El Expediente

178 26 5
                                    

Rai Pov's

Ha pasado 1 año desde que Geto desertó de la preparatoria de hechicería, por órdenes de los altos mandos, se prohibió mencionar el nombre de Suguro dentro de la preparatoria. Ahora era considerado una maldición, había perdido todos sus derechos como humano y hechicero.

Satoru y Ieri tuvieron una última charla con Satoru semanas después del incidente que condenó su vida, desde entonces no volvimos a saber nada de Suguro, era como si la tierra lo hubiese tragado.

Muchos olvidaron lo sucedido aquel día y continuaron con sus vidas; sin embargo, varias preguntas nacieron en mi mente:

¿Acaso llevaba una carga difícil que él solo no podía lidiar?

¿Y si tan sólo hubiese alguien que lo haga cambiar de opinión?

Mi padre no estaría nada contento con la decisión que había tomado. Sin ser vista, pasé por los pasillos que llevaban a la oficina del director.

Al llegar a la puerta me asomé por la ventana de esta, al no ver nadie, tiré de la perilla y abrí la puerta para luego cerrarla rápidamente.

Mi padre no estaba en su oficina, lo más seguro que estaría en una reunión con los altos mandos.

Me acerque al escritorio y abrí las gavetas buscando un expediente en especial, al no encontrarlos en el escritorio, empecé a buscar en los archivadores que estaban ennunerados con números, códigos, y nombres.

No tuve noción de cuanto tiempo pase buscando el archivo que necesitaba, pero cuando al fin lo encontré, la perilla de la puerta giro.

- ¡Carajo! -maldije en voz baja, rápidamente me escondí debajo del escritorio, la luz se encendió, de pronto hoy unos pasos asomarse lentamente, estaba en problemas.

- ¿Quién anda ahí? -era la voz de Satoru, pero que hacía ahí. Mi corazón empezó a latir más fuerte, mientras que empecé a sudar en frío.

Ya hace unos meses que no se veía a Satoru, la razón era porque ya había acabado la preparatoria y hacía misiones él solo fuera de la ciudad, incluso del país.

Realmente estaba feliz de que había vuelto, pero ahora mismo no lo quería aquí, no cuando tenía un expediente privado en mis manos.

En ese momento, sentí sus pasos acercarse a la silla del escritorio, podía ver sus zapatillas blancas cerca a la mesa, y justo en el momento que estaba por inclinarse a ver de bajo del escritorio, una voz llamó a la puerta.

- ¡Gojo-san! ¡Aquí estás! ¡Llevo minutos buscándolo por todo la escuela! -Era Ijichi, qué oportuno.

- Qué sucede, Ijichi -dijo poniéndose de nuevo de pie.

- El director Yaga quiere hablar contigo- Satoru suspiró y salió de la oficina.

- Ijichi cierra con seguro la oficina del director, al parecer olvidó cerralar.

- ¡Sí, Gojo-san! -Satoru dejó los pasillos, ahora era Ijichi el que se encontraba en frente de la oficina, su facción cambió a una de preocupación, cerró la puerta lentamente hasta dejarla entreabierta.- Sal de aquí antes de que Satoru regrese, Rai-san.

Salí de mi escondite y abandoné la oficina del director, rápidamente me dirigí a los dormitorios y me encerré en mi habitación con el expediente en mano.

Apague la luz de mi habitación y tomé una linterna de mano y empecé a revisar el expediente cuidadosamente.

Al día siguiente tenía algunas pistas del paradero de Suguro Geto.



Divergencia / Satoru Gojo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora