Bajo la misma luna

8

Salí del salón de clases, no hable con mis amigas desde la cafetería ayer, pero sus mensajes de texto indicaban que si estaban preocupadas por mi.
Ricky no se presento a clases, eso me preocupaba porque su madre era tan exigente que nunca lo dejo faltar., Camine hacía mi casillero y me di cuenta de que había una nota pegada en el.

"Nos vemos en el patío a la hora del descanso"

Leí, la nota no estaba firmada o marcada, mire a mi alrededor pero no había nadie que la pudo haber dejado.

El resto de las clases estuve solo contando el tiempo para que dieran las 10:00am y salír al patio como decía la nota.
Camine un poco asustada, mis ojos buscaban a alguna persona ya que aun no había nadie en el patio. Entre mis pasos encontre otra nota, esta decía.

"Si quieres repetir la historia pero cambiar el final, por favor ve hacia el estacionamiento, tengo una sudadera gris"

Esto era como una clase de acertijo, solo que me daba un poco de miedo, pense en la persona que pudo haber puesto las notas, Ricky, pero despues recorde que el me llamo "Nina"
Pudo haber sido Ej, pero el no tenía ese tipo de letra, definitivamente no era el.

llegue al estacionamiento y mis ojos buscaron al chico con sudadera gris, estaba de espaldas recargado en un auto blanco.

-¡Hey!-

Grite, el chico volteo y al verlo mis ojos se abrieron más, mis mejllas se pusieron como un tomate, y mi corazón se doblo.
Ricky me hizo una seña con su mano para que me acercara, camine lentamente a el hasta llegar al auto blanco. Lo mire con unos ojos culpables y cristalizados, el me miro tambien, hizo lo que no había hecho en semanas o incluso en más tiempo, sonreir. Su sonrisa fue tan sincera que hizo que sus ojos comenzaran a llover, abrio sus manos en señal de un abrazo, sin pensarlo dos veces me lance hacia el con mis ojos llorando. Fue lo mejor que me paso desde el campamento. Sin decir ninguna palabra, solo escuchando su respiracion entrecortada y sintiendo sus lagrimas caer en mi cuello, supe que el no había dejado de amarme. Lo supe por lo que dijo Ricky una vez.

"Las personas que dejan de amar no dan segundas oportunidades, si alguna vez te llamo por tu nombre, no pienses que deje de amarte, porque despues ire de nuevo a buscarte"

-Te extrañe tanto-

Dije con los ojos cerrados recostando mi cabeza en su hombro.

-Yo tambien-

Susurro, las lagrimas no lo dejaban así que no podía hablar.

-Nunca más me vuelvas a dejar, ¿okay?-

-Hasta que las estrellas desaparezcan-