𓈈Capítulo 12𓈈

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- Ustedes quédense aquí. - demandó el castaño mientras le quitaba su lanza al cerdo y la princesa.

- Por supuesto que no, nosotros debemos ir. -mencionó Ángel a un lado de la capitana.

- Que necio eres. -suspiro King y lo miro a los ojos. - No quiero que te arriesgues, además, con Chastiefol acabaré esto rápido.

- Quizás puedas decirle a él que no, pero yo debo ir, soy la capitana de los pecados mortales.

King podía ver su determinación, pero solo la miraba de manera sería, hasta que este mismo lanzo su lanza hacia la pelirroja, la cual la esquivo fácilmente pues había memorizado su patrón de ataque, está misma corrió hasta la lanza logrando quedar sobre ella con bastante equilibrio tal como el castaño lo hacía dejando sorprendido a ambos hadas. El de orbes ámbar volvió a su lanza en guardián y lanzo con un golpe a la de orbes verde quien fue atrapada por el azabache.

- S-señor King, ¿Porque-

- No importa si eres la capitana de los pecados mortales, sigues siendo... humana. -mencionó de manera sería.

- ¿Cómo rayos sigues pensando así después de tantos años? ¡No importa que no quieras que vaya! ¡Soy Hemlock, el águila de la Apatía!

- Debo protegerte maldita sea. -murmuro el de orbes ámbar mientras apuntaba con su lanza a los pecados. - Necesito que te quedes aquí.

Ángel estaba apuntó de sacar su tesoro sagrado pero la pelirroja le detuvo.

- No vale la pena, el verdadero enemigo está allá. -la de orbes verde se giró hacia el hada. - Ayúdalos.

El castaño se estremeció un poco por el tono tan serio, este solo asintió y salió volando hacia donde se desataba la batalla, mientras se arrepentía de haber intentado atacar a los mortales.

— ¿¡Qué demonios le pasa!? -se quejó el de mechones rubios.

— Hermanos mayores. -habló indiferente la pelirroja mirando hacia donde se fue el hada.

— El señor King... ¿Odia a los humanos? - pregunto Elizabeth.

— No, solo... Les tienes un poco de rencor. -bajo la mirada Ángel por unos segundos llamando la atención de la pelirroja y luego observo a la princesa. - Pero en cuanto hable con ustedes, será diferente.

— No importa, vayamos a buscar a los cerdos. - opinó Hawk y todos asintieron comenzando a caminar hacia ellos.

La pelirrojo rebusco en su bolso un cristal similar al que le entregó a los pecados mortales, le susurro unas palabras y su anillo junto al cristal brillaron hasta que el reflejo de Malik se vio en el espejo.

Ahh~ Capitana~ Me asustaste, esta cosa comenzó a brillar, casi se cae y la rompo. -sonrió el rubio y el cristal le fue arrebatado por la de cabellos frambuesa.

— Oiga capitana, ¿encontró a Ángel? -el nombrado se acercó a la pelirroja y los saludo.

— ¿Pueden mostrarme lo que está pasando? -pregunto la pelirroja quien corría detrás del cerdo y a un lado del hada.

Los nombrados se miraron y apuntador el cristal hacia la batalla, dejando ver a King detrás del zorro de la avaricia mientras este era atravesado por la lanza del hada.

— Tu traición no es del todo inesperada, oso de la pereza. -menciono la caballero.

— Inesperado es lo que tú me estás diciendo, no recuerdo haber abrazado los Caballeros sacros conscientemente -levanto sus hombros ligeramente sin dejar de verla. -el reino quiere derrocar a los 7 pecados capitales y yo quería destruir a Ban; tuvimos intereses en común por un tiempo y eso fue todo, pero las cosas han cambiado. -explicó el castaño de manera neutral.

𝙿𝙴𝙲𝙰𝙳𝙾𝚂 𝙼𝙾𝚁𝚃𝙰𝙻𝙴𝚂 (Nanatsu No Taizai)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora