The Hunter's Eyes (3)

once

— Donde sea que estén Liam y los demás, sacalos — ordenó Lena por teléfono.

—¿Quieres tiempo para pensar un plan o pedir ayuda? — preguntó Theo, del otro lado de la línea.

—Necesitamos ambas — admitió — Pero lo que más me importa es que saques a Liam de allí en una pieza, ¿entendido?

— Sí, sé lo mucho que él significa para ti, Lena.

— Exacto...— contestó para luego soltar un suspiro — Oye, lamento las cosas que dije cuando estábamos en los túneles...

— Lena no tienes que disculparte para que salve a Liam.

— Lo sé, no es eso. Confío en ti — confesó — Y sabes que no confío tal fácilmente así que cuando digo que confío en ti, por favor no hagas que me arrepienta.

—Sabia que en el fondo de tu corazón, si es que tienes, seguías viéndome como tu mejor amigo, Len. — soltó sarcástico.

— No te pases de listo, dije que confío en ti, no que eres mi mejor amigo y seremos felices por toda la vida. Tráeme a Liam con vida y no mueras ante de eso — dicho eso, la cazadora terminó la llamada. Cuando giró se encontró con Stiles, que la observaba con curiosidad. — ¿Por qué me miras como si hubiese hecho algo malo?

— ¿Estabas hablando con Theo?— Lena asintió — ¿Desde cuándo eres su amiga?

— No soy su amiga.

— Pero dijiste que confiaba en él. Len, sabes todo lo que él me hizo, nos hizo. No podemos confiar en él.

— Lo sé, sé todo lo malo que él hizo pero en estos momentos no importa el pasado, estamos en una guerra, Stiles y a veces, tienes que aliarte con personas que nunca pensaste que volverías a hablar. Entonces, si Liam está en peligro y la única forma de salvarlo es confiar en Theo, lo haré.

— Tú, realmente, te preocupas por Liam, ¿eh?

— Él es como mi hermano, no importa que no tengamos la misma sangre. Además, no puedo o quiero perder a más personas, ya fueron suficientes.

**

Después de que Malia y Scott aseguraran la veterinaria, se acercaron a la mesa en donde Derek, Lydia, Stiles y Lena se encontraban esperando.

— Literalmente, es el primer día de mi internado y veo la imagen de un hombre perseguido por el bosque de Carolina del Norte — comentó Stiles sobre cómo se había encontrado con Derek.

— Pensé que estabas en Sudamérica — dijo Malia.

— Así es. Me culparon a mi por los cuerpos de los hombres lobo que encontré — explicó Derek, cruzando sus brazos.

— Así que, supe que el FBI acorraló a un asesino en masa salvaje...— siguió Stiles con su historia.

— Encontré un grupo de cazadores reunidos en un solo lugar — interrumpió Derek — Buscaba información.

— Pues, el FBI se enteró de eso y planeaban una redada con el equipo SWAT para atraparlo, vivo o muerto.

— ¿Siempre tuvieron mucha tensión o solo es mi imaginación? — le susurró Lena a Malia.

— Siempre. Creo que antes era peor.

— [...] Y, con Derek, todos sabemos que es mejor preferentemente muerto — insistió en seguir Stiles.

— Preferentemente — enfatizó Derek.

— Así que los convencí de llevarme a una operación de campo...