La boda | VyH

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   Hoy es el gran día... Hoy es el día en que uno mi vida a la del hombre que me tiene enamorada hasta la médula, ante Dios y toda nuestra familia.
   Ya lo habíamos hecho frente a la ley, días atrás y ahora es tiempo de dar el siguiente paso... Fue otro dìa memorable, porque mi corazón y mi alma ya estaban ligadas a la suya pero, por fin, desde ese dìa para todo el mundo era mi esposo y yo su mujer... Ya no había nada que pudiera separarnos.

-¿Estás lista, mamá?-Fernanda me saca de mi estado de trance. Mis hijas, Antonieta y Pipino me venìan a ayudar a arreglarme.

-Si, mi amor-Me senté para que me maquillaran y mi mente divagó unos días atrás...

Flashbak

   Aquí nos encontramos frente al juez de paz, a punto de ser legalmente casados. Miro a Heriberto quien sonreía a mi lado, se lo notaba feliz y yo me sentía bendecida de que un hombre como Él haya decidido unir su vida a la mía, para siempre, todo lo que la vida nos permita, y después inclusive...
   Pasamos la frivolidad del papeleo, las firmas, los testigos y todo eso... Ahora me encontraba en los brazos de mi marido, con todos nuestros amigos y familiares que celebran nuestra unión.

-No sabes lo que estoy ansiando que llegue la noche y tenerte solo para mi-Susurra cerca de mi oído, solo para que yo lo escuché, haciendo que mi piel se erice. 

-Yo lo estoy deseando con las mismas ganas, además tengo una sorpresa para tí-Guiño mi ojo y su mirada se oscurece reflejando una chispa de deseo y excitación.

-Voy a contar los segundos hasta que se vayan-Protesta y yo sonrío.

-Están acá para festejar con nosotros, querido.

-Lo sé y los quiero-Mira a su alrededor-Pero no te das una idea de lo que te deseo, Victoria. 

-Yo estoy igual, mi amor-Beso sus labios suavemente.

-Te amo, Victoria.

-Y yo a ti-Nos encerramos en nuestra pequeña burbuja al chocar nuestros labios, fundiendonos en un beso que encendía un fuego en mi interior. Es increíble lo que siento cuando estoy con Él.

Fin de flashback

   Y si que fue una buena noche esa...

-Tierra llamando a Victoria-Antonieta chasqueaba los dedos delante mío para traerme a la realidad-¿En qué tanto piensas?-Estábamos solas, los demás se habían retirado.

-Perdón, estaba recordando nuestro casamiento de hace unos dìas-Me miro en el espejo y sonrío. Tenía hecho un recogido en el pelo, adornado con una tiara, y un maquillaje suave, casi natural.

-Es el momento del vestido-Suspiro nerviosa y asiento, lo recojo de la cama y ella me ayuda a ponérmelo.
    Era blanco, con escote corazón, corte sirena, encaje en la espalda y mangas de tul de tres cuartos. El vestido era sencillo, dentro de lo que se podía, y era cómodo, que era lo más importante. Lo diseñé porque quería que fuera perfecto pero había superado mil veces mi expectativa.

-Victoria-Miro a Antonieta, una vez que termino de acomodarme, y su mandíbula estaba por el piso.

-¿Te gusta como luzco? ¿Me queda bien?

-Te queda espectacular mamá-Dice Maria, entrando al cuarto.

-Te ves divina-Comenta Fer-Abajo te está esperando papá, dice que quiere hablar contigo-Me tenso. ¿Por qué Osvaldo está aquí? ¿Qué quiere?

-Dile que ahí bajo.

-También veníamos a buscar a Antonieta y a decirte que ya va a llegar el chófer.

-Gracias, mi vida-Beso la frente de cada una de mis hijas y salimos del cuarto.

Bajamos las escaleras y ahí estaba parado, tan formal como siempre...

-Victoria...-Me mira de arriba a abajo, haciéndome poner incómoda.

-Permiso, nosotras nos retiramos-Informa Antonieta y se retiran, dejándome sola con Él.

-¿A qué viniste Osvaldo?-Le pregunto luego de unos minutos en silencio.

-Quise evitar que te casaras-Me río.

-Eso lo hubieras hecho hace unos días antes, cuando nos casamos por civil.

-Si, de eso también me enteré, creo que llegue demasiado tarde-Vuelvo a reír.

-En serio, ¿A qué viniste? 

-A felicitarte y a decirte que, aunque te ame, deseo que seas muy feliz.

-Gracias Osvaldo, yo también te amé mucho y deseo que te vaya bien en la vida-Sonrío.

-Gracias. Mañana parto para España, a trabajar.

-Que te vaya bien-Escucho como afuera suena el sonido de una bocina-Vinieron por mi.

-Nos vemos, Victoria-Besa mi frente y ambos salimos de la casa.

    Me subo a la camioneta y mientras dura el trayecto hacia la iglesia me pongo a recordar todo lo que viví con Él, lo duro que fue me firmara el divorcio... Siempre lo voy a llevar en mi corazón, más allá de todo lo que vivimos.
    En quince minutos llegamos, abro la puerta y mis hijas me ayudan a bajar.

-Estás hermosa, madre-Dice Max dándome un ramo de flores-¿Lista?

-Estoy nerviosa... Pero lista-Le sonrío.

   Todos los que estaban esperándome entran, mientras yo me quedo junto a mi hijo esperando a la marcha nupcial que nos daría el pie para ingresar.

-Espero que seas muy feliz, madre-Murmura cuando entramos. Miro a Heriberto y sonrío.

-Lo voy a ser-Dios, que guapo luce...

    Le sonrío a Juan Pablo, que es quien llevara a cabo la boda, y él me sonríe en respuesta.
    La ceremonia se lleva a cabo pero mucho atención no le presté, estaba demasiado concentrada en mi esposo.

-Puede besar a la novia-Dice y miro a Heriberto. Ambos sonreímos mientras nos acercamos para unir nuestros labios, para mi todo sucedía en cámara lenta. Siento dentro mio los nervios como si fuera la primera vez, como si nunca hubiera probado sus labios.

-Te amo-Le digo cuando nos separamos.

-Y yo a ti-Aplausos y gritos se oyen detrás nuestro pero yo estoy metida en mi pequeña burbuja en la que existíamos solo Él y yo, donde no existían nuestros problemas solo el amor que nos teníamos.

    Salimos de la iglesia y vamos al lugar en el que festejaríamos antes de salir de viaje, a donde sea que fuere la luna de miel.
    El primer baile como esposos, el brindis... Todo fue hermoso, único, soñado...

-Sabes una cosa, no me equivoqué al enamorarme de tí y le doy gracias al cielo que me hayas elegido a mi como tú compañera-Le digo cuando estábamos bailando juntos, al compás de la misma canción que bailamos el día que estuvimos juntos por primera vez.

-Yo soy el agradecido, Victoria. Te amo.

-Y yo a tí. Este es un amor eterno-Asiente con la cabeza.

-Eterno-Dice antes de besarme.

    Nunca me arrepentiré ni me cansaré de Él, esto va a durar para siempre. No sè si fue un hechizo pero estoy perdidamente enamorada y jamás, por ningún motivo, lo voy a soltar.

En mi perfil ya está la nueva historia, a pesar de todo, que trata sobre Victoria y César 😊

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