CAPITULO 6

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Estaban listos para la competencia, los líderes se habían posicionado en sus lugares, aunque no estaban conformes, pues el líder Wen se sentaba en su trono que estaba más alto al de los asientos de los otros líderes, empezando la furia e indignación de los últimos, en especial la de Nie Mingjue. Se conocía que este tenía un gran odio y resentimiento hacia los Wen, pues los culpaba -en especial a Wen Ruohan- de la muerte de su padre.

Dando la bienvenida y las reglas respectivas de la competencia sin dejar de observar al discípulo principal de Yunmeng Jiang, haciendo sentir incómodo y un poco asustado al mencionado, Wen Ruohan comenzó la competencia.

Así, cada líder veía como tanto sus herederos como sus discípulos iban entrando para enorgullecer cada uno a sus sectas y líderes respectivos.

Después de un silencio entre los mayores, inesperadamente fue Wen Ruohan el que habló primero.

-Jiang Zongzhu- Jiang Fengmian giró su cabeza hacia el de vestimenta roja, sorprendido por el llamado.

-¿Sí, Wen Zongzhu?- contestó después de salir de su trance.

-He escuchado durante el último año, ciertas...noticias acerca de tú discípulo principal.

Jiang Fengmian se dió cuenta ahora sí del por que fue llamado, sabía que tarde o temprano Wen Ruohan empezaría a hablar del tema, no esperó que fuera tan pronto. Sintiendo una molestia en su estómago, habló.

-Y...¿qué ha escuchado en específico el cultivador en jefe? ¿Sí se podría saber?

-Wei Wuxian ya no está comprometido, el compromiso se rompió por una disputa entre tu hijo y el segundo heredero Lan, ¿no es así?- dijo con una sonrisa triunfante.

-Sí fue así...¿por qué tanta importancia entre situaciones de sectas ajenas a la suya?, Wen Zongzhu- mencionó Jiang Fengmian con una sonrisa tensa.

Wen Ruohan aparte de sentirse ofendido, rió tan fuerte para sorpresa de todos los presentes que veían el intercambio de palabras entre los dos.

-Jiang Fengmian, lo he pensado mucho y creo que tú también deberías. Es mejor que Wei Wuxian se case con mi hijo Wen Xu que es fuerte, educado, con buenos modales y para nada en el mundo ignorará a tu hijo, después de todo mi hijo está más que encantado con el tuyo. Es más A-Xu lo pondría en un altar y lo veneraría todos los días si eso fuera posible- dijo ignorando la mirada severa que le dió Lan Qiren -¿No lo crees así? Nuestras diferencias quedarían atrás y tendríamos una gran alianza.

Jiang Fengmian estaba en shock, realmente este hombre-¿si quiera podría llamarlo hombre? era tan descarado en decir todas esas cosas al frente de todos ¿¡y pedir a A-Xian como si fuera un objeto!?

-Wen Zongzhu, disculpe no estar de acuerdo con usted- dijo lo más amable posible -Pero hemos hablado con A-Xian antes y es su deseo el casarse con la persona que él escogiera y nosotros respetamos esa decisión.- terminó diciéndole al de rojo con una sonrisa leve pero con una mirada filosa.

-Oh- se escuchó decir al Wen -no importa, tal vez y mi hijo logre conquistar al tuyo, veremos que pasa.

Wen Ruohan apesar de que se veía confiado, en su interior no estaba para nada feliz, prácticamente lo habían rechazado indirectamente, frente al resto de líderes, siendo la burla de los demás y eso no lo iba a permitir, después vería cómo se las haría pagar y poder lograr obtener como yerno al hermoso doncel.

Por ahora se concentró en la competencia, pero al ver como en el cielo despejado se veían colores morado, azul, amarillos y ninguno de color rojo, su expresión comenzó a volverse sombría.

-¡Primer lugar, Gusu Lan, Lan Wangji!- Se escuchó decir al discípulo encargado de anunciar a los ganadores.

-¡Segundo lugar, Yunmeng Jiang, Wei Wuxian!- se escuchó el segundo grito

-¡Tercer lugar, Gusu Lan, Lan Xichen!

-¡Tercer lugar, Yunmeng Jiang, Jiang Wanyin!

-¡Cuarto lugar, Lanling Jin, Jin Zixuan!

-¡Quinto lugar, Qishan Wen, Wen Qionglin!

-¡Sexto lugar, Qinghe Nie, Nie Huaisang!

Al conocer las posiciones de cada uno, los discípulos no evitaron empezar a alabar a sus herederos e incluso los dichos mencionados se felicitaban entre sí ya sea por amistad o por la simple cortesía que debían tener. Lan Xichen sintiéndose orgulloso de su hermano, se acercó a él para darle unas palabras.

-¡Wangji!- llamó.

-Hermano- contestó

-Wangji, felicidades, estuviste en primer lugar, tu Gege está muy orgulloso de ti.

-Mhm, gracias- respondió el menor de ambos y aunque su expresión no reflejara nada, Xichen había visto rojas las orejas de su hermano en señal de estar avergonzado por sus palabras anteriores.

Simplemente se rió para sí mismo y empezando a caminar escucharon varias voces a su alrededor.

-¿Lan Er-gonzi en primer lugar y Wei-gonzi en segundo lugar?, ¿por qué no me sorprende? Ambos son tan talentosos como guapos.- Se escuchó el primer comentario.

-Es una pena.

-¿Una pena? ¿De qué hablas? Ambos están en los primeros puestos.

-¿Cómo es posible que no sepas? Wei Wuxian y Lan Wangji estaban comprometidos, pero ocurrió algo en Gusu que hizo que el compromiso se rompiera.

-Oh, es verdad, se dice que Lan Wangji despreció a Wei Wuxian y que Jiang Wanyin al defender a su hermano, le propinó un golpe a Lan Er-gonzi- se sumó un nuevo discípulo para completar la historia

Lan Xichen volteó hacia su hermano, podía leer cada una de las expresiones de su hermano y en este momento podría asegurar que no estaba feliz e incluso podía verse en el puño que apretaba fuertemente alrededor de su espada.

-Por eso es una pena, ambos juntos son la pareja perfecta, tks, una pena el que fuera un matrimonio arreglado y ahora uno roto.

-Si fuera yo y tuviera un prometido como Wei Wuxian, ¡no lo dejaría ir por nada del mundo! quién en el mundo de la cultivación podría dejar ir a una persona como Wei Wuxian, que es el mismo sol en persona, amable, de buen corazón, inteligente, fuerte y sobre todo tan hermoso- dijo uno de los discípulos Jiang, recordando a su joven maestro y lo hermoso que era este.

En ese mismo momento nadie pudo decir lo contrario, pues todos acordaban las palabras del discípulo Jiang.

Hubieran seguido hablando si no fuera por que un pequeño escalofrío recorrió su espalda, al voltear se dieron cuenta que el mismísimo Lan WangJi los fulminaba con la mirada, por lo que todos ellos se quedaron callados y volvieron cada uno a sus respectivas sectas.

-Wangji, cálmate, verás que en unos días todo pasará y ya no hablarán de ti ni del Joven maestro Wei- mencionó preocupado por la reacción de su Didi.

-Está bien.

-Bien, ¿vamos?, tío debe estar esperándonos.

-Mhm.

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