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Y ahí podían verlo en una vestimenta masculina formal y con los nervios a tope rogando que el supresor de olor no perdiera su efecto ahora, esperando que llegara el contratador de esa pequeña empresa, realmente no creía que estuviera en un punto en el que tuvieran que dar entrevistas en el departamento del contratador, pero no importaba mucho.

Espero aproximadamente una hora hasta que el tipo se hizo presente, se le hizo muy familiar tanto por su rostro como por su aroma.

—¿Eres Genova? —dijo después de acercarse al mayor.

—Eh... Soy s-su hermano... Su hermano gemelo, ella hoy tiene que trabajar así que... Bueno... Espero no le moleste... —mientras más mentía más su voz se hacía menos audible, no era bueno en esas cosas.

—Claro. —en su voz ya se aprecian la duda. —Sígueme. —sus piernas empezaron a andar hacía el ascensor a pasos largos haciendo que Geno dejara de estar sentando para seguirle con algo de rapidez.

Al estar ya ambos, persona y esqueleto, en el ascensor, Cross presionó el botón al piso tres, su expresión seria no cambió en ningún momento, el de cuenca dañada jugaba con sus falanges en un intento de calmarse mientras que el otro lo veía de reojo pensando ya en como decirle que no iba a aceptar una entrevista si no era la persona indicada.

Antes de que el ascensor se detuviera el celular de Geno recibió una llamada a la cual esté respondió con rapidez, atendería a esa persona ya para que no moleste después.

—A-aló, ¿con quién hablo?

—Pensé que ya me tendrías agendado en tus contactos. —era Asriel.

—¡Oh! Mil disculpas, joven Asriel... —notó cómo Cross lo observó de reojo, poniéndolo más nervioso aún.

—¿Dónde estás? Me dijeron que no renunciaste así que debo de cumplir mi parte del trato.

—¿Parte del trato? —no recordaba bien que hubieran tenido un acuerdo, a no ser que...

La puerta del ascensor se abrió por lo que Cross salió de este y se quedó un segundo mirando a Geno hasta que este salió y siguió sus pasos mientras seguía en la llamada.

—Ya veo. —susurró. —¡Me encanta dar sorpresas! Iré a recogerte, ¿dónde estás?

—Es que... Estoy en medio de un compromiso. —la duda y el temor se presentaron en su voz.

—Bien, entonces dime a qué hora estarás libre para pasar por ti. —el esqueleto no se esperaba esa respuesta.

—Bueno, eh... Posiblemente en una hora, la dirección... No sé si conozca el conjunto de departamentos "Star Magma"... —sostenía con fuerza su celular mientras veía como el contrario abría la puerta de su habitación.

—Avenida Lincoln 3201. —dijo Cross dirigido hacia el mayor mientras se hacía a un lado para que Geno pasara primero, ya estaba resignado a dar la entrevista al ser inundado por la pena y para que ese esqueleto no lo tildara de racista.

—El que está en la avenida Lincoln, con número 3201. —tanto sus pasos como su voz se entorpecieron al decir la dirección.

—Si, justo iba a decir la avenida, está bien, iré por ti dentro de media hora, no importa si tardas un poco más, seré paciente. —y colgó la llamada sin dar más detalles.

—De acuerdo... —guardó su celular y soltó un suspiro. Al alzar su vista recordó que estaba por dar la entrevista más importante de su vida.

El departamento era acogedor, las paredes estaban pintadas de color blanco mientras que las columnas de verde claro y el piso de color blanco. Los muebles eran sencillos y modernos, en su mayoría blancos o de madera medio oscura.

Pasarela [AfterDeath]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora