"Luna, tú que lo ves, dile cuanto le amo.
Luna, tú que lo ves, dile cuanto lo extraño"
Victoria se encontraba en el balcón de su casa, con un caballito de tequila en la mano y su celular en la otra, admirando la noche en su máximo esplendor. Sus hijos estaban dormidos, así que estaban Ella y sus pensamientos. Se debería sentir feliz, tenía salud, había compartido muchas risas junto a sus seguidores y sus amigos, pero cuando todo acabó fue que regresó a la amarga realidad. Él estaba demasiado lejos, cuanto desearía que estuviera ahí con Ella. Su amor...
"Esta noche, sé que él está
Contemplándote igual que yo
A través de tí quiero darle un beso"
Siempre que esto le pasaba, recordaba sus palabras...
Flashback
Se encontraban en sus casa, la de ambos. Una noche hermosa de verano que les permitía disfrutar del aire libre. Sentados en el patio, Victoria entremedio de sus piernas, en silencio. Solamente se oía la naturaleza a su alrededor y el sonido de sus corazones latiendo al mismo ritmo. Eran uno de los momentos que más disfrutaban, su conexión iba más allá de lo físico y en esos momentos lo notaban más.
-¿Sabes lo que más me gusta de la luna?-Ella volteó para mirarlo.
-¿Qué?
-Que me une a ti, por más distancia que nos separe. Cuando te extraño, me paso la noche entera contemplandola.
-Te amo-Le dice, antes de tomar sus labios en un corto beso.
Fin del flashback
Y ahora, cada vez que lo extrañaba, Ella hacía lo mismo como esa noche...
Él la había llamado cuando se le cortó el vivo para decirle que se iría en un viaje junto a su hija y a Vivían. Momentos como ese es en los que se preguntaba si la espera valía la pena. Dos años y sería libre, ¿Pero será demasiado tarde? A veces se preguntaba sí podía ser feliz al lado de César.
"Tú que sabes de soledad
Aconséjale por favor
De que vuelva convéncelo, te lo ruego"
Flashback
-César-Atiende con una sonrisa.
-Mi amor, ¿Estabas ocupada?
-Estaba en el live, te conté que lo haría.
-Lo siento, no lo recordé. ¿Quieres que te llame más tarde?-Se disculpa afligido pero Ella mantiene la sonrisa, siempre preferiría oír su voz antes que hacer cualquier otra cosa.
-No, o bueno, si. Tú llamame cuando quieras-Él soltó una carcajada que terminó por contagiarla-Te extraño, César.
-Y yo a ti, mi vida-Suspiró largamente-Llamaba para contarte algo, quiero que lo sepas por mi, antes que por otros medios.
-¿Qué sucede?
-Carla quiere festejar su cumpleaños en Cancún y no pude negarme-El suspiro que Vicroria soltó atravesó el corazón de César.
