No podía creer lo que estaba escrito en aquella lápida gris claro, estar en Nueva York, en vez de que su funeral fuera en Inglaterra donde prácticamente vivimos toda la vida.
Estaba en el funeral de Joseph Joestar, el pensar en que él se había ido me dolía demasiado, mi compañero de estudio de prácticamente toda la vida. Desde pequeña habíamos tenido una amistad, el me había enseñado sobre el hamon, y desde que se fue a Estados Unidos solo sabía de él por su abuela, la señora Erina.
Estaba de rodillas llorando su pérdida junto con la señora Erina, ella me había presentado a una mujer que resultó ser la madre de Jojo, pese a su edad se veía muy joven para tener un hijo de esa edad, también tenía unos ojos hermosos como los de su hijo.
- ¿Tu eras muy amiga de Jojo? - me preguntó con curiosidad.
- Sí, así es - afirmé, ya más tranquila.
- Entonces, ¿tu lo conocías muy bien?
- Eso creo, y me arrepiento de no haberle dicho lo que sentía por él. Antes de que fuera a los Estados Unidos, iba a decirle pero me acobarde y no le dije nada, se fue sin saber que lo amaba - volví que romper en llanto, Lisa Lisa me consoló.
- Me dijeron que estaban en un funeral, nadie vino a recibirme al aeropuerto - dice Jojo haciendo una queja.
- Jojo... - tartamudeo, sentí que casi se me paraba el corazón de escuchar su voz.
- Oigan están muy pálidos, parece que hubieran visto un fantasma - dice riendo, aunque estaba extrañado. Se me salieron más lágrimas cuando lo miré, este me mira con curiosidad - ____, ¿qué haces aquí? Yo te hacía en Inglaterra, pero ¿por qué lloras al verme? Espera ¿de quién es el funeral? - mira la lápida - ¿Cómo que me están haciendo un funeral? Estoy vivito y coleando.
Me tranquilizó escuchar sus bromas de siempre, me levanté y me arroje a sus fuertes brazos, el dudó un poco ya que se le hacía extraño.
- Te eché de menos - lloré nuevamente.
- Se supone que ya les había dicho que estaba bien - dice confundido - Suzi, dime que enviaste el telegrama urgentemente - pregunta Jojo alterado.
- Este... - la chica rubia se puso nerviosa, la miré y me sentí mal porque parecía que entre ellos había algo.
- Ay eres una cabeza de chorlito - se queja Joseph frunciendo el ceño.
- Jojo, ¿quién es ella? - pregunta la rubia de unos ojos azules.
- Ah ella es ____, ya te había hablado de ella - comenta con una sonrisa. La chica me miraba de mala manera, sentía que era una especie de rivalidad.
- Creo que ya la puedes soltar, ¿no? - pregunta aquella chica italiana.
Parecía que todos notaron la tensión que había entre Suzi y yo. Me pregunto si escucharon la declaración de mi amor por Jojo, de ser así será incómodo y más si es que hay algo entre ellos.
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