, encontrándose con sorpresa a un Hoseok ya despierto, esperándolo.

No habían quedado en una hora en particular porque de todos modos, Hoseok estaría ahí todo el día, pero Jimin había llegado con las esperanza de verlo como el día anterior y decirle que no le importaba verlo dormir un par de horas más.

Sin embargo, no poder observar el sueño de Hoseok, tuvo su recompensa porque su novio despierto es uno que no tiene vergüenza del aliento mañanero y luego de cepillarse los dientes -Jimin sintió la menta de pasta dental en su aliento-, tuvieron una adecuada sesión de besos, que en realidad tampoco faltó entre las películas y entre las palomitas y en el baño y en la cama y contra la puerta. Se besaron mucho y sus labios estaban bastante rojos e hinchados para estas horas de la noche.

Pero ya no se besaban, ahora estaban abrazados, recostados por el barandal de la terraza. Jimin tenía puesto el famoso suéter gris que tanto le gustaba en su novio, que descubrió también le gustaba mucho en él. Y Hoseok tenía puesta la sudadera que Jimin trajo consigo hoy, la que llevaba el primer día que se conocieron, porque le devolvería la otra chaqueta si le regalaba esta, y obviamente Jimin le regalaría su armario entero, si eso lo hacía feliz.

Y Hoseok estaba feliz envuelto en esa chaqueta, que le quedaba grande, pero que era de su color favorito y pertenecía a su novio y olía a él.

"Es verdad que es muy suave" murmura Hoseok, en el pecho de Jimin. "Me gustaría dormir sobre ella, pero contigo puesta"

"Puedes hacerlo, hyung" Jimin dice sin dudar.

"Sé que puedo" Hoseok sonríe.

Y eso es lo que hacen esa noche. Hoseok se queda dormido sobre Jimin, teniendo puesto su suéter suave y gris. Y Jimin se siente cálido y cómodo, no solo por la ropa caliente, si no por el cuerpo tibio de su chico sobre él.