Las luces blancas van y vienen, mientras corro desesperadamente para tomar su mano. Todo se vuelve oscuro...
Abro los ojos, en mi cama. Estoy completamente empapada en sudor. Otra vez la misma pesadilla, como desde hace tres meses.
Me levanto de la cama, voy directo a bañarme. Miro la hora en el celular, las siete de la mañana. Como siempre, sin poder dormir. Me visto, agarró las llaves de la casa y salgo a caminar, sin rumbo alguno. Los recuerdos son difíciles de olvidar y el dolor no es fácil de sanar.
Una iglesia se cruza en mi camino, la miro desde afuera mientras me veo rezando desesperada, parecía que Dios hacía oídos sordos a mis súplicas.
Sigo camino, buscando sus huellas hasta llegar al lugar que más detesto en la vida, porque es una realidad de nuestra separación. Aquel lugar tan frío, que le daba un poco de calor a mi alma, tenía un olor tan particular, como si estuviera presente, en ese momento, conmigo.
Miro la tumba y mi cuerpo vuelve atrás en el tiempo, cuando ella estaba en una blanca cama de hospital y yo a su lado, acompañándola, tratando de que riera desde el dolor. Como si supiera que ese día partiría, me dijo un "Te amo" junto a una sonrisa. Pensé que se pondría mejor...
Me pidió que fuera a descansar, había venido otro familiar. Accedí a regañadientes. A penas puse un pie fuera del hospital, me llaman para darme la maldita noticia. Corro hacia adentro, como si pudiera salvarla de alguna forma, pero cuando llego a su habitación todo terminó. Ella se había llenado de un silencio eterno.
Me acerco a su cuerpo. Quiero llorar, gritar y romper todo. Pero no puedo. Simplemente beso su mejilla, sabiendo que ya no lo sentiría. Una lágrima cae de mi ojo, que se entremezcla con una de ella que bajaba. Ese fue su adiós.
"Nunca voy a olvidarte" le prometí, antes de salir de aquella asfixiante habitación.
-Perdón por no traerte flores-Digo como si me pudiera oír.
-Está bien-Siento su voz a mis espaldas.
Sé que es una locura pero una pequeña esperanza, de que todo fuera una pesadilla, se encendió.
Corro lo más rápido que puedo, ignorando a mi cabeza que me grita que es una ilusión, hasta llegar a mi casa, a la que siempre fue nuestro hogar. Su perfume, otra vez, aquí está... La busco pero me encuentro con mi peor pesadilla, su ausencia.
-Te extraño-Suelto un suspiro.
-Yo siempre voy a estar contigo.
En homenaje a todos aquellos que perdimos ❤
Espero que les guste...
