capítulo 15

92 14 0
                                    

Luciano

— ¿estas loco? – le digo a Clemente pasando por su lado – Kate se pondrá furiosa.

— Estoy seguro que ni siquiera se acuerda de mi – dice dándome un empujón.

— Sigo sin entender a qué quieres ir.

— Solo quiero saber si esta bien ¿sí?

— ¿Te enamoraste? – pregunto riendo – te enamoraste de una chica que te uso y te desecho como la mierda que eres.

Suelto una carcajada cuando su cara se deforma furioso.

— Eres un imbécil, al menos yo hare algo ¿tu que has hecho para declararle tu amor a tu cuñada?

— Baja la voz – digo furioso – no te metas en mis cosas.

— Y tu no te metas en las mías.

— Si lo jodes, te mato. Ella ya tiene novio.

— Solo iré a mirar, luego me iré. Lo prometo.

Una hora después estamos esperando a Camila en el vestíbulo, escucho sus tacones bajar la escalera, cuando se vuelve me quedo en silencio y mi boca se abre. Se ve espectacular, hermosa.

— Te ves increíble – digo mientras la ayudo a bajar el último escalón

— Gracias ¿no será mucho? Es un día especial pero no quiero opacar a Kate.

Miro a Clemente con lastima, estoy seguro que Kate se comprometerá.

— Estas muy guapa – dice mi amigo tomando en brazos a Nicolás.

Cuando llegamos al restaurante ayudo a bajar a Camila del coche, mientras Clemente ayuda a mi sobrino.

Nos reciben las llaves del auto y entramos, todo esta decorado de una manera sobria, se ve fino. Kate nos saluda desde a una mesa lejana y se pone de pie rápidamente para llegar hasta nosotros, cuando lo hace un jadeo de sorpresa escapad de su boca al ver a Clemente.

— Tú – dice con desde.

— Kate, este es Clemente el mejor amigo de Luciano – dice rápidamente Camila – estaba en casa y pensé que podría venir.

— Oh dios mío, eres aún más hermosa de lo que recuerdo – dice mi amigo y le doy un codazo en el estómago.

— Mierda – dice ella mientras mira hacia atrás, donde un hombre levanta la mano y la saluda, ella hace lo mismo. – me voy a casar.

Dice mientras mira directamente hacia Clemente, el dolor en los ojos de mi amigo me hace sentir pena por él.

— Y- yo – dice tartamudeando – no lo sabía, perdón.

— ¿Qué esta pasando? – pregunta Camila mirando entre ellos dos.

— Nada – dice Clemente – felicidades, creo que seria mejor si me voy.

Kate asiente y toma la mano de su amiga llevándola a la mesa.

— Te acompaño a la salida – le digo dándole un apretón en el hombro.

— Eso fue horrible – dice tratando de sonreír – creo que llegue muy tarde.

— Amigo, nunca es tarde. Estoy seguro que Kate ha pensado en ti.

— Pero se va a casar Luciano, no hay esperanza.

Me despido de mi mejor amigo y vuelvo a entrar, me siento al lado de Camila mientras ella habla alegremente con todos en la mesa ignorando mi presencia. Saludo a algunas personas y presto toda mi atención a mi sobrino que esta contando una nueva historia.

La Última Carrera (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora