💜🖤En una noche de festejo, un agente escapaba de la mafia, de la cual había descubierto una importante información ante la posible caiga de su reinado, siendo perseguido por los maleantes, Kim Taehyung fue a elegir una importante desicion de poder...
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Jin...
Sollozos lamentos se escuchaban por fuera de la habitación, no había escaleras, solo la parte de abajo que era aquella casa de la que fue una vez de sus padres.
Abri la puerta, teniendo sus manos sobre su frente, confundido estaba de arrepentimiento.
Su legado incrustó mi corazón❤️, sabíendo que era un impulso de nuevo que no lo dejaba amarme completamente.
Cuando me acerque vi su tristeza, esos ojitos de doble párpados que se apagaban de nuevo en la oscuridad, me miró y se quedó callado, me recargue en su rodilla y me incline sobre aquella alfombra vieja llena de polvo por el paso del tiempo.
Calle por un instante y me acomode para saber que más le dolia...
—Regresó la tristeza en ti...recordaste a tu novio o quisas el remordimiento de arrepentimiento de besarme de nuevo—en voz baja me añadio...
—Las dos cosas Seokjin, no puedo amarte no debo, pero se que me gustas mucho y el recuerdo de mi novio, siempre nos separara—mi corazón❤️ se destrozó por completo, al escuchar que apesar de muerto, aun lo amaba, me levante y no quise saber más sus penas...
—Entonces no vuelvas a besarme Taehyung, te lo prohíbo...porque solo juegas con mis sentimientos—alzó la mirada enseguida, confundido de saber si sentía amor💜 por el...
—Te estas enamorando de mi Seokjin —me detuvo apretando mi brazo y quería llorar en ese momento y decirle que me había perdido en el, pero no valia la pena...
—Claro que no, como tu...siento lo mismo, solo atracción, si aun amas a tu novio muerto, no volverás a besarme, ¡eso te lo aseguro!—corrompida estaba mi desicion, azotando la puerta de su habitación, tomé una escoba y un trapo y decidí limpiar mi propia habitación, dormiría solo sin su presencia, pero pensando en ese último beso tan rico que me había dado.
Cuando sentí que la puerta de la casa había sido azotada, vi que salió en su auto y decidí no pensar mas, he irme definitivamente, pero estaba encerrado, la puerta había cerrado con llave y esta vez no me dejaría ir.
Me dio miedo de estar solo en un lugar sin rumbo, tenía miedo de que me abandonará a mi suerte, de Taehyung se esperaba cualquier cosa, solo me recoste en esa cama, cambie las sábanas que había en un cajón, encontrando una foto donde Tae era pequeño, era dulce y tierno, junto con sus padres, se ve que era feliz y que tanta amargura, lo había invadido el dolor.
Con fragilidad limpie aquella foto llena de polvo y la mire por mucho rato, dejándola en mi pecho, quería quedarme con este recuerdo, el tiempo pasó y vi que había vuelto por comida del super, acomodo la despensa en la cocina y preparo algo de spaguetti con fajitas de pescado.
Me moría de hambre, pero no quería darle gusto esta vez...
—Vamos Seokjin, ¡ven a comer!—salí furioso, después de que me había encerrado sin razón...
