Jimin bajó las escaleras cuando escuchó el claxon del coche de Jungkook afuera, se abrigó bien y abrió la puerta de su casa para salir y fijarse que estuviera bien cerrado, bajó las escaleras del porche y el pelinegro al verlo quitó los seguros para que pudiera abrir la puerta.
Jimin se subió al lado de copiloto como siempre y se colocó el cinturón para darle una sonrisa a Jungkook.
—Buenos días.— saludó el menor encendiendo el coche
—Buenos— Jimin se tapó la nariz y soltó un estornudo—, días.
—Oh... ¿estás enfermo?.— preguntó el pelinegro y el contrario negó sonriendo
—No... solo tengo alergia creo, el polvo me hace estornudar.— se encogió en su asiento y Jungkook se inclinó hacia él un poco
—Tu nariz está roja, y tus mejillas.— dijo mientras le observaba el rostro y Jimin se tapó con su bufanda hasta la nariz
—Estoy bien Jungkook, arranca o llegaremos tarde.
El pelinegro asintió y arrancó... Jimin estornudaba cada dos por tres, y se frotaba las manos para darse calor. Estaba tan encogido en el asiento que parecía una bolita escondida. Jungkook lo volteaba a ver de vez en cuando, estaba muy colorado, y le pareció absurdamente tierno que el mayor estuviera así, ya que estaba todo rojo y combinada con su pelo rosa.
Jeon se desvió antes de llegar al estudio y aparcó enfrente de una farmacia.
—¿Que hacemos en la farmacia?— preguntó Jimin y Jungkook no dijo nada, solo tomó su cartera y bajó del coche—. ¡Jungkook!.
Jimin suspiró cuando fue ignorado y revisó su celular cuando este sonó con un mensaje de que tenía que ir a la casa de Kang ya que se reunirían todos en la noche. Rodó los ojos confirmando su asistencia y en la parte superior de la pantalla apareció la fecha de ese día.
Cinco días habían pasado y aún no había hecho nada, solo perdía el tiempo tomando fotos con Jungkook y bebiendo café en la cafetería del lugar.
Además de que el plazo para las fotos que tenía que entregarle a "su jefe" finalizaba en dos días. No le importaba mucho ser echado, pero sin duda le quitaría miles de oportunidades para secuestrar a Jeon, así que debía mantenerse ahí por más tiempo.
Hasta que pudiera aclararse y armar un buen plan. Necesitaba ayuda de un amigo suyo, y lo hablaría con él por la noche.
Abrió sus ojos y volteó hacia su lado izquierdo cuando la puerta fue abierta y Jungkook sé subió de nuevo al coche totalmente relajado. Le entregó a Jimin una bolsa y el nombrado lo miró con el ceño fruncido.
Adentro había pastillas para la fiebre, y un sobre con un té para dolores de cabeza y congestión nasal.
Jungkook tomó una de las cajas y sacó una pastilla para dársela a Jimin junto con una botella de agua.
—Tómatela.— le dijo mientras volvía a encender el coche
—Jungkook de verdad...
—Solo tómatela, es para prevenir, no conviene enfermarse en estos tiempos.— lo interrumpió y Jimin soltó aire por la nariz tragándose la pastilla
—Nadie me dice que hacer.—susurró para sí mismo mirando hacia la ventana
—¿Que?.
—Que gracias, espero me haga bien.— dijo fingiendo una sonrisa y Jungkook condució hasta el edificio esta vez
Cuando por fin se estacionó Jimin fue el primero en bajarse intentando dejar atrás al pelinegro, entró al edificio y llamó al elevador, en ese lapso de tiempo Jungkook llegó a su lado y ambos se subieron al elevador después de que Jimin marcara el segundo piso.
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krov' - 국민 KOOKMIN
FanfictionCuchillo sobre la mesa, la ruleta gira y la punta filosa recae en la foto del joven Jeon Jungkook; haciendo que Calicó salte de alegría. Para el gato de tres colores, Jeon era la presa más preciosa que había visto nunca, y era un honor poder verlo...