It's gotta be you | Haesoo

"Fue como si coincidiéramos"

N/A: Para ser honestos, no me convencen mucho los títulos que les pongo a los capítulos, quizás los cambie pero no sé cómo ponerles. ¿Y vieron la nueva portada?, ¿qué tal? Me la dieron editando porque no sirvo para esas cosas, ¡espero que les guste!

Narrador omnisciente

Al día siguiente, Jisoo y Haein habían planeado reunirse con el fin de conocerse más y lograr la tan ansiada química por el director. Después de todo, eso es lo que hacían muchos protagonistas de k-dramas al ser la pareja principal.

Haein estaba preparándose para salir y se sentía algo nervioso, no es como si todos los días fuera al apartamento de una chica que encima, es famosa internacionalmente y, para mala suerte de él, o quizás buena suerte, es increíblemente atractiva. 

No quería causar una mala impresión así que escogió su vestimenta cuidadosamente. Era casi hora de salir, y esta vez, sí estaba a tiempo. Rápidamente agarró su celular y su cubrebocas. Se dirigió a su auto, prendió el GPS y se puso en marcha.

Jisoo, mientras tanto, se encontraba relajada. Tenía confianza en sí misma y creía que gracias a su personalidad, lograría sentirse cómoda con Haein, pero no contaba con que sus sentimientos se volverían en contra de ella a medida que pase más tiempo con ėl. De todas formas, se preparó y escogió algo casual para usar.

Los minutos pasaban y Haein estaba por llegar. Jisoo, por su parte, se encontraba tomándose algunas selfies como de costumbre hasta que sintió que sonaba el timbre y salió apresurada, no sin antes ponerse su cubrebocas y preparar el alcohol antiséptico.

N/A: Escribir esto me da mucha risa la verdad, siento que debería descartar esto del covid pero eso quitaría lo realista que quiero hacer la historia, ya que me enfoco en 2020 y ya sabemos que ahí ya andaba el bicho. No sé bien qué hacer efe.

Cuando Jisoo abrió la puerta y se encontró con él, su mundo se paralizó por un segundo. Miles de pensamientos pasaron por su cabeza y uno de ellos era acerca de lo bien que se veía aquel hombre, lo cual, nunca lo admitiría abiertamente, al menos, no en un futuro cercano. Él, por su parte, evitaba a toda costa mirarla a la cara, puesto que si lo hacía, temía ponerse nervioso y arruinar la situación. 

— Annyeonghaseyo, Jisoo-ssi —la saludó cortésmente— ¿puedo pasar? —preguntó inocentemente mientras una perdida Jisoo asentía con la cabeza.

— Annyeonghaseyo, sunbaenim —respondió la menor recuperando su postura mientras se hacía a un lado y desinfectaba al invitado—. Puedes retirarte el cubrebocas si gustas —. Haein asintió sacándose el objeto de su cara.

Ambos se dirigieron a la sala de estar sin saber exactamente qué hacer. Se sentaron uno al lado del otro evitando el contacto físico a toda costa y pensando en cómo iniciar una conversación. Jisoo pensó que debía tomar la iniciativa puesto que, el pobre chico parecía estar perdido. 

— Así que —comenzó la chica llamando la atención del mayor—... ¿Qué te gustaría hacer? Digo, podríamos jugar algún videojuego o tal vez hacer apuestas y el que pierde le hace una pregunta al otro, no lo sé —titubeó Jisoo mientras él escuchaba atento.

— Voy por la primera opción pero con un toque de la segunda —respondió él en un tono menos tenso y algo desafiante.

— Arasseo, pero te advierto que no lo tendrás tan fácil —se animó Jisoo—. ¿Sabes? A veces me pongo a jugar en mis tiempos libres y soy la que gana la mayoría de rondas cuando compito con mis miembros.

Haein solo pudo sonreír ante tal confesión de la chica. Claro que ya investigó algo sobre ella y sabía que era amante de los videojuegos pero aun así, le sigue sorprendiendo. Jisoo se paró de su asiento, procedió a conectar algunos cables y prender la TV con el juego en pantalla.